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20-02-2024

Los cambios climáticos transformaron radicalmente los ecosistemas europeos durante la transición Eoceno-Oligoceno

La investigadora postdoctoral Aixa Tosal Alcobé, del grupo de investigación en Geología Sedimentaria del Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la Universidad de Barcelona, trabaja sobre el cambio climático durante la Transición Eoceno-Oligoceno en Europa. Está liderando un estudio que analiza las causas paleoecológicas y paleoclimáticas que influyeron en la flora del Suroeste de Europa durante este período crítico. 

La Transición Eoceno-Oligoceno (TEO; 33,9-33,3 Ma) representa el mayor cambio climático de los últimos 65 Ma. En el continente este cambio climático se caracterizó por una bajada de las temperaturas global, un aumento de la estacionalidad y una tendencia general hacia la aridez; ese cambio climático fue trascendental por los ecosistemas. 

En este intervalo de tiempo, en Europa se ve una dispersión hacia el sur de plantas tolerantes a temperaturas bajas como el roble, el platanero o el arce. Por otro lado, las plantas termófilas (plantas que no sobreviven a temperaturas bajas) que crecían de forma homogénea en toda Europa tuvieron que restringirse en el sur de Europa, donde las temperaturas eran suaves. Este hecho hizo aparecer y diversificar una flora tolerante a cierta estacionalidad de precipitación, como por ejemplo las plantas leguminosas o el azufaifo, que serían el preludio de la flora mediterránea. 

El proyecto IBERINSULA y la labor de la Dra. Tosal 

El proyecto que está llevando a cabo la investigadora Tosal busca analizar las causas paleoecológicas y paleoclimáticas que condicionaron la flora del Suroeste de Europa (España y Francia) durante la transición Eoceno-Oligoceno (TEO) y comprender mejor la influencia de ese cambio climático en el posterior origen de la flora mediterránea. Este proyecto se enmarca en un proyecto nacional del Ministerio de Ciencias e innovación titulado Iberia en el Cretácico y Paleógeno: paleoisla y puente biogeográfico. Casos de estudio en macroforaminíferos, carofitas y plantas vasculares (IBERINSULA) donde el investigador principal es Carlos Martín-Closas también investigador del IRBio y de la Facultad de Ciencias de la Tierra. 

El proyecto tiene tres objetivos principales: 

  1. Busca determinar la distribución de la flora antes y después del cambio climático de la TEO en el Suroeste de Europa (Francia y España).
  2. Conocer qué factores abióticos (clima, características morfológicas de las cuencas, etc.) influenciaron la distribución de esta flora.
  3. Comprender qué rol tuvo la península ibérica como refugio de especies de plantas, como puente biogeográfico o como foco de aparición de endemismos.

Cambios en la distribución y composición de la vegetación en la transición Eoceno-Oligoceno 

A partir de análisis detallados de las cuencas del sur de Francia y de la Cuenca del Ebro en España, los resultados obtenidos por la Dra. Tosal junto con otros investigadores han observado ciertas diferencias desconocidas anteriormente en las comunidades vegetales entre estas zonas, principalmente atribuidas a factores climáticos y geomorfológicos de las cuencas. “Teóricamente las cuencas de estas dos áreas (España y Francia) deberían tener grandes similitudes porque estaban dentro de una misma zona climática y de vegetación. A partir de los resultados que obtuvimos vimos que, efectivamente, compartían algunas especies, pero que existían ciertas diferencias. Por ejemplo, en la zona francesa encontramos algunas especies que son típicas del centro de Europa y que no encontramos en la Península Ibérica” nos explica Aixa. 

Antes del cambio climático, las cuencas francesas exhibían una mayor riqueza vegetal, con humedales que emergieron como resultado de precipitaciones más altas y una topografía que facilitaba la formación de estos ambientes. Esta gran diversidad contrastaba con la composición más árida de la vegetación en la Cuenca del Ebro: “Esta zona que hoy se sitúa en el sur de Francia representaría la transición entre la flora típica del sur de Europa y la de centro de Europa. Estas diferencias serían debidas al clima ya la diferencia de morfología de las cuencas: en el caso de Francia la morfología de la cuenca permitiría que se formaran zonas de humedales con una biodiversidad y una flora particular.” Esto, a su vez, ha llevado a la conclusión de que la Península Ibérica podría haber actuado como refugio para diversas especies vegetales durante este período crítico, así como quizás dar origen a endemismos, como se destaca en el estudio de la planta Rhus asymmetrica. 

Durante su estancia en Francia en el Muséum national de Histoire naturelle de París trabajó también con grupos de investigación del Centre Européen de Recherche y de Enseignement des Géosciences del Environnement (CEREGE) con quien sigue colaborando de forma continua: “Con los grupos de investigación franceses hemos congeniado muy bien y mi perfil es bastante complementario al suyo. Ellos son biólogos y yo aporto toda la parte de geología, cambios espacio-temporales de los ambientes de la cuenca y también de hábitat de plantas y ellos la experiencia en taxonomía, atribución de las especias, y adaptaciones ecológicas de las plantas. Tenemos proyectos abiertos con dos o tres cuencas y en primavera hacemos campañas de campo juntos donde cada uno con su trabajo preestablecido según su formación aporta su granito de arena. Realmente, entre todos aportamos ideas interesantes", dice Aixa. 

Los siguientes pasos en esta búsqueda 

La Dra. Tosal identifica que todavía falta mucho camino por recorrer en su ámbito de trabajo: “Por ejemplo, falta caracterizar en detalle cómo fue el cambio climático de la Transición Eoceno-Oligoceno, ya que hasta hace pocos años se pensaba que fue gradual, pero los resultados obtenidos muestran que ese cambio fue mucho más complejo. Así pues, el futuro de mis investigaciones es estudiar cómo afectó a la dinámica de la vegetación en otras cuencas del sur de Europa.” 

Con sus descubrimientos, la Dra. Tosal avanza en el campo de la paleoecología y el paleoclima, pero también abre camino para más investigaciones que profundicen en los complejos cambios climáticos que moldearon Europa a lo largo de millones de años. 

¿Cómo es ser mujer en el mundo de la investigación? 

La Dra. Tosal nos destaca que, a pesar de sus logros científicos, ha tenido que superar varias barreras de género a lo largo de su carrera. Desde comentarios machistas al principio de su trayectoria hasta la percepción constante de la necesidad de demostrar su competencia como mujer investigadora: “Por ser mujer tengo que estar constantemente demostrando mi valía y muchas veces se me exige mucho más que un hombre con la misma posición laboral.” 

Además, explica que el número de mujeres en la facultad era y sigue siendo muy bajo y con muy pocos referentes históricos femeninos: “Esta situación se agravó cuando cursé el máster donde tan solo había una única mujer profesora que nos hizo clases. En ese momento me planteé si hay sitio para una mujer dentro de esta especialidad. Sin embargo, yo quise seguir haciendo investigación, en parte gracias a los ánimos recibidos por algunos profesores que tuve durante la carrera de Geología de la Universidad de Barcelona.” Por último, el compromiso de la Dra. Tosal con la búsqueda y superación de las barreras de género son una inspiración para las futuras generaciones de científicas.