El laboratorio de mecánica de suelos y geotermia se sitúa en el ICM-CSIC. Se compone de un marco de carga GDS de 50 kN totalmente automatizado que se utiliza para determinar la resistencia a la cizalla triaxial, así como para efectuar experimentos de consolidación a velocidad de deformación controlada que permiten una presión de confinamiento máxima de 22 MPa. Una célula de consolidación de Rowe & Barden permite la determinación de las características de compresibilidad/permeabilidad de sedimentos de grano fino a presiones de confinamiento de hasta 2 MPa.
El laboratorio también está equipado con un medidor de conductividad térmica Teka Berlin TK04 y 6 registradores de datos de temperatura miniaturizados Antares para estudios geotérmicos en sedimentos de grano fino.