Un programa de contenido social y abierto a Europa.- José Comas.



"Abrir la opción a una futura entrada en la OTAN; autorización para la radio y televisión privadas en todo el territorio; acabar con el reparto proporcional de los cargos y puestos públicos, según el carné de partido; trabajos sociales obligatorios para los parados de larga duración; indemnización a los trabajadores forzados durante el nazismo y la integración de los extranjeros residentes ahora en Austria, antes que incrementar la emigración. Éstos son algunos de los puntos del programa de Gobierno que presentaron ayer en Viena los jefes de los dos partidos de la coalición, el democristiano ministro de Asuntos Exteriores en funciones, Wolfgang Schüssel (ÖVP), y el populista de derechas Jörg Haider (FPÖ).


En 121 páginas, el Partido Liberal (FPÖ) y el Popular (ÖVP) han condensado un programa de gobierno que lleva como título Futuro en el corazón de Europa. Gobernar de nuevo Austria. Además del preámbulo, elaborado por el presidente federal Thomas Klestil y que firmaron Haider y Schüssel, el programa de Gobierno consta de 15 capítulos. Afronta el programa el sacrificio de algunas de las vacas sagradas de la política austriaca. En una cuestión muy sensible, como la neutralidad, la nueva coalición afirma que Austria desarrollará las relaciones con la OTAN "como lo exige su seguridad y la participación con igualdad de derechos en la arquitectura europea de defensa. Se abre la opción de un posterior ingreso". Para romper este tabú, la coalición advierte de que "se esforzará en conseguir un amplio consenso nacional".

Otro de los tabúes que toca el programa es la autorización para extender a todo el territorio nacional la posibilidad de la radio y televisión privadas, que hasta hoy día controla en régimen de casi monopolio la pública ORF. El capítulo Una democracia fuerte introduce el concepto de "un nuevo patriotismo". Añade la reparación de los daños de guerra sufridos por los trabajadores forzados por los nazis, también para los prisioneros de guerra y ciudadanos de habla alemana deportados a Austria desde el este de Europa.

Al capítulo Una democracia fuerte se añade un anexo que lleva el título de 'Carta para una selección objetiva del personal en el terreno escolar'. Éste es uno de los caballos de batalla de Haider, que se jacta de haber nombrado, por primera vez en décadas, a un delegado de Educación en Carintia que no tenía el carné de ningún partido político. La carta proclama la intención de repartir los puestos en la administración escolar con arreglo a criterios de profesionalidad y no de proporcionalidad, según la filiación política. Para los parados de larga duración el programa les reserva la obligación de trabajar en tareas sociales, de defensa del medio ambiente y restauración de monumentos".


  • EL PAÍS. 4 de febrero de 2000.