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Nueve de cada diez personas con discapacidad intelectual o del desarrollo han sufrido algún tipo de victimización
Un estudio de victimología sobre las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo (DID) concluye que nueve de cada diez entrevistados han sufrido algún tipo de victimización en el transcurso de su vida. El trabajo lo han llevado a cabo conjuntamente el Grupo de Investigación en Victimización Infantil y Adolescente (GReVIA), la Federación Catalana de la Discapacidad Intelectual (Dincat), y la Fundación Vicki Bernadet.
La investigación se ha realizado con una muestra de 260 adultos con DID de entre 20 y 71 años, y tenía como objetivos conocer la prevalencia de experiencias de victimización en estas personas, identificar los casos de polivictimización, y analizar las características sociodemográficas y victimiológicas de las polivíctimas. El propósito final es velar por la defensa de los derechos de este colectivo y mejorar su calidad de vida.
El estudio evalúa aspectos como la prevalencia de las experiencias de victimización, el lugar donde se han producido o el perfil del agresor. Se han obtenido datos de cinco tipos distintos de victimización: delitos comunes y violencia entre iguales, victimización por parte de cuidadores, victimización sexual, exposición a la violencia y victimización electrónica.
Las personas con DID, un colectivo de riesgo durante toda la vida
El estudio se ha realizado desde la perspectiva de la teoría del desarrollo que propone David Finkelhor, un experto de reconocido prestigio en este ámbito. En este sentido, se ha empleado el cuestionario de victimización de este autor, que el grupo GReVIA ya había utilizado previamente con jóvenes de diferentes colectivos. En este caso, se ha creado una versión adaptada a la población de personas con DID que incluye veintiocho situaciones específicas de victimización.
Los datos de prevalencia de la victimización muestran que las personas con DID son un colectivo de riesgo y que, a lo largo de su vida, viven un promedio de hasta seis situaciones de victimización distintas.
En relación con el lugar donde han sucedido los episodios de victimización, destacan tres grandes espacios: la calle —sobre todo en la edad adulta—, y el hogar y la escuela durante la infancia. La investigación subraya que a menudo no se detectan las situaciones de victimización que se producen durante la infancia o no se protege a los afectados. También recalca que, a diferencia de lo que ocurre con otros colectivos de riesgo, la victimización de las personas con DID continúa a lo largo de todo el ciclo vital y no se limita al periodo infantil.
De los cinco tipos de victimización definidos, el que tiene mayor incidencia —nueve de cada diez personas con DID lo sufren— es el que se comete entre iguales o en delitos comunes, ya sea victimización psicológica (64 %), robos (48 %), o agresión física (40 %).
La victimización por parte de los cuidadores o familiares tiene una incidencia menor, pero significativa: seis de cada diez personas con DID aseguran haber vivido situaciones de violencia física o de violencia psicológica.
También seis de cada diez hombres y mujeres con DID afirman haber estado expuestos a situaciones violentas en el hogar o en la comunidad, un 25 % de las cuales han sucedido en el ámbito familiar (exposición a la violencia entre padres o entre estos y sus parejas), y un 55 % en el ámbito de la comunidad.
Las cifras de victimización son similares para ambos sexos, excepto en el caso de los datos de victimización sexual y electrónica, que afectan sobre todo a las mujeres. Cinco de cada diez mujeres y dos de cada diez hombres han sufrido algún tipo de victimización sexual: tocamientos (29 % de mujeres, 12 % de hombres), o relaciones sexuales no deseadas con penetración (24,5 % de mujeres, 7 % de hombres). En el caso de la victimización electrónica, de cada diez personas entrevistadas, dos han sufrido ciberacoso o acoso sexual a través de las redes sociales (grooming).
Propuesta de trabajo
En la fase cualitativa de la investigación, que ya ha comenzado, los investigadores se proponen comprender mejor los datos cuantitativos obtenidos a partir de las experiencias las personas con DID y de otros profesionales implicados. Para ello se han creado grupos de trabajo en que participan representantes de las administraciones, profesionales del sector de la discapacidad intelectual, personas con discapacidad intelectual y del desarrollo y sus familias.
Durante este mes de octubre, el grupo se está centrando en trabajar con las situaciones de victimización en los centros escolares, y en noviembre se focalizará en la victimización sexual. En diciembre se hará una valoración y se escogerán las temáticas que se abordarán en 2017. A la vez, se publicará la propuesta de acciones de mejora para reducir y prevenir estas cifras de prevalencia.