Andoni Calderón
Biblioteca
Universidad Complutense de Madrid
Los 7 Consejos de Investigación del Reino Unido cuentan desde abril de 2013 con una política de Open Access aprobada por el RCUK que los "consorcia".
Su relevancia proviene de los más de 4.000 millones de euros que dedica al año a financiar la investigación, aun cuando -como expresamente subraya- no sea la única instancia financiadora. También porque dicha política es posterior al Informe Finch (reseñado por Lluís Anglada en este mismo espacio) que sirve como referencia e inspiración.
Sus claves podrían resumirse en la apuesta por la vía dorada, aunque permita las dos vías, su dedicación exclusiva a artículos de revista y comunicaciones a congresos evaluados por pares, el establecimiento de un periodo de transición de 5 años, la financiación mediante la asignación de una única cantidad anual (block grant) a las instituciones escogidas, destinada sobre todo a pagar APCs (pagos por costes de publicación) a las revistas; y la creación de un comité independiente que debe generar una primera evaluación basada en la evidencia que permita ajustar la política, el capital empleado o el reparto de la financiación de tal modo que al término de los 5 años el 100% de las publicaciones cuya investigación ha sido financiada por los Consejos de Investigación se encuentre en acceso libre.