No existe el infinito:
el infinito es la sorpresa de los límites.
Alguien constata su impotencia
y luego la prolonga más allá de la imagen, en la idea, y nace el infinito.
El infinito es el dolor
de la razón que asalta nuestro cuerpo.
No existe el infinito, pero sí el instante:
abierto, atemporal, intenso, dilatado, sólido;
en él un gesto se hace eterno.
Maillard, Chantal
biografía
Chantal Maillard (Bruselas, 1951) es poeta y doctora en Filosofía. Reside en Málaga desde 1963, donde actualmente es profesora titular de Estética y Teoría de las Artes en la Universidad. Maillard está especializada en el pensamiento oriental y las religiones indias. Ha cultivado la prosa poética, el ensayo y la poesía. Como ensayista, destacan títulos comoLa creación por la metáfora o El placer estético en la tradición india. Como poeta ha publicado, entre otros, Poemas a mi muerte, Hainuwerle, Conjuros y Lógica borrosa. Su último poemario, Matar a Platón (2004), ha obtenido el Premio Nacional de Poesía.
sinopsis
Dos poemas extensos son los que constituyen la obra: "Matar a Platón" y "Escribir". El primero gira en torno a un instante en el que confluyen varias vidas. Esto es lo que la autora denomina "acontecimiento", que no puede ser definido, pues se trata de un impacto en el que puede condensarse toda la eternidad. En la parte inferior de los poemas encontramos una serie de subtítulos que dan lugar a una historia paralela, a otra vida que confluye. En definitiva, Matar a Platón se configura a través de un juego cíclico de espejos que busca, en última instancia, deshacernos del lastre de la tradición del pensamiento platónico. En el segundo poema extenso, "Escribir", la autora nos ofrece una estremecedora reflexión metapoética, mediante la estructura reiterativa "Escribir para…".
reseña
El poemario de Chantal Maillard produce una sensación de anonadamiento al lector ya desde el mismo título: Matar a Platón. La lectura empieza pues con una buena dosis de desconcierto, que es, sin duda alguna, el primer paso hacia la ruptura que pretende Maillard, una ruptura con la tradición platónica racionalista. El esencialismo de la autora, muy lejos de la teoría platónica de las ideas y muy cercano a la tradición budista, se plasma en el poemario a través de un espléndido juego de espejos y miradas. Podemos establecer un paralelismo entre dicho juego especular y "Las ruinas circulares" de Jorge Luis Borges, puesto que, tanto en Borges como en Maillard, observamos como telón de fondo la idea nietzscheana de la circularidad y la idea budista del mundo como representación, como sueño; asimismo, ambos textos constituyen una metáfora sobre la propia literatura. La poesía de Maillard es una poesía del instante, un instante que contiene en sí la esencia misma del ser humano. La autora huye del racionalismo reduccionista de estructura binaria (amor/dolor, bien/mal) mediante una sintaxis abierta y una multiplicidad de voces que sugieren, en última instancia, la supresión del yo. Chantal Maillard quiere "dejar de mentir con palabras abstractas" y nos ofrece una galería de imágenes que redundan en lo carnal, llenas de muerte, de vísceras, de experiencia vital. Maillard pone su escritura al servicio de una poesía que nos acerca a lo real, al acontecimiento, a lo-que-ocurre, que no está en la supuesta verdad platónica. La autora también critica el pensamiento platónico en un sentido feminista, en tanto que las mujeres siempre quedan indudablemente relegadas al mundo de la no-verdad, en términos platónicos. Al final de la primera parte del poemario, parece que Maillard salva a Platón: "Delegamos con gusto, por miedo o por pereza, lo que más nos importa"; al fin y al cabo, construimos ideas porque tenemos miedo, para tener la conciencia tranquila, porque, en palabras de la autora, "el orden nos exime de ser libres". En todo el poemario hay también una constante reflexión metapoética en la que observamos una clara influencia zambraniana, por cuanto concibe la poesía como fuerza creadora, esencial y existencial. En definitiva, lo que pretende Chantal Maillard es sugerir mediante la palabra poética un instante estremecedor, vital, que no puede ser definido mediante la razón; y lo hace mediante una poesía reflexiva, indagatoria, abierta y dilatada.
autopoética
"En los conceptos las cosas están congeladas. No las vemos, las reconocemos. Por eso es preciso eliminar las palabras en algún momento, emborronarlas para así poder ver las cosas de nuevo. Por supuesto, habremos de volver a nombrarlas: sólo limitando una parte de la totalidad puede algo aparecer como algo, pero al menos habremos tenido la ocasión de tomarnos este trabajo." (Entrevista de Susana Guzner en http://www.literaturas.com)
Tort Pérez, Anna (2005), "Chantal Maillard. Matar a Platón", Lletra de Dona in Centre Dona i Literatura, Barcelona, Centre Dona i Literatura / Universitat de Barcelona.