Documentos: - Libro de cuentas. Sancha Ximenis de Cabrera.
Los velos
[fol. 12v.] A 22 de febrero [1442] conté mis toallas para la cabeza.
Son: en primer lugar son las toallas grandes 12. Ítem son las medianas 4. Ítem son las pequeñas 17.
Ítem a 2 de octubre remití a Ballester, el velero, que me hiciera velos de lino y de cota con el crespón largo: en primer lugar 2 velos pequeños para las sienes, de 4 palmos y medio de largo cada uno.
Ítem dos velos para llevar puestos en la frente, tengan 6 palmos de largo cada uno.
Ítem dos velos por debajo de las mandíbulas de 5 palmos cada uno de largo.
Ítem dos velos por dobles, uno de 8 palmos y otro de 8 y medio.
Ítem un gran velo sobre todos los demás, de 9 palmos.
Suma toda la longitud de los anteriormente dichos velos: 41 palmos, que resultan 5 canas y un palmo.
Las hijas
[fol. 41r.] Las cosas que la señora remite a sus hijas:
Primero seis pares de guantes.
Ítem dos ases de hilo blanco.
Ítem dos bolsas de estambre y una de cuero burell.
Ítem tres crespinas violetas, una de ellas azules.
Ítem tres piezas antiguas grandes y dos pequeñas.
Ítem siete llaveros de oro y de seda.
Ítem un par de cuchillos con cordón de seda blanca y negra.
Ítem un collar de padrenuestros negros.
Resto que falta para remitir: un espejo de fuego, y la bella bolsa, y la correa, y los chapines con las bolitas.
Ya tiene el espejo. Ya lo tiene todo.
Las cartas
[fol. 42r.] 1441. Cartas remitidas de diciembre.
A 30 de diciembre escribí a mosén Arnau [...] avisando de esto, que Juan me había comentado, que turbaba la llegada de mi hija, la viuda, y ordené al portador que tan sólo diera la carta a mosén Arnau o a mi hija pequeña.
Ítem sábado a 31 de diciembre remití una carta a mi hermano don Juan de Híjar con un albarán dentro, dirigido a Besalú. En la carta de mi hermano mencionaba la enfermedad de mi hermana, Timbor, y los halcones. La remití a casa de Gabriel Homedes.
A 20 de enero respuesta a las tres cartas de mosén Arnau, y a la de la condesa. Mencionaba la corte que había tenido con don Juan de Híjar, del vestir y del forrar.
A 30 de enero respondí al señor cardenal la carta en que comentaba que yo tuviera alguien en Bearn para solicitar los derechos de mi hija; dicha carta la di a Juan para que se la remitiera.
Ítem miércoles primer día de marzo, escribí a monseñor de Comenge por Sancho, servidor de la condesa de Foix. Fue por la venida de mi hija.[...]
Del hilar y del tejer
[fol. 48v.] Viernes a 17 de febrero [1441] remití por madona Constanza a Beralle hilo para blanquear a razón de tres sueldos la libra según sigue: Ítem hilo hilado de la dicha madona Constanza 14 madejas que pesan 6 onzas, crudo; es devuelto a 4 onzas. Ítem hilado de Juliana 11 madejas, que pesan 9 onzas, crudo; es devuelto a 6 onzas y media. Ítem hilado por mí, Sancha Ximenis. Son las madejas 40 madejas que pesan 2 libras, 7 onzas, crudo; es devuelto a 6 libras una unza y media.[...]
[fol. 50r.] Ítem lunes a 19 de junio remití a Beralle 9 madejas de hilo para hacer blanco, que pesan 5 onzas. Se las trajo Antonio, hay 3 madejas hiladas por madona Constanza, las otras son hiladas por mí, por Juliana y por Esperanza.
Ítem a 15 de agosto recibí las dichas 5 onzas y las pagué.
Ítem miércoles a 26 de septiembre pedí a Torruella que me remitieran a Barcelona a Bofill 33 madejas de hilo, 10 madejas estaban hiladas por la mano de madona Constanza y las otras 22 por todas nosotras. Pesan más de 15 onzas, y le remití para pagar 3 sueldos.
Depositaria de los saberes de las mujeres: Una receta de cocina
[fol. 55v.] Año 1440, martes a 20 del mes de septiembre [...].
A continuación la forma como se hacen las berenjenas en vinagre para guardarlas hasta Cuaresma.
En primer lugar, tomad las berenjenas que sean pequeñas y abridlas por el medio, pero que no se partan [...] hervidlas con agua y sal, pero hasta que el agua no hierva no echéis las berenjenas. Cuando os deis cuenta que empiezan a reblandecerse, sacadlas del agua y extendedlas sobre una tabla, que queden al aire. Cuando veáis que están secas, al cabo de un día o un día y medio, poned en cada parte de la berenjena uno o dos clavos de especia, según vuestro gusto. Después cogéis especias, tales como pimienta, canela y jengibre pulverizados, más pimienta que de las demás, y espolvoread por dentro de una en una. Y hecho todo de esta forma, cogéis vinagre blanco, si es demasiado fuerte le añadís agua, y echáis miel hasta que se vuelva agridulce; lo hervís todo dos o tres veces y después echáis las berenjenas y las hervís hasta que estén cocidas, después sacáis la perola del fuego y al cabo de un rato sacáis las berenjenas y las ponéis en una olla bien tapadas con el vinagre en que se han cocido, entonces ya se pueden comer, pero no tapéis la olla hasta que todo esté bien frío.
La señora feudal
[fol. 59r.-v.] Recibos que hice en el año que finalizará, 1442, según aparece debajo escrito de mi mano [...]
Ítem recibí como acuerdo de arrendamiento un certificado de redención de hombres y mujeres de Piemonte, por dos masías, tres florines: 1 libra, 13 sueldos.
Ítem como acuerdo de arrendamiento un certificado de redenciones de hombres y mujeres de Crosa, por la masía Simón, 1 florín: 11 sueldos.
Ítem como acuerdo de arrendamiento a un certificado de redención de hombres y de mujeres, 1 sueldo [...]
Ítem recibí del acuerdo del hijo de Bosch entre dineros y castañas: 6 florines.
[fol. 69r.] Jesús. En nombre de Dios sea.
Hoy que es miércoles, que estamos a 18 del mes de abril del año 1442, dentro del castillo de Verges yo, Sancha Ximenis de Foix y de Cabrera, señora del Valle de Osor, he venido a contar. Y he contado con Pedro Sobirà, lugarteniente del baile de dicho valle, y hemos contado del primer día de junio del año 1441 que acabará al último día de mayo del año 42, he contado todos los censos, tanto de trigo como de dineros, y de trigo blanquillo, y de avena, y de cebada, y de comuña y de legumbres, vendidos hasta dicha jornada; y de todos los diezmos de carne recibidos hasta dicha jornada, y que hayamos vendido hasta dicha jornada; y redenciones, acuerdos y arrendamientos certificados, y todos los acuerdos recibidos hasta dicha jornada. Me habéis de devolver a cuenta de las anteriormente dichas cosas: 22 libras, 2 sueldos, 4 denarios.
[fol. 73v.] Empiezan los recibos del año que comienza el primer día de junio del año 1444 y finalizará el último día de mayo del año 1445.
Ítem por redención de Pedro Caldés 3 florines: 2 libras, 3 sueldos.
Ítem más de Masferrer por la compra de una tierra: 11 sueldos.
Ítem más de Masferrer por entrada de la mujer 25 sueldos: una libra, 5 sueldos.
Ítem de Mont de Santa Creu por redención de una hija: 2 sueldos, 5 dineros.
Ítem ha sido pagado por Vilanova el embotamiento del vino del año 1444: 12 libras.
Ítem más de las rentas: 33 libras [...]
Ama de casa
[fol. 78r.] Gastos de trigo blanquillo, y de moler, de ayuda y de horno. Año 1443.
[...] Ítem el martes 22 de octubre compró el padre Pedro Joan, presbítero, 4 cuarteras de trigo blanquillo a 15 sueldos la cuartera, cuesta de cribar 4 dineros: 3 libras, 4 dineros.
Ítem el viernes 25 de octubre, llegó la harina de dicho trigo blanquillo, pagué al joven que la trajo, la moltura y la ayuda: 6 sueldos, 4 dineros.
Empezamos a amasar dicha harina el jueves 7 de noviembre.
Ítem el sábado 7 de diciembre pagué a María, la panadera, para cocer el pan de todo lo anteriormente escrito que son, 8 cuarteras, le he dado 9 sueldos, 4 dineros [...]
[fol. 109r.] 1443. Memorial de ropa que se lavó fuera de casa:
El 15 de octubre se llevó Salvadora Sunyera, de San Cugat del Vallés: primero unas cortinas blancas, cinco piezas, costarán de lavar: 2 sueldos, 6 dineros.
Ítem dos manteles grandes a 3 dineros la pieza: 6 dineros.
Ítem dos manteles pequeños a un dinero la pieza: 6 dineros.
Ítem dos servilletas y paños: 1 dinero.
Se le pagó: 3 sueldos, 3 dineros.
El 4 de noviembre se llevó 9 manteles, tres de ellos grandes: 1 sueldo, 2 dineros.
Ítem servilletas 6: 3 dineros.
Ítem paños 3: Ítem paños para los cuchillos 3: 1 dinero.
Ítem toallas 2: 1 dinero.
Ítem el 26 de noviembre trajo dicha ropa y se le pagó: 1 sueldo, 7 dineros.
Ítem se llevó dicha mujer el mismo día: un par de sábanas delgadas de mi cama, de tres telas: 4 dineros.
Ítem dos pares de sábanas de acompañamiento, a 4 dineros el par: 8 dineros.
Ítem dos toallas grandes nuevas para medir, a 4 dineros la cana, en cada una cuatro canas.
Ascienden: 2 sueldos, 8 dineros.
Suma esta página: 8 sueldos, 6 dineros.
[fol.119v. ] Año 1440. Gastos extraordinarios.
[...] Ítem el lunes 26 de septiembre por un centenar de alfileres: 2 sueldos, 1 dinero.
Ítem martes una cana y media de cañamazo para remendar un colchón a 20 dineros la cana, y por una arroba de lana sarda para el colchón: 6 sueldos, 5 dineros.
Ítem cuesta dicho colchón que hace 15 palmos de largo y 12 de ancho, de Valsens, el gasto de comer para uno: 4 sueldos.
Ítem el mismo día por una misa: 1 sueldo.
Ítem el miércoles 27 de dicho mes, avena, medio cuartán para las gallinas: 3 dineros [...]
[fol. 122v.] [...] Ítem el martes 8 de noviembre centeno para las gallinas: 6 dineros.
Ítem el miércoles 9 del mes, para remendar las alfombras: 5 sueldos, 8 dineros.
Ítem el jueves 9 del mes por tres pieles negras para las mangas y un collar pequeño, y por hilo por delante hasta la correa, a razón de tres sueldos 6 dineros la piel: y de manos 2 reales. Suma todo: 13 sueldos.
Ítem el mismo día, por miel para el membrillo, a tres dineros la libra, 17 libras y media: 4 sueldos, 3 dineros [...]
[fol. 124v.] [...] Navidad. Ítem el viernes 16 de dicho mes por turrones con alegría, y que fue madona Constanza, por 4 libras de miel, 1 sueldo; por 4 libras de avellanas tostadas, 1 sueldo y 9 dineros; y una libra de moscatel 6 dineros, y por una libra de alegría 5 dineros. Suma todo: 3 sueldos, 8 dineros.
Ítem por el obispillo de Navidad de los mozos: 1 sueldo.
Transmisora de cultura oral: unas alboradas
[Añadido al final del folio 118v.]
En mi corazón amo a una señora.
Os quiero tanto, señora mía,
que no os lo podría demostrar nunca. Copla.
Mas os quiero secretamente
que no os muestro tal continente,
si descubrieran mi tormento
mi vida mejor sería. Copla [...].
[fol. 12v.] […] A XXII de febrer [MCCCCXLII] comté les toveloles mies de cap. Són: primerament són les tovalloles grans XII. Ítem són les miganes IIII. Ítem són les petites XVII.
Ítem a II de octubre trametí an Balester, lo veler, que·m fes vels de lí e de cota ab lo cresp larch: primerament II vels petits per los polsos, agen IIII palms e mig de larch cascú.
Ítem dos vels per portar la horeta al front, agen VI palms de larch cascú.
Ítem dos vels per dejús les bares que agen V palms cascun de larch.
Ítem dos vels per dobles, le hun age VIII palms e l’altre VIII e mig.
Ítem un gran vel sobre tots los altres, qui age VIIII palms.
Some tota la lergària dels damont dits vels: XXXXI palm, qui fan V canes e I palm. […]
[fol. 41r.] Les coses qui la senyora tramet a sas fillas:
Primo sis parells de goans.
Ítem dues asses de fil blanch.
Ítem dues bosses d’estam e una de cuyro burel.
Ítem tres crespines violades, la una blava.
Ítem tres pesses de vells grans e dos petits.
Ítem VII claves de or e de sede.
Ítem un parell de ganibets ab cordó de seda blancha e negra.
Ítem un collar de paternostres negres.
Reste que hi fal a tremetre: un miral de foch, e le belle bose, e le corege, e los tapins ab les boletes.
Ja té lo miral. Ja u té tot.
[fol. 42r.] MCCCCXLI. Letres trameses de deemebre.
A XXX de dehembre scriví a mossen Arnau [...] avisant d’assò que Johannes m’havia dit qui torbave la venguda de ma filla, la vídua, e avisé lo portador que no donàs la letra sinó a mossen Arnau o a ma filla petita.
Ítem dissabte a XXXI de desembre trametí una letra a mon frare don Juan de Ixer ab un alberà dins qui anave en Besalú. En la qual letre de mon frare fehie menció de la maleltie de me sor, de ne Timbor, e dels falcons. Trametili a casa d’en Gabriel Homedes.
A XX de gener resposte a les tres letres de mossèn Arnaud, he a la de la comtessa. Fahie mensió a la cort que havia agut ab don Johan d’Íxer, del vestir he del folrar.
A XXX de gener fiu resposte al senyor cardenal de le letre qui deie qui jo tingués algú en Bearn per sol·licitar los ets de ma file; la qual letre doné a Juannes qui le·y tremès.
Ítem dimecres lo primer die d emarts, escriví a mossèn de Comenge per Sanxo, servidor de la comtese de Fox. Fou per la vengude de me file[...]
[fol. 48r.] Ihesus. Ayn CCCXLI. Ne Berala.
Divendres a XVII de febrertremetí per madone Constanse a ne Berale fil per blancagar a rahó de tres sous le lliura segons se segueix:
Ítem fil filat de la dite madone Constanse XIII rams qui pesen sis onces, cru. Es tornat a 4 onces. Item filat de Juliane 11 rams, qui poesen 9 onces, cru. E tornat a 6 onces e mige. Ítem filat de mi, Sanxe Xomenis. Son los rams 30 rams qui epsen 2 lliures, 7 onces, cru. És tornat a VI lliures I onsa e mige. [...]
[fol. 50r. ] […] Ítem diluns a 19 de juyn tremetí a ne Barale 9 rams de fil per fer blanch, qui pesen 5 onses.
Aporta-le·y Antoni am tres rams, filat de madone Constanse, las altres són filats de mi e de Juliane e de Asperanse.
Ítem a 15 d’agost resebí les dites 5 onses e pegué-les.
Ítem dimecres a 26 de setembre tremetí a Torroelle que me trametessen a Barselona an Bofill 33 rams de fil, los 10 rams eren filats de mà de madone Constranse, e los 22 de nosaltres totes. Pesen 15 onses, bé bestants, e tremetí-hi per pagar 3 sous: 15 onses.
Item resebí la lliura desús dita de fil en lo mes de nohembre, portartale hen Vidal de Toroelle. Tornà cant fou blanch a 10 onses e mige. […]
[fol. 55v.] Ayn MCCCCXL dimarts a XX del mes de setembre[ ...]
Seguex-çe la manera com sa fan les elbergènies en sols per stogar fins a la Corema: Primerament pendre les dites albergènies qui sien poguetes e fendre-les pel mig, però que stigan que no·s depertenguen, e feneu la coste e traurem lo fustet que tenen dins, però no fa lavar las barbas, que bones hi són, e bolir les dites albergènies en aygue ab sal, però fins que l’aygua bulla no y matau les albergínies. E com conexerets que comensan a blanir, traure-les de la dita aygua, e stendre-les sobre una post e posant-la a l’ayra. E com conexerets que sian axutes, a cap d’un dia o un e mig, agau clavels de girofle e a cada part de la albergènia meten-n·i un o dos, segons que bons vos sabran. Aprés, agau salses, axí com és pebre, canela e gingibre, polvoritsat, però ageu més pebre que naguna de les altres salses, e salpistan-les-ne totes de dins d’una n’una. E fet tot açò, agau vinagre blanch, e si masa és fort, meteu-hi aygua e meteu-hi cantitat de mel fins que torna agre-dols; e bolits-ho tot dos o tres buls abans que·n matau les algergènies, e puys, meteu-hi les albergènies e fent-li donar un bul o dos fins que sien moletes e cuytes reonablement, e puys treets la parola del foch e a cap d’un poch trets-ne les albergènies e meteu-les en una ola e fets que sien be cobertes del vinagra ab què an bulit, e tanttost na poden mengar, però no tapen la ola fins que tot sia ben fret.
[fol. 59r.-v.] Reebudes que he fetes de l’ayn qui finerà a XLII, segons apar desús escrit de ma mà [...]
Ítem resebí per composesió de ferme de hune carte de remensa de hòmens e de dones d’en Pidemont, per dos masos, tres florins: I lliura, XIII sous.
Ítem per composesió de ferme d’una carta de remenses d’omens e fembres d’en Crose, per lo mas Simon, I florí: XI sous.
Item per composesió de ferma de hune cartederesemensa d’omens e fembres, I sou [...] Item resebí de la composesió del fil d’en Bosch entre diners e castaynhes VI florins […]
[fol. 69r.] Jhesus. En nom de Déu sie.
Vui, qui és dimecres que tenim XVIII del mes d’abril de l’ayn MCCCCLXII dins lo castel de Verges, jo, Sanxe Ximenis de Fox e de Cabrere, done de la Val d’Osor, són vengude a comtà. Hi e comtat ab en Pere Sobirà, loctinent de bayle de le dite Val, hi havem comtat del primerdie de juyn de l’ayn MCCCCXLI qui finerà lo derer die de magde l’ayn XXXXII, he comtat tots los sensos, axí de blat com de dinés, he de forment, e de sivade, e d’ordi, e de mestal, e de legums venuts fins a le desús dit jorande; e de tots los delmes de carnelatges resebuts finsa ledite jornade, he c.aguem venut fins a le dite jornade, e remenses, composecions e fermes de cartes, e tots aveniments resebuts fins a la dite jornade. Me avets a tornat a compliment de le emont dites coses XXII lliures, II sous, IIII dinés.[...]
[fol. 73v.-74r.] Comensen les resebudes de l’any que comensa al primer die de juyn de l’any MCCCCXLIIII, e finerà lo darer die de mag de l’any MCCCCXLV.
Primerament e resebut de composesió d’en Cam Pla de Aguats V florins que mossèn Pere Joan a composat ab el e ab un altre a V florins, tres florins, resten-me’n II floprins: I lliura, XIII sous.
Ítem per resemció d’en Pere Caldés III florins: II lliures, IIII sous.
Ítem més d’en Masferrer per compre d’una terre: XI sous.
Ítem més d’en Masferrer per entrade de la muler XXV sous: I lliura, V sous.
Ítem d’en Mont de Sante Creu per resensó de une file: II sous, V.
Ítem és pagat en Vilanove del botatge del vi de l’any MCCCCLXIIII: XII lliures.
Ítem més de les rendes: XXXIII lliures. […]
[fol. 78r.] Despeses de forment, he de molture, de ajude he de forn. Ayn MCCCCXLIII Ítem dimarts a XXII d’octubre comprà mosèn Pere Johan, prevere, IIII corteres de forment a XV sous la cortere, coste de garbelar IIII diners: III lliures, IIII.
Ítem divendres a XXV d’octubre, vench la farine del dit forment, pegué al jove qui le aportà le multure e le ajude: VI sous, IIII.
Comensem a pastar de la dita farine dogous a VII de noembre.
Ítem disapte a VII de desembre pagué Ne Maria, le fornere, per lo coure del pa de tot sò desús escrit qui són, VIII corteres, e-li dat VIIII sous, IIII [...]
[fol. 109r.]
MCCCCXLIII. Memorial de roba qui·s levà de fora case:
A XV de octubre se’n portà na Salvadora Sunyera, de Sant Cugat de Vallès: primo unes cortines blanques, V peces, costaran de lavar: II sous, VI.
Ítem dues tovaylles grans a III diners la pessa: VI.
Ítem dues tovalles petites a un diner la pessa: II.
Ítem dos tovayllons e axugamans: I.
Fou pagade III sous, III.
A IIII de noembre se’n portà VIIII tovalles, les tres són grans: I sou, II.
Ítem tovallons VI: III.
Ítem axugamans III. Item torcacoltells III: I.
Ítem tovalloles II: I.
Ítem a XXVI de noembre aportà le dite robe e fou pagade: I sou, VII.
Ítem se n’aportà le dite done lo die matex: un parel de lensols prims del meu lit, de tres telles: IIII.
Ítem dos parels de lensols de companyhe, A IIII diners lo par: VIII.
Ítem dues tovalles grans noves per canegar, a IIII diners la cane, a cascuna cotre canes. Monten: II sous, VIII.
Sume aquesta pàgine VIII sous, VI.
[fol.119v. ] Ayn MCCCCXL. despeses extraordinàries
[...] Ítem diluns a XXVI de setembre per un sent d’agulles de cap: II sous, I.
Ítem dimarts I cane e mige de canemàs per adobar un matelàs a XX diners la cane, e per una rove de lana sardesca per lo matelàs: VI sous, V.
Ítem coste lo dit matalàs de fer de XV palms de larch e XII d’ample del lit, de Valsens, la mesió de dinar a I: IIII sous.
Ítem lo dia matex per I mise : I sou.
Ítem dimecres a XXVII del dit mes, sivade, mig cortà per les galines: III [...]
[fol. 122v.]
[...] Ítem dimarts a VIII de noembre segou per les galines: VI.
Ítem dimecres a VIIII del mes, per adobar les estores: V sous, VIII.
Ítem digous a VIIII del mes per tres pèls negres per les mànegues e colar petit, e per fil devant fins a le correge, a rahó de tres sous VI le pell: e de mans II reyals. Some tot: XIII sous.
Ítem lo die matex, per mel per lo codoynat, a tres diners la lliura, XVII lliures e mige: IIII sous, III [...]
[fol. 124v.]
[...] Nadal. Ítem divendres a XVI del dit mes per torons ab alegrie, he que fou madone Constanse, per IIII lliures de mel.
I sou, per IIII lliures d’avelanes torades I sou VIIII, e I lliura de vi bo VI, e per I liura d’alegrie V. Some tot: III sous, VIII.
Ítem per lo bisbe de Nadal dels fadrins: I sou.
[Afegit al final del foli 118v.]
A mon cor fay ham senyora.
Més vos am senyora mia.
que mostrar may no us poria. Cobla
Mes vos am secretament
que no us most tal continent,
si sentien mon turment
ma vida milor seria. Cobla [...]
Teresa Vinyoles VidalTeresa Vinyoles Vidal nació en Barcelona en el año 1942, casada, madre de dos hijos y dos hijas, es profesora titular de Historia Medieval en la Universidad de Barcelona, miembro del Centro Duoda de la citada universidad desde su fundación. En sus líneas de investigación hay el estudio de las mujeres, al que se ha dedicado desde 1969, y de la vida cotidiana en la época medieval; coordina un proyecto de investigación sobre didáctica de la historia. Entre sus obras se cuentan: Les barcelonines a les darreries de l’edat mitjana (Barcelona, Fundació Vives Casajuana, 1976). La vida quotidiana a Barcelona vers 1400 (Barcelona, Fundació Vives Casajuana, 1985). Mirada a la Barcelona medieval des de les finestres gòtiques (Barcelona, Dalmau, 2002). Presència de les dones a la Catalunya medieval (Vic, Eumo, en prensa). Y numerosos artículos sobre historia de las mujeres, entre los cuales destacarían: "Petita biografia d’una expòsita barcelonina del segle XV" (Barcelona, CSIC, 1989 p 255-272). "L’amor i la mort al segle XIV, cartes de dones" (Miscel·lania de textos medievals 8, Barcelona, CSIC, 1996, p.111-198). "Las mujeres del año mil" (Aragón en la Edad Media XVII, 2003, pp.5-26). |
Propongo una reflexión acerca del trabajo femenino en el mundo medieval. Por eso podríamos partir de la teoría feudal de la sociedad tripartita: los que rezan, los que luchan y los que trabajan; pero los pensadores medievales ya se dieron cuenta de que en esta estricta división social era muy difícil clasificar a las mujeres, y un clérigo irlandés se apresuraba en afirmar: No digo que la función de las mujeres sea rezar, trabajar o luchar, si no que ellas están casadas con aquellos que rezan, trabajan y luchan, y ellas les sirven. A este “servir” podríamos darle un doble sentido. En primer lugar podríamos interpretar que ellas efectúan unas tareas serviles, que en sentido propio son tareas manuales y pesadas, aquellas para las cuales se recurría también a las esclavas; así mismo podemos decir que realizan una tarea que va más allá del trabajo remunerado, ellas sirven, son útiles. Siguiendo el texto al pie de la letra tendríamos que decir que la misión de las mujeres consistía en ser útiles a los hombres de la comunidad; dándole un sentido más amplio podríamos afirmar que se reconoce que sirven a toda la comunidad.
El trabajo manual, especialmente el trabajo de la tierra, era propio de los siervos, hombres y mujeres; todas las tareas cotidianas del hogar eran propias de las mujeres de cualquier clase social. A lo largo de los siglos medievales se consideraron serviles los trabajos que se realizaban propter lucrum, no específicamente los trabajos manuales, si no sólo los remunerados, aquellos trabajos no se podían llevar a cabo en domingo. Muchas tareas cotidianas femeninas podían parecer materialmente serviles, es decir manuales, pero eran formalmente libres, ya que no estaban remuneradas; así no se considerarían moralmente serviles, por lo que se podrían realizar en domingo. De este modo, de hecho, se dignifica el trabajo del ama de casa, pero sus tareas no tienen fin, no disponen para sí mismas de ningún día de ocio. La vida de las mujeres es una vida llena de trabajo.
Comentaba que los trabajos de las mujeres podían parecer meramente manuales, pero sabemos que no es así: podemos afirmar que el trabajo de las mujeres se presenta de dos formas distintas: como trabajo servil y como “trabajo emocional”; el trabajo servil, se relaciona con las largas jornadas de tareas domésticas repetitivas, con resultados efímeros; el trabajo emocional son una serie de tareas y prácticas muy complejas, de transmisión, de relación, de esmero. Algunos pensadores medievales reconocían esta función: No ignores que cuando alguien se encuentra sano o enfermo (las mujeres) sirven muy diligentemente, y mejor, y más limpiamente que los hombres. Fijémonos que se insiste en el sentido de “servir”.
Hay unas habilidades de las mujeres, acumuladas durante generaciones y transmitidas de madres a hijas, de señoras a sirvientas, incluso de sirvientas a señoras, de maestras a aprendizas; son saberes propios del colectivo femenino; entre las muchas cosas que tenían que saber hacer, hemos de pensar también en la gestión y la administración. Estos trabajos eran a menudo opuestos en un nivel teórico a la tarea espiritual; los sermones hablaban de Marta y María; el trabajo de María, el contemplativo, que hasta cierto punto podríamos considerar intelectual, estaba reservado casi exclusivamente a las monjas; el resto de mujeres, incluso las nobles o las burguesas, tenían que ser Martas, es decir, todas ellas tenían que esforzarse en la dedicación a la familia, de las tareas y el gobierno del hogar, al trabajo con la rueca. Mientras que para los hombres de las clases acomodadas se proponían momentos de ocio, se pedía a todas las mujeres que estuvieran siempre ocupadas.
El hogar medieval, tanto si es una masía, como un castillo, como una casa urbana, es una unidad de producción, consumo y reproducción; la mujer de todas las clases sociales se hacía cargo de la administración y el buen gobierno de la casa, colaboraba en las actividades profesionales del marido, a quien en ocasiones sustituía, se hacía cargo de todo al convertirse en viuda; tenía que conocer unas técnicas y poner en práctica unas estrategias, con lo cual se le pedían unas capacidades y también unas actitudes, en definitiva tenía que ser sabia. A la mujer le conviene vivir sabiamente y gobernar con juicio a sí misma y a su casa, e instruir sus hijos y sus hijas, y su compañera.
Las amas de casa tenían que administrar la economía doméstica y realizar las tareas cotidianas, aunque tan sólo las mujeres de condición más humilde las hacían ellas solas; en los hogares más acomodados y a veces no tan acomodados, había alguna sirvienta o esclava que ayudaba en las tareas más pesadas; podría parecer, pues, que las amas de casa estaban a menudo ociosas, pero, como veremos, no era así, normalmente estaban al corriente de los negocios y las rentas familiares y también ellas trabajaban con las manos.
Las mujeres de las clases populares era evidente que no podían dejar de trabajar, de forma muy directa hacía referencia Eiximenis que de las mujeres simples y las menores de aquellas no hace falta hablar, pues forzosamente se tienen que ocupar si quieren vivir. Ellas, además de las tareas domésticas, tenían que dedicar parte de su tiempo a algún trabajo remunerado, como auxiliares en las tareas del campo, en el obrador de las familias menestrales, o con un oficio propio, normalmente poco calificado y mal pagado. La impresión que da la documentación medieval es que todas ellas eran capaces de realizar multitud de actividades, conocían técnicas muy diversas, los trabajos ocupaban sus horas y sus días, muchos de estos trabajos estaban vinculados a los quehaceres diarios, es decir, a la vida. También observamos que eran depositarias y transmisoras de una cultura que, en parte, difería de la cultura dominante.
El documento que presentamos nos ofrece una muestra de los múltiples trabajos, de los sorprendentes saberes, de la actividad constante de una viuda de la nobleza. Se trata de unos fragmentos de un libro de contabilidad de la noble Sancha Ximenis de Cabrera, que suponen un recorrido por la alimentación, la economía doméstica, la administración de las rentas feudales, por los vestidos, la relación con sus hijas, la correspondencia, el trabajo manual y la gestión de un obrador de hilatura; así mismo podemos introducirnos en la cultura de esta mujer, y por extensión de las mujeres de su tiempo y de su clase; pero también podemos ver su relación con otras mujeres de las clases populares con las que mantenía contactos profesionales.
Cuando escribió el que ella intituló Primer libro memorial, Sancha Ximenis hacía veintitrés años que era viuda, se había casado en el año 1408 con un hijo de la condesa de Foix, Arquimbau de Grailly, con quien tuvo dos hijas, y del que enviudó tras nueve años de matrimonio. Dejó las tierras del condado de Foix en una fecha que no podemos precisar, sin haber recuperado del todo la dote que le debían; invirtió su dinero y su esfuerzo en la capilla de Santa Clara de la catedral de Barcelona y en la adquisición y la administración de los derechos del valle de Osor (La Selva, Girona) que compró a su hermanastro Ramón de Cabrera. Murió vieja, tendría unos ochenta años, en el año 1474, es decir, permaneció viuda durante cincuenta y siete años.
Los moralistas remarcan que la viuda debía distinguirse por la austeridad en el vestir y en su diligencia. Dice san Jerónimo: no sólo la viudez debe mostrarse en las vestiduras negras y grandes, también en cualquier adorno... Oh, qué hubiera dicho san Jerónimo en estos tiempos si hubiera visto nuestras viudas tocadas a la castellana, pintadas en la cara... en sus casas nunca se hacen las tareas, o pocas, pero de la cama a la mesa y de la mesa a la ventana. Evidentemente, no es el caso que nos ocupa: en sus libros de contabilidad difícilmente se citan vestidos, con la excepción de un número considerable de velos; en casa de Sancha, como veremos, se trabajaba y no poco.
A pesar de lo que nos dice Eiximenis, la situación de las viudas había empeorado notablemente en Cataluña a partir del siglo XIV; las nuevas leyes, tales como la llamada Recognoverunt Proceres (1284) y las que se aprobaron en las Cortes de Perpiñán de 1351, que recogen la tradición del derecho romano, disminuían los derechos de las mujeres e incidían en las viudas que perdían el usufructo vitalicio que les reconocía el derecho anterior y las dejaba a merced de la dote, si lo podían recuperar cosa que en ocasiones no era fácil, y de la voluntad del marido, que podía dejar bien provista la mujer o bien materialmente en la calle transcurrido el año de duelo. No querría profundizar en el aspecto de la viudez pues se desplaza del tema central del comentario, que es el mundo del trabajo; pero sí que debo constatar que las viudas, por su peculiar situación económica y legal, son las mujeres que la documentación nos muestra más visiblemente que trabajan; estoy convencida de que todas las mujeres trabajaban, pero su participación en el mundo laboral queda a menudo más escondida cuando ellas están casadas. Todas las mujeres colaboraban en la empresa familiar, tanto si ésta consistía en el gobierno de un feudo, como de un negocio mercantil, una explotación agraria o un obrador.
Esta colaboración no estaba contemplada en los estatutos gremiales, quedan escasos contratos laborales de mujeres y el trabajo que hacían en muy pocas ocasiones era reconocido. De todos modos tenemos evidencias: algunas viudas se quedaban con las herramientas de su difunto marido, se da por sentado que para continuar trabajando, ya que ellas conocían las técnicas del oficio; parecería evidente que fuera así en el caso de las viudas de los tejedores, los sastres, u otros artesanos relacionados con el vestido; pero también las viudas de menestrales de oficios que nos pueden parecer alejados de las tareas que creemos que habitualmente realizaban las mujeres, tenían interés en quedarse alguna herramienta del obrador. Así, por ejemplo, la mujer de un afilador barcelonés compraba muelas en los encantes con los bienes de su difunto marido. O el caso sumamente interesante de Isabel, viuda de Genís Solsona, boticario barcelonés, muerto en el año 1445, que recibía como legado testamentario de su difunto marido una almazara con todas las herramientas necesarias para la producción de almidón, que sería la tarea que ella realizaría habitualmente en el obrador y de la que sería una profesional experta.
Una vez muerto el marido, parecería que la viuda pudiera actuar por sí misma, pero a veces no era así, la pobreza impedía a muchas viudas hacer cualquier otra cosa que no fuera sobrevivir, especialmente vemos desamparadas a las viudas mayores y sin hijos. También encontramos viudas jóvenes que tienen que sostener innumerables pleitos para conseguir recuperar la dote, y otras que están controladas por la familia o los herederos del marido, u otras separadas de sus hijos e hijas ya que el marido no las había dejado como tutoras. De hecho, la sociedad ejercía un control sobre las viudas, pero evidentemente más alejado del que podía ejercer el padre sobre las hijas o el marido sobre la mujer.
Sancha Ximenis, durante su larga viudez, tuvo que afrontar circunstancias adversas; de todos modos, en la época del texto que comentamos, la década de 1440, tendría menos de cincuenta años, la encontramos llena de energía, lúcida, sabia, prudente, decidida, tozuda y activa, esencialmente muy activa.
Vivía habitualmente en Barcelona con un pequeño grupo de sirvientas y sirvientes; pero viajaba a menudo a las tierras gerundenses donde tenía sus dominios y donde vivían otros miembros de la familia Cabrera. Queda muy claro que ella personalmente iba a llevar las cuentas y a cobrar sus derechos y que también ella misma lo anotaba en su libro de contabilidad: Hoy, que es miércoles, que estamos a 18 del mes de abril del año 1442, dentro del castillo de Verges, yo, Sancha Ximenis de Foix y de Cabrera, señora del Valle de Osor, he venido a contar. Y he contado con Pedro Sobirà, lugarteniente del baile de dicho valle. Pasa cuentas de los ingresos: recibía parte de los censos en dinero y el resto en cereales y legumbres, que no cobraba en especias si no el importe de venta una vez vendidos, también recibía derechos del vino, de la carne, del cáñamo y de otros productos; así mismo recibía alguna cosa en especias tales como castañas.
Sancha Ximenis, como señora del valle, cobraba redenciones y otros derechos banales, constan varias entradas: como acuerdo de arrendamiento un certificado de redención de hombres y de mujeres de varias masías del valle de Osor. Podemos citar la redención de un hombre que se consigna en la cantidad bastante elevada de 43 sueldos, en cambio la hija de un campesino se redime por la cantidad mínima que prevé la ley en caso de redención de jóvenes vírgenes que salían de la masía para casarse, 2 sueldos y 8 dineros, si bien no lo cobra todo la señora ya que 3 dineros serán para el salario del baile. Distintamente, para entrar una mujer en la masía paga 25 sueldos. Si tenemos en cuenta que es probable que la muchacha se redimiera de la masía del padre para irse a vivir a la masía del marido, sumado la dote, al vestido nupcial y a otros gastos, una boda en el campo era bastante cara para el poder adquisitivo de los campesinos del siglo XV.
Hablábamos antes de una cierta precariedad en las referencias a los vestidos, en general los gastos de Sancha son austeros. Sólo parece tener tres debilidades: la capilla de la catedral, la defensa de sus derechos por los cuales emplea dinero y esfuerzos, y los regalos para sus hijas que vivían en Bearn.
Sancha Ximenis pertenecía a las clases privilegiadas, esto presuponía entre otras cosas el acceso a la cultura escrita; Sancha era una mujer letrada que llevaba personalmente su contabilidad y una activa correspondencia de la que desgraciadamente nos ha quedado muy poca. En el texto que comentamos ella misma nos dice que escribía y enviaba cartas y que recibía y las contestaba: escribía a sus hijas, o a personas allegadas a ellas, a otros miembros de la familia, a autoridades diversas, tanto religiosas como civiles, sobretodo escribía para reclamar sus derechos o los derechos de sus hijas.
El texto que comentamos contiene en buena parte la contabilidad doméstica. Sancha era una ama de casa y se ocupaba del buen gobierno y la administración del hogar, entre otras cosas de la alimentación cotidiana, de los gastos ordinarios, tales como el pan y de los extraordinarios, la comida de las fiestas. Por lo que respecta al pan, es el alimento básico, se ocupaba de todo el proceso de elaboración: compraba el trigo normalmente por medio de un clérigo servidor suyo, y pensamos que lo hacía así para ahorrarse alguna tasa, lo hacía cribar y moler, para lo cual pagaba tanto el trabajo del molinero como el del portador y la ayuda o impuesto debido. El pan lo amasaban en casa, muy probablemente lo haría alguna sirvienta y después se llevaba a cocer al horno, por la hornada pagaba a la panadera. Lo anota de forma minuciosa: Empezamos a amasar dicha harina el jueves 7 de noviembre; el sábado 7 de diciembre pagué a María, la panadera, para cocer el pan.
Cuidaba de la ropa, anotaba puntualmente la lista de la lavandera, es decir, todas las piezas de ropa que se enviaban a lavar fuera de casa y que se depositaban en las manos de una profesional para que las devolviera limpias; a menudo podemos leer: Memorial de ropa que se lavó fuera de casa. Era ropa blanca, sábanas, manteles, toallas, servilletas, paños, cortinas...
Normalmente no hay gastos superfluos, los objetos y las cosas que se rompen las hacía arreglar, así se remienda un colchón de lana o unas alfombras. En la casa se criaban gallinas y se fabricaban confituras, sobre todo de membrillo para lo cual se compraban los membrillos y la miel.
Para las fiestas de Navidad se fabricaban en casa de Sancha Ximenis, y suponemos que en muchas casas más o menos acomodadas de su tiempo, turrones y angelets, que creo que serían barquillos, y el vino piment o la clareia. Conjuntamente con su fiel colaboradora, elaboraba los turrones para la Navidad de 1440, Sancha anotaba en su libro una semana antes de las fiestas: por turrones con alegría, y que fue madona Constanza, 4 libras de miel, 4 libras de avellanas tostadas, y una libra de vino y una libra de alegría; regalaba turrones a algunas mujeres de la familia y celebraba la fiesta del obispillo para los mozos que estaban a su servicio o de su entorno.
Lo que más nos puede sorprender del libro de cuentas de Sancha Ximenis son las páginas dedicadas a su actividad profesional. Leído detenidamente el libro llegamos a la conclusión que gestionaba un obrador de hilatura, en el que trabajaba ella misma y cuatro o cinco mujeres más. En primer lugar tendríamos que citar a madona Constanza, su principal colaboradora durante aquellos años y mujer de confianza; también estaba Juliana, la castellana, y Esperanza, Magarola consta como hiladora y también como costurera. Tenía a su servicio a Servalls que muy probablemente trabajaba en el obrador y que además hacía encargos fuera de casa.
Hilaban todas juntas, Sancha anotaba en su libro las madejas que había hilado cada una de ellas y el peso del hilo. Y hace constar que ella hilaba y después anotaba con su propia letra hilado por mí, Sancha Ximenis. Después hacía blanquear el hilo, Berala, blanqueadora de hilo, era quien habitualmente se encargaba de esta tarea por la que cobraba tres sueldos por libra; esta profesional recibía el hilo crudo y tenía que someterlo a una serie de operaciones para extraerle las impurezas que llevaba por naturaleza y que le daban una cierta tonalidad, de manera que quedara blanco, a lo largo de esta operación el hilo perdía peso. Es por ello que Sancha Ximenis pesaba las madejas de hilado antes y después del blanqueado.
Una vez hecha esta operación se llevaba el hilo a tejer, sobretodo lo encargaba a profesionales tejedoras, también a algún tejedor, pero en la mayoría de ocasiones son mujeres tejedoras las que trabajaban para Sancha: Aldonça, esposa de Gabriel Bofill; Catalina la Aragonesa, Creixells, Seguera o Cortadella, tejedora de la calle del Carmen de Barcelona; serían tejedoras de velos o tejedoras de lino.
Cuando iba a las tierras de Girona para llevar las cuentas de sus dominios podríamos pensar que rompía con su actividad y rutina diarias; pero no era así, le acompañaban las mujeres de su casa y se llevaban el trabajo y continuaban hilando: el miércoles 26 de septiembre pedí a Torruella, seguramente desde Osor donde había ido a llevar las cuentas con el baile, que me remitieran a Barcelona a Bofill 33 madejas de hilo, 10 madejas estaban hiladas por la mano de madona Constanza y las otras 22 por todas nosotras. Podría ser hilo para que lo tejiera Aldonça, esposa de Gabriel Bofill.
Cuando anota todos sus gastos nos menciona también una tendera, Margarita Esiberta a quien hizo algunas compras; a María, la panadera que les horneaba el pan; a las lavanderas María y Salvadora que se llevaban la ropa para lavar fuera de casa.
Este entorno de transmisiones y de relaciones iba más allá de las paredes de casa. Sancha, hacia el septiembre de 1440, anotaba minuciosamente la receta para conservar berenjenas, de manera que podemos seguir el proceso paso a paso. Pienso que podría haber recibido la receta oralmente de alguna campesina y ella, mujer letrada, la puso por escrito, convirtiéndose en un peldaño de transmisión de cultura femenina.
Con este texto, escrito con una finalidad eminentemente práctica, un libro de contabilidad, se puede hacer un repaso a los saberes que nacían de la práctica, de la experiencia; es decir, del trabajo, del aprendizaje, del magisterio, que siempre parten y se proyectan en relación. Podemos hablar del abastecimiento, la cocina, la conserva de alimentos, la confección y cuidado de los vestidos, la celebración ritual de las fiestas, la medicina hogareña, la preocupación por las hijas y los hijos, y de todo un cúmulo de sabiduría popular, sabiduría femenina, prácticas de relación, cuidado del otro y cuidado de las cosas al servicio de los demás.
Es un reconocimiento de los trabajos femeninos, los remunerados, generalmente mal remunerados, y los no remunerados; los reconocidos, normalmente sólo medio reconocidos, y los silenciados. Es un acercamiento a la otra cultura, que corría –aún corre- paralela a la cultura dominante, y que estaba en manos de las mujeres y que se transmitía de una mujer a otra.
Podría referirse a libras, haciendo servir la unidad de medida romana as, si bien es una forma que no he encontrado usada en este tipo de documentos.
Es un error, será el día 10.
Texto de Gerbert de Limerick (Irlanda 1110-1130) citado por Georges Duby en Los tres órdenes o lo imaginario, pág. 374.
Sobre el tema: Hilary Rose, “Trabajo de mujeres: conocimiento de mujeres”. En Mujeres: ciencia y práctica política, Madrid, Debate, 1987, pp. 57- 86.
Bernat Metge, Lo Somni, Barcelona, Barcino, 1925, p. 102.
Los textos citados de Francesc Eiximenis, "Dotzè del Cresià", cap. 554 y 563, respectivamente. Publicado en La societat catalana al segle XIV, al cuidado de Jill Weebster. Barcelona, Edicions 62, 1967, págs. 80-83.
Francesc Eiximenis, Lo libre de les dones, cap. 97, Barcelona, Universidad de Barcelona, 1981, p.148.
Vinyoles, Teresa, “La casa i l’obrador d’un esmolet de Barcelona a finals del segle XIV”. Cuadernos de Historia Económica de Cataluña, n. 15. Barcelona, 1976, pp.9-49.
Comas, Mireia, “Una adroguera barcelonina del segle XV: Isabel, vídua de Genís Solsona”, trabajo en prensa.
Publicamos algunas cartas en: Vinyoles, Teresa, “Cartes de dones del segle XV, notes sobre la crisi feudal”. Acta Mediaevalia, en prensa. Copiamos aquí una de estas cartas enviada por Violante de Rec, mujer procedente del campesinado acomodado de Osor, a Sancha Ximenis sobre un envío de hilo de cáñamo:
Muy egregia señora y mi querida ama. Antes que nada me encomiendo a vuestra gracia y merced. Señora, os envío 19 libras de hilo de hebra de cáñamo en 58 madejas, los cuales os envío. He tardado tanto a enviaros la hebra, esperando que la estopa estuviera hilada, y he esperado hasta que no estuviera hilada más de la mitad. La Ferrera me ha dado 22 libras de hilo crudo, y al ser cocido han sido devueltas en 19 libras. Señora, madona, Vilanova, Bernardo Guillem y vuestra ahijada, aunque sea aún tan pequeña, se encomiendan a vuestra gracia y merced. Espero que os plazca guardarme la almohada en la que va el hilo. Señora me encomiendo a vuestra gracia y merced. Violante de Vilanova.
[En el reverso] A la muy egregia señora y mi querida ama, la señora doña Sancha de Foix y de Cabrera, en Barcelona.
A estas personas no las puedo identificar plenamente, pero puedo suponer que madona podría ser Isabel de Cabrera, o la madre o la suegra de la remitente; Vilanova es sin duda el marido de Violante y Bernardo Guillem y la ahijada de Sancha serían el hijo y la hija del matrimonio Vilanova-Rec.
Sancha Ximenis también puso por escrito de su puño y letra sus recetas para teñir telas finas, lavar seda, quitar manchas o curar el mal de ojo (Llibre del servidor, fol. 57v. per treure taques dels draps fetes de tinta, prenets suc de taronges o de lima o de limona fregats-la e puis levats ho a aygua...).
Asimismo, en el libro de contabilidad que nos ocupa copiaba una oración para el dolor de garganta, en otro de sus libros también incluye una fórmula mágica contra los gusanos intestinales. También entraría dentro de este mundo femenino la canción, la poesía cantada; parece que hoy podemos imaginar un grupo de mujeres trabajando juntas y sin cantar; pero yo las imagino hilando y cantando juntas, y creo que sería así, por eso Sancha copiaba en un trozo de página que le quedaba entre sus cuentas una balada: En mi corazón amo a una señora. Os quiero tanto señora mía, que no os lo podría demostrar nunca.
Texto de Gerbert de Limerick (Irlanda 1110-1130) citado por Georges Duby en Los tres órdenes o lo imaginario, pág. 374.
Sobre el tema: Hilary Rose, “Trabajo de mujeres: conocimiento de mujeres”. En Mujeres: ciencia y práctica política, Madrid, Debate, 1987, pp. 57- 86.
Bernat Metge, Lo Somni, Barcelona, Barcino, 1925, p. 102.
Los textos citados de Francesc Eiximenis, "Dotzè del Cresià", cap. 554 y 563, respectivamente. Publicado en La societat catalana al segle XIV, al cuidado de Jill Weebster. Barcelona, Edicions 62, 1967, págs. 80-83.
Francesc Eiximenis, Lo libre de les dones, cap. 97, Barcelona, Universidad de Barcelona, 1981, p.148.
Vinyoles, Teresa, “La casa i l’obrador d’un esmolet de Barcelona a finals del segle XIV”. Cuadernos de Historia Económica de Cataluña, n. 15. Barcelona, 1976, pp.9-49.
Comas, Mireia, “Una adroguera barcelonina del segle XV: Isabel, vídua de Genís Solsona”, trabajo en prensa.
Publicamos algunas cartas en: Vinyoles, Teresa, “Cartes de dones del segle XV, notes sobre la crisi feudal”. Acta Mediaevalia, en prensa. Copiamos aquí una de estas cartas enviada por Violante de Rec, mujer procedente del campesinado acomodado de Osor, a Sancha Ximenis sobre un envío de hilo de cáñamo:
Muy egregia señora y mi querida ama. Antes que nada me encomiendo a vuestra gracia y merced. Señora, os envío 19 libras de hilo de hebra de cáñamo en 58 madejas, los cuales os envío. He tardado tanto a enviaros la hebra, esperando que la estopa estuviera hilada, y he esperado hasta que no estuviera hilada más de la mitad. La Ferrera me ha dado 22 libras de hilo crudo, y al ser cocido han sido devueltas en 19 libras. Señora, madona, Vilanova, Bernardo Guillem y vuestra ahijada, aunque sea aún tan pequeña, se encomiendan a vuestra gracia y merced. Espero que os plazca guardarme la almohada en la que va el hilo. Señora me encomiendo a vuestra gracia y merced. Violante de Vilanova.
[En el reverso] A la muy egregia señora y mi querida ama, la señora doña Sancha de Foix y de Cabrera, en Barcelona.
A estas personas no las puedo identificar plenamente, pero puedo suponer que madona podría ser Isabel de Cabrera, o la madre o la suegra de la remitente; Vilanova es sin duda el marido de Violante y Bernardo Guillem y la ahijada de Sancha serían el hijo y la hija del matrimonio Vilanova-Rec.
Sancha Ximenis también puso por escrito de su puño y letra sus recetas para teñir telas finas, lavar seda, quitar manchas o curar el mal de ojo (Llibre del servidor, fol. 57v. per treure taques dels draps fetes de tinta, prenets suc de taronges o de lima o de limona fregats-la e puis levats ho a aygua...).
Asimismo, en el libro de contabilidad que nos ocupa copiaba una oración para el dolor de garganta, en otro de sus libros también incluye una fórmula mágica contra los gusanos intestinales. También entraría dentro de este mundo femenino la canción, la poesía cantada; parece que hoy podemos imaginar un grupo de mujeres trabajando juntas y sin cantar; pero yo las imagino hilando y cantando juntas, y creo que sería así, por eso Sancha copiaba en un trozo de página que le quedaba entre sus cuentas una balada: En mi corazón amo a una señora. Os quiero tanto señora mía, que no os lo podría demostrar nunca.
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Dirección científica: Maria Milagros Rivera Garretas
Agradecimientos: La investigación para esta obra ha sido financiada por el Proyecto de Investigación del Instituto de la Mujer I + D titulado: "Entre la historia social y la historia humana: un recurso informático para redefinir la investigación y la docencia" (I+D+I 73/01).
Han contribuido a su elaboración y producción el Institut Català de la Dona de la Generalitat de Catalunya y la Agrupació de Recerca en Humanitats de la Universitat de Barcelona (22655).
Dirección técnica del proyecto: Dr. Óscar Adán
Producción ejecutiva: Dr. Sonia Prieto
Edición: Marta García
Correción: Gemma Gabarrò
Traducción al alemán: Doris Leibetseder
Traducción al catalán: David Madueño
Traducción al inglés: Caroline Wilson
Traducción al italiano: Clara Jourdan
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