La agroecología en un mundo que se calienta: ¿qué oportunidades para adaptarse a las crisis?
La agroecología, un campo dedicado al desarrollo de prácticas agrícolas sostenibles, está tomando bastante como alternativa para reducir el impacto ambiental y mejorar la productividad agrícola Uno de los proyectos actuales más ambiciosos se centra en la adaptación de estas prácticas a zonas mediterráneas y tropicales, con un enfoque en la restauración de suelos degradados y la mitigación de los efectos del cambio climático. Después de casi una década de investigación en Suiza, La Dra. Laura Armengot ha vuelto para aplicar sus conocimientos en la región mediterránea.
Inicio del proyecto VITIBOSC para adaptar el viñedo al cambio climático mediante sistemas agroforestales
La agroecología está experimentando un impulso con el nuevo proyecto demostrativo financiado por el Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalidad de Cataluña, llamado VITIBOSC, este proyecto tiene como objetivo adaptar el cultivo del viñedo a los efectos del cambio climático. a través de la implementación de sistemas agroforestales, que incluyen la plantación de árboles entre los viñedos para mitigar el aumento de temperaturas y mejorar la biodiversidad.
El proyecto, liderado por la Universidad de Barcelona, instalará a principios del próximo año una parcela piloto en una finca de las Bodegas Familia Torres, en el Penedès. Esta iniciativa pionera busca proporcionar un modelo práctico para el sector vitivinícola catalán, basado en la experiencia positiva de sistemas agroforestales en otras regiones de Europa, como Francia y Suiza.
Además de la instalación de la parcela, se prevén varias jornadas demostrativas hacia finales de 2025, para transferir el conocimiento generado al sector y fomentar la adopción de estas prácticas sostenibles. sistemas agroforestales, que incluyen la protección de la uva del exceso de radiación solar, el aumento de la materia orgánica del suelo y la reducción de la necesidad de riego.
Laura Armengot destaca que esta iniciativa ofrece una oportunidad única para demostrar la eficacia de los sistemas agroforestales en el contexto mediterráneo y ayudar a hacer frente a los retos que plantea el cambio climático.
Beneficios de los sistemas agroecológicos
Los sistemas agroforestales ofrecen múltiples beneficios, como la mejora de la biodiversidad y la acumulación de carbono en el suelo. Además, los árboles plantados entre los cultivos proporcionan sombra, ayudando a mitigar los efectos del exceso de radiación solar sobre las cepas. Especialmente en un contexto de sequía creciente y cambios en las condiciones climáticas.
En zonas tropicales, la investigación de la Dra. Armengot se ha centrado en comparar diferentes sistemas de producción de cacao, incluyendo monocultivos y sistemas agroforestales. prometedores en términos de captura de carbono y aumento de la biodiversidad.
La transición hacia estos modelos agroecológicos, aunque lenta, ofrece soluciones viables para abordar los retos actuales de la agricultura intensiva. medio ambiente Aunque existen obstáculos, como el uso continuado de pesticidas y la falta de incentivos para los productores, hay indicios de que los sistemas agroecológicos podrían ser una clave para garantizar una producción agrícola más sostenible y resiliente en el futuro. Este enfoque permite no sólo aumentar la fertilidad del suelo, sino también reducir la dependencia de productos químicos sintéticos y maquinaria intensiva en petróleo, aportando beneficios tanto ambientales como económicos.
Un futuro agroecológico para una agricultura más resiliente
Uno de los retos principales para la adopción de prácticas agroecológicas es la transición desde un modelo agrícola intensivo y convencional hacia sistemas más sostenibles y resilientes. La aplicación de técnicas como los sistemas agroforestales, la labor reducido o los cultivos de cobertura requiere una inversión inicial y un cambio de mentalidad en los productores, que a menudo se ven frenados por la carencia de apoyo político y recursos económicos. adaptar estos sistemas a condiciones específicas, como los suelos mediterráneos pobres en materia orgánica o los efectos crecientes del cambio climático, aumenta la complejidad del proceso. La falta de normativas claras para certificar estos sistemas agroecológicos, así como los desafíos logísticos, también dificultan su implementación generalizada Sin embargo, con ejemplos de buenas prácticas y un soporte firme, se puede impulsar esta transición hacia una agricultura. que beneficie tanto al medio ambiente como a los productores.
Los proyectos en marcha muestran el potencial de la agroecología para transformar los actuales sistemas agrícolas. VITIBOSC es un ejemplo de iniciativas agroecológicas que podrían marcar un punto de inflexión en la adaptación de los cultivos al cambio climático, aportando soluciones innovadoras e integradoras que beneficien tanto al sector como al medio ambiente. Aunque el camino sea complejo, los investigadores están convencidos de que, con un adecuado apoyo, se podrá avanzar hacia una agricultura que asegure sistemas productivos más sostenibles a largo plazo.