El
águila-azor perdicera es una especie en regresión y gravemente
amenazada en toda Europa. Los factores responsables de
esta regresión se pueden agrupar en dos categorías, según afecten
directamente a los individuos (mortalidad y éxito reproductor) o bien a
los hábitats que utilizan las águilas.
Se conocen soluciones
concretas y viables para contrarrestar todos estos factores que afectan
negativamente a las águilas. Para su correcta aplicación es muy
importante la conscienciación y la colaboración entre los diferentes
colectivos que hacen uso del medio natural y las entidades públicas y
privadas implicadas en la gestión del territorio.
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