Mesa coordinada por Antoni Vives Riera (UB) parte del presupuesto de que la relación entre turismo y cultura ha sido vista tradicionalmente como algo negativo. Por un lado, el turismo se ha entendido como una práctica de homogeneización cultural que ha contribuido a la desaparición de culturas locales. Por otro lado, se ha visto como un dispositivo de mercantilización de la cultura que le ha banalizado y vaciado de contenido. En la presente tabla asumimos la creatividad cultural del turismo y defendemos la configuración histórica de culturas turísticas en el marco de las que se han podido desarrollar identidades locales, regionales o nacionales. Esta cultura ha dejado un legado y un patrimonio que el tradicional desprecio elitista en el turismo ha impedido valorar en su justa medida. Desde una perspectiva transdisciplinar, en la presente mesa nos interesa debatir y comparar conocimientos sobre la aparición a lo largo de los siglos XIX y XX de diferentes manifestaciones culturales que pueden ser valoradas como patrimonio turístico: literaturas, arquitecturas, pinturas, obras cinematográficas, artes gráficas, música, espectáculos escénicos y estéticas originadas a partir de la práctica turística y las experiencias que comporta.