Australian Government Information Management Office (novembre 2010). The Australian Government's study into the Accessibility of the Portable Document Format for people with a disability (Online). <http://www.finance.gov.au/publications/pdf-accessibility-study/index.html>
El Gobierno de Australia es, como la mayoría de gobiernos anglosajones, uno de los más avanzados en la incorporación de políticas de accesibilidad, y uno de los primeros en adoptar la versión 2.0 de las Directrices para la accesibilidad al contenido web [1] , que como novedad, incluyen explícitamente la obligación de cumplir las directrices también con los documentos PDF.
El estudio "The Australian Government's study into ..."[ 2] es el resultado de un encargo de este gobierno a Vision Australia para determinar la accesibilidad real de los documentos PDF para personas con discapacidades, ya que a nivel internacional hay divergencia de opiniones en este tema. El gobierno asevera que los documentos PDF son el principal motivo de las quejas de accesibilidad recibidas en sus webs.
Vision Australia, por su parte, es una organización sin ánimo de lucro que trabaja desde hace mucho tiempo en el campo de la accesibilidad divulgando buenas prácticas y que es conocida por la creación de la barra AIS Toolbar y de la herramienta Contraste Analyzer, muy usadas en la revisión de la accesibilidad web.
Las conclusiones del estudio son contundentes: se considera que los documentos PDF no son todavía suficientemente accesibles para las personas con discapacidades y como consecuencia el gobierno propone ofrecer formatos alternativos si se quiere cumplir la accesibilidad.
Los motivos que contribuyen a esta falta de accesibilidad son tres, principalmente:
* El diseño del documento PDF
* El encaje entre las ayudas técnicas y el programa Adobe Reader
* Los conocimientos insuficientes de los usuarios finales en el manejo de este formato
El trabajo se ha realizado a través de diferentes metodologías de estudios de usuario complementarias. Se han hecho encuestas a usuarios con discapacidades, se ha hecho una consulta pública en línea, se ha realizado un estudio sobre el porcentaje de uso de las ayudas técnicas y sus propiedades, y finalmente se han realizado tests de usuarios.
Los hallazgos claves del estudio, en cada etapa de la investigación son los siguientes:
Encuestas a usuarios
Los usuarics ciegos y con baja visión son los más afectados por la inaccesibilidad de estos documentos, especialmente cuando se presentan en dos o más columnas. Uno de los aspectos que los desorienta es la falta de coherencia entre la paginación del documento y la paginación del lector Adobe Reader. Los usuarios se quejan del uso irreflexivo del PDF para comunicaciones como boletines de novedades, convocatorias, u otros que podrían ser hechas en otros formatos más simples. Y en general afirman que incluso en el caso de poder acceder a la información la experiencia de usuario es empobrecedora, lenta y frustrante. Finalmente, como barrera adicional a tener en cuenta que para valorar la accesibilidad de un PDF publicado en una página web es necesario haberlo descargado previamente.
Consulta pública en línea
El dato más relevante extraído de esta consulta es que los autores de los documentos desconocen en qué circunstancias es apropiado usar el formato PDF, no saben cómo crear de forma accesible o cómo validar su accesibilidad.
Evaluación técnica
La revisión técnica de las herramientas actuales ha servido para confirmar dos hechos: que las ayudas técnicas (software y hardware que usan las personas con discapacidades para trabajar con los ordenadores) no han incorporado soporte para los documentos PDF hasta las versiones más recientes y que actualmente el World Wide Web aún no ha divulgado técnicas suficientes para cumplir las normativas de accesibilidad con los documentos PDF.
De las ayudas testeadas ZoomText y JAWS son las de mayor uso en Australia (también en España). JAWS es la herramienta que mejor soporte da al formato, ZoomText y Magic dan un apoyo suficiente, mientras que otras herramientas como PAC Mate, BrailleNote, NVDA o Windows Eyes no ofrecen suficientes herramientas para trabajar con este tipo de documentos.
Tests de usuarios
En los tests de usuarios se hizo énfasis en los aspectos que habían aparecido como más problemáticos en las encuestas y la consulta pública y en los colectivos más afectados. Se crearon dos conjuntos de documentos a probar para usuarios ciegos y con baja visión: un conjunto de documentos bien diseñados y totalmente accesibles y un conjunto de documentos reales publicados por el gobierno de Australia. Con el primer conjunto de documentos las tareas propuestas se pudieron cumplir con un 90% de éxito. Con el segundo sólo con un 60% de éxito.
Los tests permitieron observar que incluso las ayudas técnicas que ofrecen soporte al formato presentan grandes problemas de usabilidad.
Como conclusión lateral, el estudio afirma que la accesibilidad de una información no se puede valorar sólo con una evaluación técnica ya que también hay que conocer la experiencia de usuario, que depende de muchos factores situacionales.
El estudio ha sido contestado por Duff Johnson [3], uno de los grandes gurús de la accesibilidad PDF, que reivindica la importancia de la nueva normativa PDF / UA (universal accessibility), a punto de hacerse oficial, como solución de muchas de las carencias detalladas.
El sr.Duff critica la propuesta final del gobierno de presentar la información en diversos formatos alternativos como poco práctica y se queja de la poca promoción que hacen los gobiernos para que las ayudas técnicas mejoren su apoyo al formato PDF. Este experto americano reclama hacer más énfasis a las conclusiones positivas del estudio (un 90% de éxito en los documentos bien hechos!) Y prestar más atención al uso generalizado del formato PDF, que se debe sobre todo a su gran portabilidad. Finalmente el autor destaca el hecho de que otros formatos presentan dificultades similares, pero que a menudo su creación está centralizada en técnicos que conocen el uso adecuado.
En cualquier caso, cualquier institución pública que en breve tenga que cumplir la legislación de accesibilidad -entre ellas la mayoría de bibliotecas, archivos, museos y centros de documentación financiados por el erario público- deberá plantearse:
* El uso que hace de los documentos PDF. Cada institución tendrá que crear una política para establecer en qué casos es adecuado este formato y en cuáles no.
* El flujo de trabajo en la creación de documentos PDF y las personas involucradas en este, para garantizar un nivel básico de accesibilidad.
* Una política de comunicación en la que se explicitar el nivel de accesibilidad de los documentos PDF publicados, y en la que habrá que explicar a los usuarios cómo aprovechar las ventajas.
Vínculos
[1] http://www.w3.org/TR/WCAG20/. Podéis encontrar la traducción al catalán (pendiente de aprovar por el W3C) a http://bd.ub.es/twcag/WCAG2CAT.html
[2] http://www.finance.gov.au/publications/pdf-accessibility-study/index.html
[3] http://www.appligent.com/talkingpdf-AGIMO-Report-Assessment