Modelo de
Adler.
Según Adler, los derechos
sociales tienen distintos niveles de desarrollo según sea su:
- Penetración
estatal (cuánta gestión y cuánto financiamiento corre a cargo del
Estado).
- Extensión (número y amplitud de las personas asistidas).
- Nivel de generosidad (cuánto dinero, por cuánto tiempo
y quá calidad de los servicios).
- Severidad del control para
obtener y conservar las prestaciones.
- Tipo de riesgos considerados.
- Grado de redistribución entre las categorías favorecidas y desfavorecidas.
A partir de estas características, Adler elabora una tipología del Estado
del Bienestar que distingue tres fases sucesivas de desarrollo:
- Primera
fase: Caracterizada por el desarrollo de sistemas voluntarios subvencionados:
el estado ni gestiona ni controla, los individuos pagan sus contribuciones y las
prestaciones se devuelven a los que pagan. Es un sistema que fomenta las desigualdades
sociales.
- Segunda fase: El sistema es obligatorio: crece
la subvención y con ella el control del estado aumentando el número de personas
protegidas. El efecto igualitario es mayor que en el sistema precedente aunque
se perpetúan las diferencias porque las prestaciones van ligadas al estatus del
trabajador (el que más gana recibe pensiones mayores, etc.).
- Tercera
fase: Se caracteriza por el desarrollo de seguros nacionales: la financiación
se establece a través de la fiscalidad; en principio las prestaciones son iguales
para todos, y tienden a garantizar un mínimo vital. Tiene un efecto redistributivo
igualitario.