15 aprendizajes emergentes, interconectados y multidisciplinares

Compartimos 15 propósitos para incorporar a la vida, para llevar a los espacios educativos, para reflexionar y compartir; en definitiva, para ayudarnos a construir y mantener un cerebro saludable.

  1. Un cerebro sano necesita relaciones sociales y propósito vital.
  2. Debemos trabajar desde la prevención y la salutogénesis: somos responsables y arquitectos de nuestros cerebros.
  3. Para mejorar la sociedad hay que mejorar la educación.
  4. Saber cuidar requiere conocimiento y generosidad, no solo voluntad. 
  5. El futuro no tiene por qué ser oscuro. Basta de distopía, volvamos a la utopía. La utopía no es un lugar, es una brújula que orienta.
  6. Nos construimos a partir de relaciones, de resonancias.
  7. Lo que nos humaniza son los otros seres humanos. Cuanto más das, más tienes.
  8. Ser madres o padres no es un derecho; tener padres o madres sí es un derecho.
  9. Somos creadores de espacios de oportunidad para aprender.
  10. Para hacer cosas extraordinarias se necesita un tiempo de calma.
  11. Hay que poner vida a los años, no solo años a la vida.
  12. Hay que deshacer fronteras disciplinares para aprender. Crear es conectar.
  13. La actitud lúdica nos predispone al aprendizaje.
  14. Todo empieza por la escucha: a uno mismo y al otro.
  15. El cuerpo es nuestro mejor instrumento musical.

Y 12 imágenes de la mano de Pernan Goñi para construir una memoria gráfica