En el caso de nombres de cargos u oficios (o similares), son muy pocos los nombres acabados en -esa o -isa que, para referirse a una mujer, tanto admiten esta forma de femenino como una forma invariable (coincidente para el masculino y el femenino). En estos casos, se recomienda mayoritariamente el uso de las formas invariables.
la cónsul
la consulesa
la líder
la lideresa
la poeta
la poetisa
Pero, para visibilizar a las mujeres que ocupan este cargo,
«Femeninos en -esa, -isa» [en línia]. A: Llibre d’estil de la Universitat de Barcelona. Barcelona: Universitat de Barcelona. Serveis Lingüístics. <https://www.ub.edu/llibre-estil/criteri.php?id=2875> [consulta: 24 novembre 2024].