La represión franquista.

Durante el transcurso de la Guerra Civil, las tropas franquistas fueron instaurando su gobierno conforme iban conquistando territorios, ayuntamientos de pueblos y ciudades que eran nombrados por el propio ejército invasor. El 28 de julio de 1936 la Junta de Burgos había decretado el Estado de Guerra en todo el territorio español y así civiles y militares quedaban sometidos al Código de Justicia Militar, el poder constituido en cada territorio era el que asumía organizar la represión de los vencidos.

Hasta el 1 de abril de 1939 no estuvo bien organizada y homogeneizada la represión política, que fue canalizándose a través de Consejos de Guerra. Estos Consejos juzgaban a quien se oponía al Alzamiento Militar y apoyaba el gobierno del Frente Popular: los dirigentes o militantes de partidos políticos y centrales sindicales. El 25 de octubre de 1936 un decreto oficial suprimió toda actividad política y sindical y el 19 de abril del 1937 el Decreto de Unificación creó el partido único Falange Española Tradicionalista y de las JONS.

El 3 de enero de 1938 se crea el primer gobierno regular que comienza a dibujar su corpus legislativo autoritario con leyes como el Fuero del Trabajo, emitido como decreto el 9 de marzo de 1938 . El Fuero del Trabajo definía sueldos y condiciones de trabajo de la industria, relaciones laborales, el Sindicato Vertical... El 22 de abril de 1938 surge la Ley de Prensa.

A comienzos de 1939, una vez estaba en poder del bando rebelde la mayor parte del territorio español se comenzaron a establecer los márgenes de represión política, una muestra clara es la Ley de Responsabilidades Políticas. Nacida el 9 de febrero de 1939, duró hasta el 10 de noviembre de 1966, sufriendo notables reformas en 1942, declaraba personas objeto de responsabilidad política a personas jurídicas o físicas, con carácter retroactivo desde el 1 de octubre de 1934 al 18 de julio de 1936, podía ser tanto por militancia como por dirección de partidos. Declaraba ilegales los partidos - integrados o no en el Frente Popular - opuestos al Movimiento Nacional.

La reclusión de los prisioneros tomados a la República tuvo un carácter doble: a) ligado directamente a hechos bélicos, y b) la que se origina por la personalidad política del vencido. En el primer caso los centros fueron exclusivamente transitorios, campos de concentración ,después eran sometidos a un proceso de clasificación y en el segundo caso la reclusión permanente en prisiones y penales. La clasificación llevaba a los soldados a centros de reclusión permanente (prisiones o batallones de trabajadores), o eran liberaban mediante avales, los campos de concentración se fueron cerrando con la habilitación de edificios civiles y militares como prisiones.

G. di Febo argumenta que la represión política postbélica fue condicionada, especialmente tras la victoria aliada en la 2ªGuerra Mundial, por la Europa y los EE.UU. que no compartían el uso indiscriminado que hacía su "España anticomunista" de los fusilamientos en masa. Hicieron entonces uso de otras formas represivas: tortura, adiestramiento de secciones antiguerrilla, grandes detenciones, bajo la presión de la opinión pública internacional las ejecuciones proliferaron menos y a menudo las penas de muerte eran conmutadas por cadena perpetua o penas de 20 ó 30 años. Las condenas oficiales eran apoyadas, en los años de la guerra fría, por los primeros créditos de los EE.UU.


vuelve al Índice