En el banco de un parque de Ciudadela es encontrado el cadáver de un mendigo. A primera vista, parece un crimen cometido por una banda de skins. Intentando aclarar los hechos, Delicado y Garzón, con la valiosa ayuda de Yolanda –una joven guardia urbana– se sumergen en la vida de los que viven al margen de la sociedad, recorriendo comedores de caridad, albergues y descampados en busca de pistas que puedan explicar el asesinato. La investigación los llevará las fundaciones de caridad, opacas fiscalmente, que bajo su paraguas ocultan actividades turbias y movimientos contables ilegales.
En segundo plano tenemos la turbulenta relación sentimental de Petra con el doctor Ricard Crespo, un psiquiatra que casi desde principio le propone que vivan juntos, y la situación familiar de Garzón, que recibe visita de su hijo y de su pareja sentimental, Alfred.
GIMÉNEZ BARTLETT, Alicia (2004). Un barco cargado de arroz. Barcelona: Planeta, 2006, ISBN: 978-84-08-06645-3.
Novela
Petra Delicado recurre a la violencia durante un interrogatorio, golpeando en la cara y amenazando con la pistola a un skin, Matías Sanpedro. El sospechoso había querido hablar con el superior del subinspector Garzón y, al enterarse de que era una mujer, hace un comentario irónico al respeto, lo cual enfurece a Delicado. Gracias a estos métodos, la inspectora consigue datos relevantes para la investigación.
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Los responsables de la muerte de Tomás “El Sabio” y de Anselmo son Arcadio Flores Aragón, un timador y Adolfo Ayguals Escudero, un próspero empresario textil. Después de que el hijo de Adolfo Ayguals, Juan, arruinara la empresa con su incompetente gestión, Adolfo creó la fundación Igualdad y Paz, supuestamente para ejercer una labor filantrópica, cuya acción ayudara a gente pobre y marginada (en realidad, lo hizo para salvar su empresa y no perder clientes). Arcadio Flores se convirtió en su director técnico para llevar a cabo unas acciones benéficas que no se producían en realidad. Flores se montó una organización paralela basada en el timo, empleando al mendigo Tomas “el Sabio” como su contable. Cuando este último se rebela y pretende hablar con la policía, Flores contrata con dinero de Ayguals a un par de matones, inmigrantes ilegales del Este, para matarlo. Luego manda a matar también a Anselmo, por el miedo de que hable sobre la muerte de Tomás. Ayguals asesina a Flores –como lo explica, en parte por tener mala consciencia, en parte por proteger la empresa– e intenta inculpar a su hijo, poniendo su pelo en el lugar de crimen. Su motivación principal fue no querer dejar la empresa en manos de su hijo– “eso significaría su lenta decadencia, la bancarrota, el descrédito”. Varía el testamento, disponiendo que la empresa se ponga en venta y que los beneficios se dediquen a obras benéficas. Finalmente, antes de ser arrestado, se pega un tiro en la boca.