Sueños 5
Sueños 5
El soñar es uno de los aspectos más intrigantes de la experiencia humana. Nos ha fascinado durante miles de años, y algunas culturas lo han atribuido a lo sobrenatural y a poderes divinos. Los sueños también han sido sujeto de investigación científica con el objetivo de comprender su naturaleza y función. Este interés ha llevado a muchos pensadores a desarrollar teorías con el fin de descifrar el significado de estas ensoñaciones.
Este proyecto comienza en realidad con el inicio de un diario de sueños personal. Este hábito de escribir cada mañana lo vivido en este estado de descanso durante la noche anterior, ha tenido como resultado la recopilación de cientos de historias y sensaciones del inconsciente. Son, en ocasiones, historias extensas y muy bien redactadas, y otras veces sin sentido, ilegibles o resumidas en pocas palabras desordenadas.
Comienza así una exploración de este misterioso mundo en el que pasamos un tercio de nuestra vida, del cual se ha escrito mucho pero se sabe más bien poco.
Al intentar describir un sueño, redescubrirlo y volver a él, en el mejor de los casos lo podemos experimentar empleando la memoria despierta. Pero el sueño es un mundo que se escapa a la aprehensión consciente y a la reflexión, por lo que las palabras parecen no ser suficientes.
Es por esto que el objetivo principal de este trabajo es crear un librito de artista que, con las imágenes acompañadas de su texto correspondiente, muestre pequeños fragmentos de este diario de sueños, con la intención de hacer un análisis onírico a nivel personal, buscando una simbología propia que permita un mayor conocimiento del inconsciente. Se busca también ofrecer al público una visión más profunda de este mundo onírico propio, a la vez que se incita un trabajo de interpretación libre.
La elaboración de este proyecto tiene su inicio en la asignatura de Imatge Extensa, pues las estampas realizadas durante esta clase son las que han servido como punto de partida para la creación de las imágenes del libro. A la vez que iba avanzando este lado de la tarea, se fueron recopilando y recortando revistas que servirían para la creación del collage, y seleccionando los fragmentos de sueños incluidos.
Cada imagen fue creada de manera electrográfica, haciendo uso del escáner para “fotografiar” los elementos colocados en este. Esta técnica permite escanear cada composición de maneras únicas y brinda la posibilidad de distorsionar y hacer modificaciones a la imagen real.
Una vez obtenidas todas las imágenes, se procede a maquetar el libro en Indesign. La maquetación fue bastante sencilla, ya que solo consistía en texto sobre fondo negro a un lado, e imágen ocupando toda la página al otro. La portada se hizo en un documento por separado para facilitar el proceso de encuadernación.
Todo este trabajo queda formalizado en un libro de textos e imágenes, y un segundo cuaderno con la misma cubierta que el primero, pero con las páginas en blanco. Estos se recogen en una pequeña caja acompañados de un rotulador. La intención de esto es que el poseedor de esta cajita se sienta inspirado a hacer este mismo proceso de investigación en torno a sus propios sueños, y que los plasme en el papel ya sea a través de dibujos, esquemas, mapas o textos.
Ambos cuadernos tienen una medida de 13 x 8 cm, sus páginas se unen mediante dos grapas, y se hallan en el interior de una caja de cartón de 10 x 13,7 x 1 cm. La cubierta de dicha caja está marcada con el mismo sello que aparece en la portada de los libritos. La elección de este formato se debe a que los sueños son considerados muchas veces como algo muy íntimo y misterioso de cada individuo, y el tamaño de este conjunto deberá hacer alusión a esta invasión de la intimidad. No hay una intención divulgativa, sino más bien de investigación y creación de una simbología propia.
A pesar de no haber trabajado nunca con programas como Indesign, estoy satisfecha con el resultado obtenido. Cambiaría algunas cosas en la encuadernación, como por ejemplo la cubierta, que me hubiera gustado que tuviera un acabado mate.
Aún así, el recorrido de este proyecto no lo concibo como un estudio cerrado con unas conclusiones concretas y definitivas, sino como una vía de unión entre el inconsciente y el arte que continúa abierta y en constante evolución. Una invitación al espectador a indagar en su mundo onírico propio y explorar esa parte tan fascinante de su experiencia como ser humano. Es una propuesta a volver la mirada al interior, a soñar con intención y a querer conocerse a uno mismo desde una perspectiva diferente.
Queda una puerta abierta para continuar explorando las posibilidades que ofrece la electrografía en la práctica artística y para seguir con esta investigación de los sueños que no solo se limite a la escritura, sino que derive en nuevas formas de representación.