El pasado 27 de julio, falleció la Dra. Pilar González López, primera Catedrática de Psicología de los Grupos en España y fundadora del Máster Análisis y Conducción de Grupos de la Universitat de Barcelona. Pilar ha dejado huella en nuestras vidas y también en el mundo académico y profesional. A pesar de la emoción de tristeza por su partida, también es un momento para celebrar la vida y legado de Pilar, fue una fuente de inspiración y guía para tantos de nosotros, impulsora de la creatividad y la innovación, creadora de oportunidades en las distintas áreas en las que intervenía, personales y sociales.
Pilar impactó y contagió su pasión por el conocimiento, su dedicación a la enseñanza fue luz que nos iluminó a muchas personas. Su brillante inteligencia y su cautivadora espontaneidad eran impulso y motor de aprendizaje para otros. Con su sabiduría, además de impartir conocimiento, también cultivó el pensamiento crítico y la curiosidad en cada uno de nosotros. Pilar entendía que la educación va más allá de los libros; trataba de formar seres humanos íntegros, capaces de cuestionar, reflexionar y contribuir positivamente a la sociedad. Todos tenemos este objetivo: poseer una actitud de vida creativa. La persona siempre dispone de la posibilidad de cambiar.
Su compromiso con la investigación-Acción y su deseo de promover e impulsar a personas como también proyectos fueron verdaderamente una gran inspiración. Como la creación del Máster Análisis y Conducción de Grupos que fundó en 1989. Pilar además de mentora, también ha sido una impulsora y faro de motivación. Su capacidad para ver el potencial en cada uno de nosotros nos instó a alcanzar nuevas alturas y a nunca rendirnos ante los desafíos, sino convertirlos en retos. La providencia vendrá, decía …. La Gran Maestra
Recordamos además de sus logros académicos, primera Catedrática de Psicología de los Grupos como área en la Psicología Social, también su calidez, su risa contagiosa, su inquebrantable fe en el poder del conocimiento y su capacidad de crear. Su legado vivirá en cada uno de nosotros, en cada idea que desarrollemos, y en cada avance que logremos. A pesar de su ausencia, sabemos que su espíritu sigue vivo a los que enseñó, en los corazones que inspiró y en las mentes que formó. Sigamos adelante con su ejemplo, llevando su pasión y su amor por el aprendizaje continuo de los grupos y de la vida a cada rincón de nuestras vidas.
Descansa en paz, querida Pilar. Gracias por todo lo que nos diste.
Dra. María Palacín Lois
Directora del Máster Autoliderazgo y Conducción de Grupos