Text:
Aunque existen algunos precedentes, es a partir de 1945 cuando comienza a aplicarse técnicas fotográficas en el texto. Los nuevos sistemas de impresión, tales como el ófset, fueron desplazando el tratamiento tipográfico tradicional. Nace así lo que de forma genérica se ha denominado fotocomposición o sistemas de edición profesional.
La primera generación de estos equipos funcionaba de manera muy similar a las linotipias, ya que el sistema de fundición era sustituido por un sistema fotográfico: la Fotosetter.
La siguiente generación de equipos de fotocomposición ya no se apoyaba en los dispositivos anteriores y presentaba nuevas técnicas de posicionamiento de caracteres. Al igual que en la primera generación, el sistema seguía siendo óptico, es decir, las fuentes eran almacenadas en forma de negativos fotográficos. A partir de aquí ha habido algunos avances de tipo mecánico, pero la tecnología, en cuanto al almacenamiento y manipulación de las fuentes, no ha sufrido grandes cambios. Al tener que partir de negativos fotográficos para construir la tipografía, la calidad de la misma, en determinados cuerpos, no era la más adecuada, ya que la ampliación de los tamaños se realizaba con un sistema óptico, y ello conllevaba ciertas deformaciones de las letras con respecto a su diseño original.
En 1965 se da un nuevo paso evolutivo en los equipos, que supone un cambio importante por varios motivos: se introducen los tubos de rayos catódicos como fuente de iluminación, el dimensionamiento es electrónico y no óptico y las fuentes se digitalizan. Al principio era difícil entender que las fuentes no fueran negativos fotográficos y que éstas se encontraran en un soporte magnético. la aceptación generalizada se impuso con la evidencia de la mejora ostensible en la calidad de la tipografía.
Todos estos sistemas, en su momento, fueron muy útiles y muy apreciados por los profesionales, ya que marcaron el cambio de la época del metal a la época electrónica, pero pronto quedaron obsoletos por tres motivos: primero, porque no permitían ver en pantalla lo que se iba a obtener por el dispositivo de salida -impresora o filmadora-, lo cual obligaba a forzar la imaginación interpretando el complejo conjunto de parámetros y códigos de composición; segundo, porque eran sistemas de la misma marca; y tercero, porque no servían para la integración del texto y de la imagen.
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admin
Mon, 05/07/2018 - 21:47
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Primera correcció
Conceptes relacionats: escriure amb majúscula inicial. En cas de personatges, encapçalar per cognom: "Frutiger, Adrian", etc.
Polir referències documentals: v. http://www.ub.edu/cub/criteri.php?id=269 —això inclou també cursives, cometes, etc.
En la mesura del possible, controleu la qualitat de les imatges que adjunteu.
Posar espais després de punts.
Recordeu que, si adjunteu fitxer, no és obligatori "copiar" tot el text —però pot anar bé tenir les dues versions.