La situación que estamos viviendo, provocada por la crisis sanitaria y económica del COVID-19, ha afectado a todos los sectores, en particular al de la cultura, pero también al de la enseñanza. Una de las primeras consecuencias en nuestro ámbito fue adaptar, en unos pocos días, todos los cursos que ofrecemos en formato presencial al formato virtual.
Desde el Programa de gestión cultural de la Universitat de Barcelona, gracias a disponer de varios programas a distancia o semipresenciales, nos marcamos como objetivo aplicar esta experiencia en los cursos que hasta aquel momento hacíamos en formato presencial. Todo ello siendo conscientes de que se tenían que ampliar los recursos, subirlos de nivel (¡toda crísis es una oportunidad!) y adaptarlos a las circunstancias excepcionales del confinamiento (psicológicas y de teletrabajo en condiciones no suficientes adecuadas).
Por otro lado, para nosotros es importante que los estudiantes salgan lo mejor preparados para enfrentarse al mercado laboral, especialmente en momentos como los actuales (de consecuencias todavía inciertas), donde saber actuar y tomar decisiones es fundamental para salvar proyectos y proyectarlos cara al futuro. Pero, también era y es importante apoyar y hacer un seguimiento emocional de nuestros estudiantes en estos momentos tan difíciles y complicados.
Así, con estos objetivos y filosofía, pusimos en marcha varias estrategias. Entre otras: poner a disposición de los estudiantes nuevos materiales documentales y en video; distintas herramientas pedagógicas para profundizar en los conocimientos; (re) programar clases de carácter teórico y práctico de manera virtual (trabajando con todos los estudiantes o con dinámicas de grupo); concertar tutorías grupales e individuales para tener un contacto más directo y próximo; o invitar a varios profesionales para compartir reflexiones alrededor de los efectos provocados por la crisis asociada al COVID-19 en la cultura y generar debate entre nuestros estudiantes. Estamos continuando el aprendizaje y esperamos mejorarlo mucho más.
Seguramente no todo lo hemos hecho bien, pero teníamos claro que había que debíamos poner todo el esfuerzo para estar a la altura de la confianza que los estudiantes nos habían depositado. Por eso, el equipo del Programa de Gestión cultural quiere agradecer a los profesionales invitados (directores de festivales, museos, programas de cooperación cultural internacional, teatros, ferias, programas municipales o empresarios culturales, entre otros…) su generosidad en momentos difíciles para todos ellos. Y a nuestros estudiantes, la paciencia en este proceso de adaptación. Esperamos el momento de volver a verlos en las aulas para continuar aprendiendo juntos y, como no, tenerlos más cerca.
