Nueva campaña oceanográfica para cartografiar la huella geológica del terremoto de Aysén en el fondo marino

El 21 de abril de 2007, un terremoto de magnitud 6,2 en la escala abierta de Richter provocó tsunamis que causaron víctimas mortales y daños importantes en infraestructuras de la industria de la cría de salmones en las costas chilenas. Identificar y cartografiar la huella geológica de los deslizamientos submarinos causados por esta crisis sísmica en la zona del fiordo de Aysén (Chile) es el objetivo principal de la campaña oceanográfico DETSUFA, que lleva a cabo el Grupo de Investigación Consolidado (GRC) Geociencias Marinas de la UB del 4 y 17 de marzo a bordo del buque oceanográfico BIO Hespérides.

El 21 de abril de 2007, un terremoto de magnitud 6,2 en la escala abierta de Richter provocó tsunamis que causaron víctimas mortales y daños importantes en infraestructuras de la industria de la cría de salmones en las costas chilenas. Identificar y cartografiar la huella geológica de los deslizamientos submarinos causados por esta crisis sísmica en la zona del fiordo de Aysén (Chile) es el objetivo principal de la campaña oceanográfico DETSUFA, que lleva a cabo el Grupo de Investigación Consolidado (GRC) Geociencias Marinas de la UB del 4 y 17 de marzo a bordo del buque oceanográfico BIO Hespérides.
«Estos deslizamientos, iniciados en las paredes del fiordo, provocaron unas cicatrices geológicas que son visibles aun hoy en día. El estudio de estos deslizamientos, y de otros todavía más antiguos que puedan ser identificados, permitirá interpretar su dinámica, caracterizar su peligrosidad y modelizar la propagación de la onda destructiva», explica el profesor Galderic Lastras, del Departamento de Estratigrafía, Paleontología y Geociencias Marinas de la UB, que es miembro del GRC Geociencias Marinas y director de esta campaña oceanográfica.