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Servei de Biblioteques, Publicacions i Arxius
Iniciativa Digital Politècnica. Oficina de Publicacions Acadèmiques Digitals
JISC (2011). Digital Monograph Technical Landscape: Exemplars and Recommendations. http://jiscpub.blogs.edina.ac.uk/final-report/ [Consulta: 28/11/2012]
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En 2011 el Joint Information Systems Committee1 (JISC) del Reino Unido inició, dentro del marco del Repository Infraestructure Programme, la elaboración de un estudio que debía servir para explorar el potencial que el formato ePub2, de edición y publicación de libros digitales, podía ofrecer cuando la edición académica, si finalmente éste es adoptado de forma generalizada en las universidades. El informe que hoy nos ocupa es el trabajo final resultante de este estudio.
El estudio presenta, pues, un estado de la cuestión cuando en la edición de libros digitales desde diferentes puntos de vista, contemplando tanto el que ha sido el mercado de estos contenidos, como su uso académico. Como colofón ofrece también una serie de recomendaciones para mejorar la implementación en la educación superior. En muchos casos no se evita ofrecer una perspectiva histórica que facilita la comprensión de la situación actual.
El alcance del documento es muy amplio y los aspectos tratados muy diversos, lo que hace que no se pueda profundizar mucho en cada uno de ellos, para ofrecer en cambio una visión suficientemente amplia cuando en la edición de libros digitales. Esta falta de profundización se ve también compensada por una buena cantidad de enlaces donde ampliar la información que nos presenta.
Desde el puntos de vista del mercado, si bien se puede considerar que el primer proyecto de edición de libros digitales es el proyecto Gutenberg3 nacido en 1971, y que la presencia de lectores y libros digitales no es precisamente nuevo, si se reconoce que fue la presentación por parte de Amazon de su lector Kindle en 2007 el que puso el punto de partida hacia la edición y disponibilidad, más o menos generalizada, de libros digitales. Kindle ofreció, en su momento, lo que muchos echaban de menos por una implementación global de este formato de lectura: disponibilidad de un amplio catálogo de títulos, un dispositivo móvil adaptado a la lectura y con un alto grado de autonomía y un formato de archivo orientado al libro digital (un formato propietario, pero).
A partir de ese momento la disponibilidad de títulos y dispositivos de lectura se ha multiplicado, así como la cifra de ventas de libros en formato digital en diferentes países.
Un hecho destacado que, sin duda, está ayudando a esta fuerte subida ha sido la adopción casi generalizada de un formato de archivo abierto, orientado a la edición de libros digitales: el formato ePub. Este formato parte de la base de reaprovechar otros estándares abiertos de edición de contenidos, como pueden ser XHTML o HTML54 en su versión más reciente, todos ellos nacidos del entorno web. De ahí que algunos digan que un libro en formato ePub es un web en una caja.
La implementación de los DRM5 o el fenómeno de la autoedición (entre otros) también son tratados en el estudio. Del primero se destaca la pugna entre editoriales y bibliotecas cuando la gestión del préstamo de libros digitales. Limitado por algunas grandes editoriales se percibe como un retroceso en la libre circulación y acceso a los libros que siempre han ofrecido las bibliotecas, y en particular una oportunidad para favorecer la disponibilidad de obras huérfanos. Cuando a las plataformas de autoedición, destaca la disponibilidad actualmente de múltiples plataformas de edición (como blogs, wikis, etc ...) o plataformas comerciales orientadas a la autoedición de contenidos académicos, como puede ser Flat World Knowledge6, que ofrecen otras posibilidades a los autores que se pueden decantar hacia estos nuevos entornos, frente a los procesos de edición más tradicionales.
En el ámbito académico, el informe destaca algunos aspectos concretos que están marcando el ritmo de adopción de los libros digitales, tales como el deseo de la comunidad académica de acceder directamente a los contenidos a través de Internet a partir de herramientas de búsqueda, el gran impulso que está teniendo el movimiento Open Access o el potencial que ofrecen los nuevos formatos de edición cuando la integración de contenidos multimedia y la interacción con el lector.
No obstante, también se pone de manifiesto algunas de las dificultades que surgen a la hora de adoptar formatos como el ePub, principalmente centradas en algunas carencias a la hora de tratar o adaptar contenidos de carácter técnico, como la formulación matemática (apenas está resuelta en las últimas versiones de ePub), el hecho de que todavía no se disponga de forma generalizada de dispositivos de lectura en color, las herramientas todavía rudimentarias y poco estandarizadas que se disponen para trabajar sobre los documentos o los problemas que surgen a la hora de citar fragmentos de textos.
Esta dificultad se ve reflejada en una fuerte presencia aún del formato PDF en el ámbito académico, que ofrece una reproducción fiel de la página en formato papel del libro. Una muestra son las plataformas de venta y suscripción a libros digitales que se citan en el informe (Cambridge Collections Online7, Springer eBooks8 y Vital Source9) muy orientadas aún a servir contenidos en formato PDF, aunque poco a poco se van acercando los nuevos formatos de publicación.
En este contexto, cabe destacar también la dualidad de lectura que se produce en el ámbito académico, más que en otros, donde se combina el acceso digital al libro con su lectura en papel. Si bien el formato digital se valora sobre todo la portabilidad, el ritmo de adopción de nuevas tecnologías de edición hace que aún haya una importante comunidad que continúa combinando el digital con el papel. Este hecho, sin embargo, tendrá los días contados, si tenemos en cuenta las necesidades de la comunidad académica, orientada cada vez más al consumo digital, así como el rápido desarrollo que se está llevando a cabo cuando los entornos de edición y de lectura digitales.
En base al análisis del informe aporta diez recomendaciones que se deberían llevar a cabo para facilitar la adopción de los libros digitales en formato ePub en el ámbito académico:
1. La implementación de herramientas de búsqueda y de descubrimiento aprovechando la disponibilidad de contenidos elaborados con estándares abiertos y estructurados.
2. La implementación de herramientas que permitan la referencia de contenidos en formato ePub.
3. El enriquecimiento de los contenidos con datos enlazados.
4. La disponibilidad de plugins que permitan la generación de contenidos en formato ePub desde diferentes procesadores de textos.
5. La disponibilidad de herramientas que permitan la migración de formatos estructurados, como pueden LaText o MathML hacia el formato ePub.
6. La mejora de las herramientas de trabajo sobre los documentos, como pueden ser las anotaciones en los textos.
7. Experimentar con herramientas de autoedición, sus formatos, sus posibilidades y su adopción dentro de los flujos de publicación.
8. Implementación de servicios de agregación de contenidos, que mejoren la visibilidad y el acceso.
9. Incrementar y maximizar la disponibilidad de obras huérfanos.
10. Ofrecer recursos, como estudios o programas, que ayuden a las organizaciones a entender e identificar los cambios que se están llevando a cabo en su entorno.
La extensión del estudio y la amplitud de los aspectos tratados ofrece una buena oportunidad para captar el escenario de la publicación digital de forma resumida, destacando sus rasgos esenciales que se pueden ampliar posteriormente gracias a la cantidad de ejemplos que nos ofrece.
