Robustiana Armiño de Cuesta
El Correo de la Moda
Un momento lúcido (V)
Coraly es absuelta de todos los cargos de los que se la acusaba. Sus primos, los herederos, le dicen que la hubieran apoyado desde el principio si ella hubiera querido.
Robustiana Armiño de Cuesta
El Correo de la Moda
Un momento lúcido (IV)
Coraly es llevada ante el juez. La acompaña la madre superiora. Mientras declara, se muestra abatida. Por tratarse de una menor acusada de robo, el caso había ganado relevancia pública.
Emilia Fernández
El Correo de la Moda
Melodía
Poema de tres estrofas que la autora dedica a su hermana Julia.
Robustiana Armiño de Cuesta
El Correo de la Moda
Un momento lúcido (II)
La marquesa de Tingri, tras habérsele aplicado la extremaunción, muere. Coraly la vela de rodillas durante toda la noche mientras que Elena pide volver al convento.
Ángela Grassi
El Correo de la Moda
A la Señorita Doña Agustina de Lanuza
Robustiana Armiño de Cuesta
El Correo de la Moda
Un momento lúcido (I)
La marquesa de Tingri, incapacitada por sufrir problemas mentales, estando moribunda en su lecho le confiesa a su sobrina, huérfana adoptada por ella, que había vendido en secreto una de sus propie
Dolores Cabrera y Heredia
El Correo de la Moda
A Cristo en la cruz
En primera persona, se implora a Dios como única salida a todo el sufrimiento causado por el amor terrenal, al que se renuncia. Tras la muerte, Dios es el liberador de todo ese sufrimiento.
Ángela Grasí (así aparece en el original) / Ángela Grassi
El Correo de la Moda
A la sociedad
Poema en el que se ensalzan las virtudes de Natalia*, sin especificarse su nombre completo, tras haberla perdido. El deseo de volver a verla es constante.
Dolores Cabrera y Heredia
El Correo de la Moda
Una perla y una lágrima. Leyenda tradicional aragonesa (III)
Sol vuelve a Zaragoza como dama de compañía de un conde. Estando allí su madre muere y se le aparece en un sueño, implorándola que se arrepienta de sus acciones.
Prueba
El Correo de la Moda
Un momento lúcido (III)
El tutor de los herederos de la marquesa de Tingri, acompañado de varios hombres de su confianza, se presentan en el convento en el que se han refugiado tanto Coraly como Elena tras la muerte de la