Biografía

Partimos de una falta exagerada de documentación acerca de la autora, y todos los datos biográficos que conservamos se ven constantemente sujetos a debate. Se ha llegado, incluso, a poner en duda su existencia. No obstante, se ha demostrado que Zayas nació en 1590 en la corte madrileña, hija del mayordomo del Conde de Lemos, por lo que se educó en las letras desde muy joven. Muchos escritores coetáneos prestigiosos han testimoniado su brillantez literaria. Cuando se publican sus últimas novelas, en 1647, se pierde el rastro de la escritora, y se baraja 1661 como posible año de defunción.

Sinopsis

El título original es Parte segunda del sarao y entretenimiento honesto y es la secuela de una primera serie de novelas que pretendía entretener a una cortesana, Lisis, en su enfermedad. Ahora se cambia el marco narrativo y Lisis reúne a sus amigas para celebrar su boda con don Diego. Son diez “desengaños” los que se narran y en su totalidad están contados por mujeres, que reciben el encargo de Lisis de desengañar sobre los atrevimientos de los hombres. Así, todos los “desengaños” tratarán de lo nocivo que es el amor para el conjunto de las mujeres, sirviendo de advertencia tanto para los personajes de ficción como para quien lee.

Reseña

Se trata de un compendio de novelas cortas de altísimo interés a muchos niveles. Estos Desengaños amorosos (título acogido por la crítica, pero no original) servirán para ejemplificar la pesadumbre a la que están destinadas las mujeres, y algunas claves para sobrevivir al constante peligro masculino.

Según Zayas, de lo que se tienen que proteger las mujeres es lo mismo de lo que se tienen que responsabilizar los hombres: el mantenimiento de su honor y su honra. En el caso de las mujeres, ellas deben tener cautela de los atrevimientos masculinos, porque los hombres, tanto por sus acciones como por sus opiniones, determinan su valía y su condición de honradas. Debe tenerse en cuenta que, en la época, las mujeres no ostentan honra por sí mismas, sino que dependen en un primer momento de sus padres y, una vez casadas, de sus maridos.

Cada una de las diez novelas tiene un argumento independiente, correspondiendo a las narraciones que comparten cada una de las invitadas delante de la audiencia de Lisis y, salvo en el Desengaño primero, ninguna historia tiene vinculación con el marco general. En su mayoría, son las propias narradoras quienes han vivido sus desengaños en primera persona, pero, en otros muchos, se limitan a trasladar lo que les ha sido contado a ellas, lo cual es muestra de la capacidad y solvencia literaria de María de Zayas.

La primera en desengañar es doña Isabel, bajo el seudónimo de Zelima. Se muestra con la apariencia prototípica de la mora esclavizada del siglo xvii, de hecho, se nos narra que está esclavizada por Lisis. Lo primero que hace al narrar su historia es quitarse los hierros de la cara descubriendo así su belleza, dejando al auditorio perplejo. La belleza de las mujeres en los Desengaños amorosos será capital. Doña Isabel se calificará a ella misma como la “esclava de su amante” (sintagma que se utiliza para dar título a esta novela) sugiriendo el homoerotismo lésbico constante de la obra zayesca. A partir de ella, la seguirán otras ocho mujeres que proferirán su desengaño, siendo Lisis la novena y postrera.

A diferencia del planteamiento del Decamerón (recordemos que Zayas titula sus novelas con el apodo de «Decamerón español»), las novelas (o como las llama ella, «desengaños») no están ahí meramente para entretener, sino que cambian inequívocamente el curso de los acontecimientos en un límpido ejemplo del poder transformador que tiene la literatura. Así, al final de la trama central que se va dosificando en las dos entregas, Lisis renunciará a su boda con don Diego porque ha escuchado todos los relatos de sus compañeras y, como es obvio, se ha podido desengañar. Hecho que pone de manifiesto el poder que puede tener la palabra de las mujeres en el marco de la ficción, que sí tiene consecuencias narrativas.

Aunque de la María de Zayas persona sepamos extremadamente poco, sí que contamos con su legado literario. Sus novelas confieren un testimonio fundamental para trazar una evolución del proceso de subjetivización de las mujeres como creadoras y no como objetos de observación y análisis. Por eso es de imperiosa necesidad ponerla en el lugar que debería ocupar dentro del canon.

Autopoética

“Diferente cosa es novelar sólo con la inventiva un caso que ni fue, ni pudo ser, y ése no sirve de desengaño, sino de entretenimiento, a contar un caso verdadero, que no sólo sirva de entretener, sino de avisar. Y como nuestra intención no es de sólo divertir, sino de aconsejar a las mujeres que miren por su opinión y teman con tantas libertades como el día de hoy profesan, no les suceda lo que a las que han oído y oirán les ha sucedido.” (pp. 199-200)

Bibliografía crítica

Espejo Surós, Javier y Carlos Mata Induráin (eds.) (2021), Trazas, ingenio y gracia. Estudios sobre María de Zayas y sus “Novelas amorosas y ejemplares”, Pamplona, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Navarra.

Greer, Margaret Rich (2022), María de Zayas and her Tales of Desire, Death and Disillusion, Rochester, NY, Tamesis.

Rhodes, Elizabeth (2011), Dressed to Kill: Death and Meaning in Zayas’ “Desengaños”, Toronto, University of Toronto Press.

Vollendorf, Lisa (2001), Reclaiming the Body: María de Zayas’s Early Modern Feminism, Charlotte, N C, The University of North Carolina Press.