Información para las empresas e instituciones

Con el fin de favorecer el contacto entre el alumnado y las empresas y con el objetivo de contribuir a la adquisición de conocimientos del estudiante en el ámbito laboral, los estudiantes de los Grado de Comunicación e Industrias Culturales de la Facultad de Filología y Comunicación de la Universidad de Barcelona, deben cursar obligatoriamente la asignatura de prácticas curriculares.

Una vez llega el momento en el que debe cursarse la asignatura de prácticas, el alumnado cuenta con una sólida formación en los diversos ámbitos de la comunicación, la gestión cultural y la producción audiovisual, ya que se encuentra cursando el último año de su itinerario formativo. Este hecho exige haber superado todas las asignaturas obligatorias y, por tanto, los alumnos ya habrán asumido las competencias y aptitudes necesarias para desarrollar una estancia de prácticas en una empresa del ámbito de la comunicación y las industrias culturales.

Las Prácticas Externas consisten en una estancia de 660 horas en un centro colaborador (empresa o institución, pública o privada) con el que la Facultad establece un convenio de cooperación educativa. Las tareas que los estudiantes deben llevar a cabo deben ajustarse a las competencias que desarrollan en la enseñanza del Grado de Comunicación e Industrias Culturales, y también deben estar supervisadas por un tutor que la empresa o institución asignará al alumno.

La realización de las prácticas externas curriculares comportará la inclusión del estudiante en el régimen general de la Seguridad Social. Por otra parte, el proyecto formativo de prácticas externas establecido entre la entidad y la Facultad de Filología y Comunicación puede prever una remuneración para el estudiante por parte de la entidad. En caso de que estas prácticas curriculares sean remuneradas, el cumplimiento de la obligación de alta y baja en la cotización de la Seguridad Social corresponde a la entidad. En caso de que no sean remuneradas, corresponderá a la Universidad de Barcelona.

En el período comprendido entre finales de enero y principios de abril las entidades deben comunicar su oferta de plazas de prácticas externas curriculares para el próximo curso.

Para solicitar estudiantes en prácticas de la Facultad de Filología y Comunicación es necesario estar registrado en el GIPE, la plataforma de gestión de prácticas de la Universidad de Barcelona, y enviar una o más ofertas, dependiendo del perfil académico y del número de estudiantes en prácticas que desee acoger. Si su entidad ya está dada de alta, entre directamente con su código de usuario y contraseña. Si no es así, tendrá que registrar los datos de su entidad y, una vez confirmado el registro, tendrá que volver a la página de autenticación para acceder al GIPE y enviar su oferta.

La publicación de la oferta en el GIPE, que es un servicio gratuito, se hará efectiva una vez validada por el equipo de Coordinación de prácticas del Grado de Comunicación e Industrias Culturales. Las tareas que desarrollará el estudiante en la entidad tendrán que proporcionarle un conocimiento teórico-práctico y un provecho para su formación.

Para cualquier consulta, puede ponerse en contacto con equipo de Coordinación de prácticas del Grado de Comunicación e Industrias Culturales (fil-coord.prac.cic@ub.edu).

Durante el mes de mayo los estudiantes interesados pueden consultar la relación y las características de las plazas ofertadas por las entidades colaboradoras.

La selección de los estudiantes corresponde al Equipo de Coordinación de prácticas, que asigna al estudiante un destino teniendo en cuenta su perfil académico, su expediente, sus preferencias y la disponibilidad de plazas.

Una vez adjudicada la plaza, se asigna un tutor académico que realizará el seguimiento y la tutorización del estudiante.

La Facultad tramitará un convenio de cooperación educativa con la entidad que acogerá al estudiante. Este documento se prorrogará anualmente si ninguna de las dos partes (Facultad y entidad colaboradora) manifiestan su voluntad de cancelar el acuerdo. De esta forma, el convenio es válido en caso de que haya futuros estudiantes de prácticas en la entidad.

Las prácticas curriculares se realizan durante el curso académico. De forma general, el período de prácticas se establece de mediados de septiembre a finales de mayo y es necesario que el estudiante realice las 660 horas de prácticas previstas en este período de tiempo. El convenio y el proyecto formativo tienen que firmarse obligatoriamente antes de la incorporación del alumno a la entidad. 

Se requiere que el estudiante tenga un tutor en la entidad en la que hará las prácticas, el cual debe supervisar y tutelar su estancia.

La Facultad de Filología y Comunicación designará a un tutor académico por estudiante. Estos tutores son profesores de la Facultad que forman parte del equipo docente vinculado a la asignatura "Prácticas Externas".

Al finalizar la estancia del estudiante, el tutor de prácticas de la entidad valorará el grado de satisfacción por las prácticas realizadas mediante un documento que recibirá de parte del Equipo de Coordinación de prácticas.

Este informe formará parte de la evaluación del alumno en la asignatura “Prácticas Externas”.

Guía para tutores externos (en catalán)

  • De finales de enero a principios de marzo: Las empresas e instituciones colaboradoras deben comunicar su oferta de prácticas.

  • Abril: Una vez validadas las ofertas, éstas se harán públicas para los estudiantes y se abrirá un plazo de inscripción.

  • Mayo: La Oficina de Prácticas revisará las inscripciones y asignará las plazas.

  • Del 1 al 15 de junio: Se publicará la resolución en el GIPE y se abrirá un plazo para que los estudiantes acepten formalmente la plaza asignada o renuncien a ella mediante la misma plataforma. Si procede, se valorará la publicación de plazas vacantes y se convocará un segundo plazo de inscripción.

  • Principios de julio: La entidad colaboradora recibe la relación de estudiantes en prácticas que se van a incorporar durante el próximo curso. A partir de ese momento, se inicia la gestión de los proyectos formativos y también el contacto entre el tutor de la entidad y el tutor académico de los estudiantes.

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