Resumen
Una hermosa noche de verano, en el parque del palacio del conde Kiof, este acompañado por Arturo pasea hasta el sepulcro de mármol en el que se encuentra Carlota, cuyo cuerpo trasladó el mismo desde el convento de Roma. El conde enfermó en ese momento y se encuentra todavía muy débil de salud. Frente al sepulcro se dirige a Carlota, le dice que Arturo herederá su título y al contemplar una aurora boreal pierde el juicio y piensa que es Carlota. El pequeño lo mira asustado y preocupado. Llega entonces Steward y lo conducen a casa. Después de esa noche, el conde vive solo unos meses más, pero sin recuperar la razón. Un brevísimo epílogo nos sitúa en las guerras del Cáucaso en las que luchan dos jóvenes oficiales: Arturo Lewis conde de Kiof y Alberto Cronstad.
Violencias de/contra la mujer
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