Lletra de dona es un espacio de publicación y difusión de reseñas de obras escritas por mujeres, dentro de los ámbitos tanto de la creación literaria (narrativa, teatro, poesía, ensayo, autobiografía) como de la teoría crítica
¡Claro que sabía que iba a morir algún día! ¡Claro que sabía que un tanto por ciento de hombres de su edad moría de cáncer cada año en Francia! Pues bien, ahora también sabía que formaba parte de ese porcentaje: ¡eso es todo!
Je passais par toutes les affres de l'introspection sans, pour cela, me réconcilier avec moi-même. "Ce sentiment pensais-je, ce sentiment à l'égard d'Anne est bête et pauvre, comme ce désir de la séparer de mon père est féroce." Mais, après tout, pourquoi me juger ainsi?
Un día no le querrá ya, y un día tampoco la querré yo, sin duda, y estaremos de nuevo solos y todo seguirá igual. Y habrá pasado otro año.
El vicario me dijo que una mujer no puede tener dos hombres. Que debe ser solo del esposo. Me dijo todo esto cuando yo fui a confesarme para el casamiento. Habló de una tal fidelidad o felicidad. Es una palabra que se parece a mi nombre. Que la tal fidelidad valoriza a las mujeres. (458)
Así que, ¡adelante! Sed beatíficos en vuestro contagio ilimitado y poroso. Usurpad vuestros cuerpos. Convertíos en vuestro avatar. Sed el glitch. Dejad que toda la maldita cosa entre en cortocircuito. (154)
A Minnie Tabatha le derritió el corazón. La madre de Tabatha era adicta a la heroína, y para sufragar el hábito, había metido a Tabatha en pelis porno cuando era niña. Tabatha no salió intacta de aquello. (74)