Participación de la mujer en la lucha sindical.
"El interés de las mujeres por los sindicatos no fue mejor, que el interés en los partidos. La tasa de mujeres sindicalizadas no sobrepasa el 25% de un conjunto de empleados repartidos en varios sindicatos dentro de los cuales los más importantes son: La Unión Marroquí del Trabajo (UMT) fundada en 1955, La Confederación Democrática del Trabajo (1978), la Unión Federal de Trabajadores.
La debilidad de ese porcentaje puede explicarse por la posición tradicional de los sindicatos que no escribieron dentro de su lucha reivindicativa, las reivindicaciones propias de las mujeres trabajadoras y por la situación social de la mujer. En el principio de los a os ochenta, varias mujeres de la extrema izquierda han ingresado a el UMT, después de pasar por una experiencia dentro de una organización femenina, y han construido comisiones de mujeres encargadas de dar cursos de alfabetización a las obreras, para sensibilizarlas en cuanto a sus derechos. En su ultimo congreso (Abril 1995) mujeres aparecen por primera vez dentro del comité administrativo que cuenta 55 miembros, 3 mujeres en el "bureau" federal sobre un total de 21 miembros.
La CDT no aportaba nada nuevo a las mujeres sindicalizadas, ni definía programas reivindicativos específicos, excepto la reivindicación de la aplicación del principio de igualdad de los sueldos entre ambos sexos. Sin embargo a podido tener más mujeres, sobre todo, en los sectores de la educación y de la salud. La tasa de las mujeres comprometidas en el Sindicato de las Salud es el 25% de los miembros del mismo sindicato, la tasa de mujeres que trabajan en los sectores de la salud y de la educación secundaria es respectivamente evaluada en 33% y 30%, luego 25% en la educación primaria. El resto de sectores que emplean la mano de obra femenina, como la conserva y el textil, la actividad sindical en general, sufre de un bloqueo por parte de los patrones.
Sin embargo, las mujeres que se encuentran en los órganos de responsabilidad son raras, por ejemplo, la elección de una sola mujer en el Consejo Administrativo Nacional del Sindicato Nacional de la Educación en 1984 y una sola mujer en el Consejo Administrativo del Sindicato Nacional de Petróleo y Gas en 1985. El carácter limitado de la participación de las mujeres en la actividad sindical, es debido por un lado, al hecho que los problemas de las mujeres como trabajadoras y como mujeres no han sido adoptados por el movimiento sindical marroquí; y por otro lado por los obstáculos residentes en la mentalidad dominante que considera a las mujeres como eternas menores, además de su conciliación entre el trabajo dentro y fuera de casa, lo que absorbe la mayoría de su tiempo."