Esta investigación está centrada en la evolución del nacionalismo vasco en el exilio durante el periodo 1956-1977. El estallido de la Guerra Civil española y el posterior establecimiento de la dictadura franquista, obligaron al Gobierno vasco y los nacionalistas vascos a huir al exilio, que se convertirá en refugio a la vez que marco para la conservación y desarrollo del nacionalismo vasco. La influencia del exilio condicionará las relaciones internacionales, la homologación de la causa vasca y los referentes ideológicos. A través de la figura de Manuel Irujo, miembro del Partido Nacionalista vasco y principal ideólogo del nacionalismo en el exilio durante la etapa estudiada, comprobaremos cómo el exilio transforma, condiciona y protege la construcción de la nación política imaginada.