Joan Mercadal i Mascaró analiza el periódico anarquista menorquín Fructidor, que se publicó entre 1934 y 1936, portavoz primero del Ateneo Racionalista de Maó y, posteriormente, órgano de la CNT menorquina. El trabajo, sin embargo, realiza también una aproximación más genérica al movimiento anarquista menorquín para contextualizar adecuadamente el estudio del periódico.
Tras revisar la bibliografía y demás trabajos existentes, referentes al estudio del anarquismo en Menorca, he decidido centrar mi estudio en el análisis de un capítulo obviado de la historia de los ácratas isleños, el comprendido durante la segunda república y los inicios de la guerra civil. La elección del período está relacionado con el hallazgo de una fuente olvidada y muy interesante: el diario Fructidor.
Este trabajo nació de la formulación de algunas preguntas: existió realmente un movimiento anarquista en Menorca? como era este? contaba con muchos seguidores? tenía infraestructuras? qué línea de pensamiento los guiaba? tenían un discurso propio? tenían sus ideas y exigencias, una incidencia real en la vida cotidiana menorquina ?, etc.
A raíz de estas cuestiones, mi objetivo fue el de hacer una aproximación a lo que significó el movimiento libertario menorquín durante los años treinta, y más concretamente, durante los años 1934-1936, espacio que coincide con la vida del diario anarquista Fructidor, que fue el órgano del Ateneo Racionalista de Maó, y que, más adelante, se convertirá portavoz de todos los sindicatos afectos a la CNT de Menorca.
Así pues, es mi anhelo contribuir a desvelar el mundo mental, constituido por los miedos, las alegrías, las inquietudes y limitaciones de los ácratas isleños. Además, pretendo analizar las infraestructuras de que disponían y su evolución, así como la percepción que éstos tenían de la vida cotidiana en Menorca durante los años anteriores a la guerra y los primeros meses de esta.
