La investigación realizada hasta ahora por el grupo PLURAL se ha articulado en tres ámbitos. En primer lugar, la didáctica de las lenguas entendida como un espacio donde confluyen tres focos necesarios para la investigación de la enseñanza y el aprendizaje de las lenguas: el aprendiz, el que enseña y el objeto que tiene que ser aprendido, la lengua. En esta línea, nos preguntamos sobre el trato que tienen que recibir las lenguas presentes en la escuelas, estén o no contempladas en el currículo, la formulación de los contenidos que tienen que ser enseñados en la escuela y el modo de lograr que sean realmente aprendidos por los alumnos.
El segundo ámbito es el de la formación del profesorado, tanto inicial como permanente. Ha sido y es uno de los intereses del grupo: aportar soluciones para preparar mejor a los docentes de las escuelas de nuestro país, encontrando las maneras más adecuadas para que puedan hacer suyas las teorías más actuales en didáctica de las lenguas y puedan conocer las prácticas de calidad que tienen lugar tanto en nuestro entorno como a nivel internacional.
Finalmente, debemos referirnos a la investigación y, de una manera específica, a las metodologías de investigación. La didáctica de la lengua es una disciplina de conocimiento, pero también de intervención, lo que la hace especial a la hora de diseñar la investigación. La finalidad de mejorar las prácticas es siempre un objetivo complementario en nuestros trabajos. El impacto que han tenido hasta ahora las investigaciones realizadas en cada uno de estos ámbitos queda en evidencia en el currículo PLURAL.
Los marcos teóricos de referencia de la investigación de este grupo se sitúan en los siguientes paradigmas: la psicología sociocultural, que entiende el aprendizaje como un proceso social en el marco de un contexto cultural (Wertsch, 1991); la Teoría de la Actividad, que concibe el lenguaje como el resultado de una actividad orientada a una finalidad (Luria, 1980; Engeström, 1999); el análisis de la interacción, a través del cual se desarrollan los procesos de aprendizaje (Kerbrat-Orecchioni, 1992); la etnografía como instrumento para dar cuenta de los agentes y sus acciones en contextos culturales determinados (Cambra, 2003); y el estudio de las creencias como un punto de referencia para los estudios sobre la formación del profesorado (Woods, 2003; Kalaja, 2003). Camps (2000) y Camps & Milian (2007, 2008) articulan estos marcos para elaborar una propuesta para la investigación en didáctica de las lenguas.