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F.
NAVARRO COMA, «La correspondencia de Agustín durante su estancia en Casiciaco. Una reconstrucción», Augustinus
45 (2000), pp. 191-213. |
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
DURANTE SU ESTANCIA EN CASICIACO.
UNA RECONSTRUCCION*
En otoño del 386 Agustín, huyendo del cansancio de su
trabajo y por
motivos de salud1, se retiró a
una casa de campo que le había cedido
Verecundo, un amigo suyo milanés2.
La casa estaba situada en Casiciaco3,
cerca de Milán4. Allá se
retirará, siguiendo la costumbre aristocrática del
otium honestum5, con un reducido grupo de personas,
formado por su
* Este
estudio ha sido realizado gracias a la concesión de una "Beca para la
Formación
en la Investigación y la Docencia, de la Universidad de Barcelona", y a
los proyectos de inves-
tigación PS94-0242 y PB97-0891 del Ministerio de
Educación y Cultura dirigidos por J. Vile-
lla. Asimismo, se enmarca dentro del "Grup de Recerques en Antiguitat
Tardana, Grup de
Recerca de Qualitat de la Generalitat de Catalunya
(1997-00357)".
1 "Ese verano mi
pulmón había comenzado a ceder ante el exagerado trabajo escolar"
Conf. 9, 4. *N. de la Redac.: José Anoz ha traducido al español los textos agustinianos, cuyo
original latino puede leerse en Obras de san Agustín. Edición bilingüe
1-40, Madrid; en este
caso vol. 2, Madrid 1979, 350. "Si un dolor de pecho no me hubiese forzado
a renunciar a una
profesión ventosa y a refugiarme en el regazo de la filosofía" C.
acad. 1, 3: Obras...3, Madrid
1982, 74.
2 Sobre Verecundo
véase McNAMARA, M. A.: Friendship
in saint Augustine, Fribourg
1958, 77-78; JONES, A.H.M., MARTINDALE, J.R., MORRIS, J.: "Verecundus 2", en PLRE I, 950.
3 Tradicionalmente se
cree que el lugar a donde se retira Agustín es Cassicacum,
lectura
que adoptaron los Maurinos. Con todo, hay ocho
manuscritos italianos, de excelente calidad,
que recogen el nombre de Cassiago, que parece ser,
según Lejard, el verdadero nombre de la
finca; cf. LEJARD, F.: "El tema de la felicidad en los diálogos de san Agustín",en AVGVS-
TINVS 20 (1975) 29-81, en concreto, p. 29.
4 Perler
habla ampliamente de la discutida ubicación de Casiciaco,
y finalmente se
inclina por situar la villa de Verecundo en la actual Cassago,
a unos treinta y cinco kilómetros
al noroeste de Milán; cf. PERLER, O.: Les voyages
de saint Augustin, Paris
1969, 192-196.
5 Cf. TROUT, D. E.:
"Augustine at Cassiciacum: otium
honestum and the social dimen-
sion of conversion", en Vigiliae Christianae, 42 (1988) 132-146, en
concreto, p. 141.
192 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
madre Mónica, su hijo Adeodato,
su amigo Alipio, su hermano Navigio,
sus compatriotas y discípulos Trigecio y Licencio, y
sus primos Lastidiano
y Rústico.
En la villa de Verecundo, en un atmósfera digna de la
Academia de
Platón, en largas conversaciones filosóficas y meditaciones solitarias, Agus-
tín reflexionará profundamente sobre las cuestiones
que más le preocupa-
ban en aquellos momentos: la naturaleza de la
felicidad (De beata uita), la
teoría escéptica del conocimiento (Contra Academicos),
la afirmación de que
una providencia particular o personal es posible dentro del cuadro del
orden coherente del universo y de la cadena de causas y efectos (De ordine)
y la inmortalidad del alma (Soliloquia)6. De esta manera Agustín
podrá
por fin satisfacer sus ansias de llevar a cabo una vida ociosa de retiro7 y
estudio8: alcanzará, por un lado, la
confluencia del ideal neoplatónico de
retiro intelectual y ocioso, frustrado poco tiempo antes9, y por otro, el ide-
al monacal cristiano conocido gracias a Ponticiano10. Vemos así cómo
6 Cf.
CHADWICK, H.: Augustin, Paris 1987, 54-55.
7 "Ocioso yo, en
esta finca rústica pensaba largo tiempo..." C. acad. 3, 34: Obras...
3, 175.
8 Marrou
califica este periodo en Casiciaco como el periodo
filosófico de Agustín, por
que en él dedica la mayor parte de su actividad intelectual al estudio
de grandes problemas
metafísicos; cf. MARROU, H.I.: Saint Augustin et
la fin de la culture antique, Paris 1958, 167.
9 Antes de retirarse
a Casiciaco, Agustín intentará formar una comunidad profun-
damente neoplatónica en la cual todos sus miembros
llevarían una vida ociosa y retirada.
Sería un grupo de unos diez amigos, entre los cuales estaba Romaniano,
que pondrían
todos sus bienes en común: "Como nos pareciese que en idéntica sociedad
podría haber casi
diez hombres y entre nosotros hubiese riquísimos, sobre todo Romaniano, mi paisano,
muchos amigos habíamos reflexionado sobre vivir ociosamente, alejados de las
turbas, y tras
conversar y detestar las turbulentas molestias de la vida humana ya casi lo
habíamos hecho
firme, emprendiendo este ocio de forma que, si pudiéramos tener algo, lo
pondríamos a dis-
posición de todos, y de todas las posesiones familiares formaríamos una sola,
para que
mediante la sinceridad de la amistad no fuese de uno esto y de otro aquello,
sino que de
todo se hiciese una realidad única, todo entero fuese de cada uno y todo de
todos" Conf. 6,
24: Obras...2, 256. Dos de ellos se encargarían anualmente de los
aspectos de organización
y dirección de la comunidad buscando así lograr que el resto se pudiera dedicar
exclusiva-
mente al ocio: "Nos plugo que, a modo de magistrados, dos por año,
procurasen a los
demás, tranquilos, todo lo necesario" Ibíd. El proyeco
fracasó porque algunos de ellos esta-
ban casados y otros, como Agustín, tenían proyectos
de matrimonio: "Pero, después que
hubo comenzado a pensarse si lo permitirían las mujercitas, que algunos de
nosotros ya tení-
an y yo quería tener, todo ese acuerdo que formábamos
bien reventó en las manos, se rom-
pió y fue abandonado" Ibíd. Vemos aquí a
un Agustín muy influido por la lectura de libros
neoplatónicos, a través de los cuales sabía que, a mediados del s. III, Plotino pensaba fun-
dar una Platonópolis en la Campania; cf. COURCELLE,
P.: Recherches sur les Confessions
de
saint Augustin, París
1968, 178-181.
10 El ideal de otium de Agustín toma un gran impulso cuando conoce
el ideal ascé-
tico cristiano, en concreto, el ideal anacoreta y solitario. Esto pasa cuando
descubre, junto
con Alipio, la vida de Antonio a través de un alto funcionario imperial, Ponticiano, que visi-
ta a los dos tagastinos y
les habla de Antonio y sus grupos de monjes y monasterios: "Cier-
to día...nos vino a casa a mí y a Alipio cierto Ponticiano,
paisano nuestro en cuanto
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 193
Agustín renuncia a los placeres, riquezas y honores denunciados en el Hor-
tensius de Cicerón y se retira a Casiciaco para vivir el otium
philosophandi
que más tarde calificará de otium christianae uitae11.
Las reflexiones de Agustín en Casiciaco
las encontraremos condensadas
en las obras12
y cartas, muchas de éstas perdidas, que surgirán de
estos
momentos. Esta producción literaria servirá para difundir su ideal cristiano
y para mantener los lazos con la alta aristocracia italiana. Así, desde Casi-
ciaco, Agustín se carteará con el círculo de amigos
influyentes con los que
contactó en Milán13
y les enviará copias de sus obras14. La corresponden-
cia era fluida, puesto que la distancia entre Casiciaco y Milán no era muy
grande y se podía recorrer en uno o dos días como mucho15. Además
africano,
quien brillantemente desempeñaba una función en palacio... Surgió un discurso
en que él narró sobre Antonio, el monje egipcio... De ahí su discurso cayó en
las multitu-
des de los monasterios" Conf. 8, 14.15: Obras... 2,
324.325. Ponticiano también les mues-
tra el ideal cenobítico cuando les habla de los
monasterios dirigidos por Ambrosio que había
extramuros de Milán: "También en Milán, extramuros de la ciudad, había un monasterio
lle-
no de hermanos buenos, bajo los cuidados de Ambrosio, y no lo conocíamos" Ibíd.
8, 15:
Obras... 2, 325. Cuando Agustín conoce la vida monástica, su ideal de
vida ociosa, retirada
y ascética toma un nuevo rumbo. Ahora querrá llevarlo a término dentro del
cristianismo,
y esto le conducirá a la conversión al catolicismo en verano del 386. En el
retiro de Casicia-
co, hecho poco después de la conversión, veremos una
conjunción del ideal neoplatónico
con el ideal monacal cenobítico -de esto habla en los Diálogos- y anacoreta; a
esto se
refieren los Soliloquios
11 Agustín, ya muy
viejo, calificará de otium christianae
uitae la vida de Casiciaco:
"Como... me hubiese yo consagrado al ocio de la vida cristiana..."
Retr. 1,1,1: Obras...
40,
Madrid 1995, 646. A veces se ha pretendido ver en Casiciaco
la fundación de un monasterio.
Pero el movimiento ascético que se extiende a lo largo del s. IV por todo el
Imperio Romano
y la evolución personal de Agustín nos llevan a pensar que Casiciaco
es eminentemente "un
monastère de philosophes où l'accent est
mis sur le travail intellectuel"
MARROU, H. I.: Saint
Augustin..., 167. El año 386 Agustín está mucho
más cerca de los filósofos que del Evangelio;
cf. LEJARD, F.: "El tema..." 34; también MADEC, G.: Saint Augustin et la philosophie.
Notes cri-
tiques, Paris 1996, 45-52.
12 "...qué hacía yo allí respecto
a las letras, servidoras tuyas ya, sí" Conf. 9, 7: Obras...
2, 354. Las obras escritas son los tres diálogos -Contra Academicos,
De ordine y el De beata
uita- y los Soliloquia, un
"diálogo" con Dios. Agustín usa el diálogo, porque éste le ofrece la
ocasión de mostrar sus cualidades literarias y oratorias. Además, mediante el
diálogo, Agustín
encuentra en el monólogo de un discurso cuidadosamente preparado la ocasión de
lucirse en
pasajes de brillantez, que los aplausos de sus interlocutores recibirán con
alborozo; cf. OROZ
RETA, J.: "El lenguaje en los primeros escritos de san Agustín", en Plotino, Porfirio, san Agus-
tín, Salamanca 1989, 111-124, en concreto, p.
114. Pero el uso del diálogo viene sobre todo
motivado por el hecho de que éste permite a Agustín afrontar dificultades que
aún no ha supe-
rado; cf. CHADWICK, H.: Augustin
54.
13 Cf. BROWN, P.: Biografía
de Agustín de Hipona, Madrid 1970, 113.
14 Así lo veremos en
el caso de Hermogeniano, Zenobio,
Romaniano, Teodoro, Fir-
mino y muchos otros de los que no nos ha llegado noticia (cf. infra, n.
42). Los diálogos son
una prueba del interés que tenía Agustín por mantener su reputación entre sus
amigos y
patronos de Milán; cf. TROUT, D. E. :
"Augustine..." 141.
15 Sobre la duración
del viaje entre Casiciaco y Milán véase PERLER, O.: Les
voyages...
179.188-192.
194 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
había facilidad para enviar las cartas, puesto que
algunos miembros del
grupo realizaban viajes a Milán16 y el grupo tenía a su
servicio colonos que
podían servir de portadores17.
En nuestro estudio pretendemos estudiar con profundidad
las car-
tas escritas y recibidas por Agustín durante su estancia en Casiciaco,
incluyendo las perdidas y conservadas. Asimismo estudiaremos con pro-
fundidad la cronología de cada una de ellas. En
primer lugar es preciso
fijar la cronología del viaje de Agustín, tanto de ida como de vuelta, a la
villa de Verecundo. A tal efecto somos deudores del excelente trabajo de
Perler.
Respecto al viaje a Casiciaco
desde Milán, nuestra principal refe-
rencia es un pasaje de las Confessiones
que dice: "Pasadas las fiestas de
la vendimia, hice saber a los milaneses que procurasen a sus escolares
otro vendedor de palabras"18. Poco después Agustín parte
para Casi-
ciaco. Las fiestas de la vendimia se hacen entre el
23 de agosto y el 15 de
octubre19; por tanto, Agustín se
retiró a la villa de Verecundo después
del 15 de octubre y llegó con toda seguridad antes del 10 de noviembre
del 386, fecha de inicio del Contra Academicos.
Intentaremos precisar el
calendario un poco más, pero es necesario a tal efecto tener en cuenta
dos aspectos: en primer lugar la aceptación de la relativa historicidad de
los diálogos20;
en segundo lugar, el hecho de que Agustín diga que al
16 Durante
el desarrollo del Contra academicos Alipio
hizo un viaje a una ciudad, que
ha de ser por fuerza Milán: "Aquí dijo Alipio: "Sin el menor temor me
considero juez de esta
cuestión pues, por haberme decidido a viajar a la ciudad, conviene que se me
releve de la car-
ga de tomar algún partido" C. Acad. 1, 5: Obras..., 3, 76.
17 Agustín se
encontraba en una villa rural cultivada por colonos bajo sus órdenes. En
el Contra Academicos vemos cómo, a pesar de la
vida ociosa, periódicamente se dedicaba un
cierto tiempo a la gestión de la villa y las tierras: "Habíamos comenzado
a disputar cuando ya
el sol declinaba al ocaso, y el día se había pasado casi entero tanto en
ordenar los asuntos rús-
ticos cuanto en la recensión del libro primero de Virgilio". "Al día
siguiente, si bien el tiem-
po había amanecido no menos templado y tranquilo,
apenas nos dedicamos a quehaceres
domésticos". "Respecto a la administración familiar hubo tanto que
hacer necesariamente,
que, ocupados totalmente en ello, apenas pudimos tener un momento de respiro en
favor de
nosotros mismos las dos últimas horas del día" C. acad.
1, 15; 2, 25; 3, 2: Obras...
3,
90.128.136. Era habitual
que los colonos de los latifundios hiciesen de portadores de las
car-
tas; cf. GORCE, D.: Les voyages, l'hospitalité et le port des lettres
dans le monde chrétien des IVe
et Ve siècles, Paris 1925, 225.
18 Conf. 9, 13: Obras...
2, 360.
19 "Y, aunque la
ley otorgue cuatro meses para recoger los frutos, creemos que, según
la cualidad de las provincias y la presencia de los dueños, ha de actuarse de
forma que desde
el 24 de junio hasta el 25 de julio se concedan días de siega, y desde el 25 de
julio al 23 de agos-
to se dé licencia para juzgar asuntos. En cambio, desde el 23 de agosto hasta
el 15 de octubre
concédanse fiestas de la vendimia. También excluimos de oír asuntos o exigir
deudas los
domingos, que son días no laborables" C. Th. 2,8,19, (389), p. 88, ll. 11-16. *Trad. de J.A.
20 Sobre la
historicidad de los diálogos véase infra.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 195
empezar el Contra Academicos
ya llevaban unos días en la villa rural21.
Dado que los diálogos empiezan el 10 de noviembre22, creemos que el
viaje a Casiciaco fue realizado durante la segunda
quincena de octubre
del 386.
Referente a la fecha de retorno a Milán nuestra mejor
referencia vuel-
ven a ser las Confessiones cuando se
dice: "Cuando llegó el tiempo en que
convenía que yo diese mi nombre, regresamos a Milán, dejada la finca
rústica"23.
Según el testimonio de Ambrosio, este tiempo empieza el 6 de
enero24, y, a continuación, al
inicio de la Cuaresma, se hace el examen de
los candidatos al bautismo. Como en el 387 la fiesta de Pascua caía el 25
de abril, el primer domingo de Cuaresma fue el 14 de marzo. Por tanto,
el viaje a Milán fue entre el 6 de enero y el 14 de marzo del 38725. Pero,
como señala Perler, hay algunos indicios que nos
llevan a pensar que el
viaje se produjo más bien en enero o febrero. En primer lugar está el tes-
timonio de las Confessiones
cuando dicen que Alipio hizo el viaje a Milán
descalzo sobre el helado suelo italiano26; en segundo lugar, el hecho
de
que a Ambrosio le hubiera desagradado que Agustín se apuntase muy
tarde para recibir el bautismo; en tercer lugar, la evidencia de que la
redacción del De immortalitate animae
y los libros sobre las artes libera-
les presuponen un cierto tiempo27. Nosotros tendemos a pensar
que el
retorno a Milán fue más bien en febrero que en enero. De no ser así, la
redacción de los Soliloquia, hecha en enero del 38728, y la difusión que
Agustín pretende hacer de la obra desde la villa de Verecundo quedan
21 "Pasados,
pues, poquísimos días después que comenzamos a vivir en el cam-
po..." C. acad.
1, 4: Obras...3: 75. A pesar de todo, Perler
señala aquí la dificultad de acep-
tar sin discusión esta afirmación puesto que él
descubre la aparición de una serie de
inexactitudes a la hora de señalar los intervalos de tiempo en las Confessiones; cf. PERLER,
O.: Les voyages... 138 n. 1.
22 Cf. OHLMANN, D.: De
S. Augustini Dialogis
in Casiciaco scriptis, Argentotari 1897,
27; ZARB S. M. : "Chronologia
operum sancti Augustini", en Angelicum
10 (1933) 386 cree que
el diálogo empieza el 31 de octubre. PERLER: Ibíd. 189 propone de nuevo
el 10 de noviembre,
concretamente por la tarde. Para la fijación de los días en que se realizaron
los tres diálogos,
seguimos el excelente estudio de este autor, quien en Ibíd. 189 n. 9
proporciona unos argu-
mentos contundentes a partir del análisis de las
fases lunares. Sobre la historicidad de los diá-
logos véase infra.
23 Conf. 9,
14: Obras... 2, 360-362.
24 PERLER, O.: Ibíd...,
142 nn. 2-3.
25 ID.: Ibíd.
142. Sobre el bautismo y las ceremonias que de él se derivaban en la Anti-
güedad Tardía véase GAUDEMET, J.: L'Église
dans l'Empire Romain (IVe-Ve siècles), Paris
1958, 56-69.
26 "También
plugo renacer en ti conmigo a Alipio, vestido ya de la humildad congrua
con tus sacramentos, y domador fortísimo del cuerpo incluso para con insólita
osadía pisote-
ar con desnudo pie el glacial suelo itálico"
Conf. 9, 14: Obras...3, 360-361.
27 PERLER, O.: Ibíd...,
p. 142.
28 Véase infra,
n. 126.
196 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
demasiado comprimida en el tiempo29. Además, veremos más
adelante
como el tagastino espera respuesta a cartas fechadas
en enero del 38730.
Finalmente cabe recordar que Agustín había esperado desde mucho
antes retirarse un tiempo, y lo más normal es pensar que querría alargar-
lo al máximo31.
Una vez establecidos los marcos cronológicos de la
estancia de Agus-
tín en Casiciaco, entramos
ahora a estudiar la correspondencia propia-
mente dicha, o sea, las cartas escritas y recibidas por el tagastino
durante
su estancia en la villa de Verecundo. Tenemos documentadas un total de
nueve cartas de las cuales siete fueron escritas con toda seguridad y dos
muy probablemente. De ellas sólo han sobrevivido hasta hoy tres32.
También tenemos documentados dos conjuntos de cartas perdidas de
número indefinido: el primero es un conjunto de cartas recibidas y con-
testadas durante el desarrollo del Contra Academicos;
el segundo es,
a parte de las documentadas, un número indeterminado de cartas inter-
cambiadas con Nebridio.
En la villa de Casiciaco
observamos cómo a menudo el intercambio
epistolar es una consecuencia del envío de copias de los Diálogos a dife-
rentes amigos que responden entonces con una carta, contestada después
por Agustín. Este esquema se repite en las tres cartas que nos han llega-
do, y es de suponer que también lo encontraremos en la carta perdida de
Firmino. Sin embargo, muy seguramente no lo encontraremos
en algunas
de las cartas de Nebridio y tampoco en el primer
conjunto de cartas per-
didas. Esto viene motivado por el hecho de que son
escritas durante el
desarrollo de los diálogos33.
Vemos así cómo, a pesar del retiro, en nin-
gún momento Agustín dejará de estar en contacto con
su círculo de
amistades.
El ciclo literario-epistolar de Casiciaco
lo podemos sintetizar en el
siguiente cuadro, que a continuación analizaremos detalladamente:
29 Junto
con la Ep. 3 Agustín envía los Soliloquios
a Nebridio. Véase infra, n. 124.
30 Véase infra.
31 Véase supra nn. 7-11.
32 Sobre la transmisión de las cartas de Agustín y sus problemas véase GOLDBACHER,
A.: Praefatio, en CSEL 58; DE BRUYNE,
D.: "Note sur les lettres de saint Augustin", en Revue
d'Histoire Ecclésiastique 23 (1927) 523-530; "Les anciennes
collections et la chronologie des
lettres de saint Augustin", en Revue Bénédictine 43 (1931)
284-295; LIETZMANN, H.: "Zur
Entstehungsgeschichte der Briefsammlung
Augustins", en Sitzungsberichte
der Preussischen
Akademie der Wissenschaften
23 (1930) 356-388.
33 Véase infra.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 197
...Epístolas
perdidas I... |
Contra
Academicos |
Poema
de Zenobio |
De
ordine |
2a |
2... |
Contra
Academicos |
1a |
1 |
1b... |
Contra
Academicos |
3a |
Soliloquia |
3 |
3b... |
...Epístolas
perdidas II... |
...A... |
LEYENDA:
2a: carta perdida de Zenobio
a Agustín; 2: carta conservada de Agustín
a Zenobio (Ep. 2); 1a:
carta perdida de Hermogeniano a Agustín; 1:
carta
conservada de Agustín a Hermogeniano (Ep. 1); 1b: posible carta de Her-
mogeniano a Agustín; 3a: carta perdida de Nebridio a Agustín; 3: carta con-
servada de Agustín a Nebridio
(Ep. 3); 3b: posible carta de Nebridio a
Agustín; A: carta de Agustín a Firmino.
Antes de empezar a estudiar las cartas una por una hay
que hacer un
breve inciso sobre aspectos cronológicos de las mismas. Para determinar
cuándo fueron escritas nuestra principal fuente son los Diálogos escritos en
aquellos momentos. Pero el principal problema que se nos plantea es la his-
toricidad o no de los mismos. Esta cuestión ha
generado debate entre los
investigadores de Agustín, y para poder justificar las cronologías que pro-
pondremos es preciso que entremos en la discusión.
Por un lado hay quienes niegan la existencia de los
Diálogos. Afirman
que su estructura -prefacio, dedicatoria, autobiografía, discusiones y dis-
curso final-, su carácter exhortatorio, la puesta en escena, los topoi, el
papel de Agustín como maestro, la ocasión del De beata uita,
que es el
cumpleaños del tagastino, y la inverosimilitud de
algunos episodios los
colocan dentro de un género literario utilizado frecuentemente en la anti-
198 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
güedad por grandes
pensadores como Platón, Cicerón y Séneca34. Y en
efecto, como señala Courcelle, es innegable que los
diálogos son, tanto de
fondo como de contenido, esencialmente ciceronianos35. Por otro lado
hay quienes creen que los diálogos se produjeron tal como se han escrito.
Para ello se basan en que las obras presentan una serie de novedades tales
como un mayor realismo de la ambientación, unas reacciones más vivas de
los participantes, la presencia de los notarii
recogiendo las discusiones y la
preocupación de Agustín para que cada una de las afirmaciones quede bien
anotada36.
Sobre la cuestión, es preciso adoptar una posición
intermedia: cierta-
mente los diálogos son históricos, y entre los miembros del grupo de Casi-
ciaco se produjeron unos debates que fueron recogidos
por los notarii37.
Lo
que pasa es que poco después, Agustín, a partir de las anotaciones de los
estenógrafos, redacta de nuevo las discusiones convirtiéndolas en una
auténtica obra literaria en la línea de los diálogos platónicos y, sobre todo,
siguiendo el modelo de los diálogos que Cicerón escribió durante su retiro
en Tusculum38.
Esto nos lleva a poder aceptar los diálogos como referencia
cronológica para calendar las diferentes cartas escritas durante la estancia en
Casiciaco39.
Hecho el breve inciso, entramos ahora a estudiar las
cartas propiamen-
te dichas. Las iremos analizando, dentro de lo posible, por orden cronoló-
gico, o sea, siguiendo el cuadro expuesto
anteriormente.
34 LEJARD,
F.: "Estudio literario de los diálogos de Casiciaco",
en AVGVSTINVS 21
(1976) 371-381, en concreto pp. 371-372.
35 COURCELLE, P.: Recherches... 255. Los diálogos de Cicerón, que
fueron la prin-
cipal fuente de Agustín, tienen una importante raíz
socrática. Así lo vemos por ejemplo en
el De oratore donde hay reminiscencias del Fedón de Platón, tanto en el escenario físico
como en el anuncio de la próxima muerte del interlocutor principal. Pero
Cicerón también
usó como modelo a Aristóteles. Así, del estagirita tomó la realización de un
prefacio per-
sonal, el dar a la conversación un aire más flexible
y la configuración de amplios trozos del
diálogo en discursos de notable extensión, puestos en boca de diferentes
interlocutores; cf.
ALBRECH, M. V.: Historia de la literatura romana I, Barcelona 1997,
505-506. Esta doble
raíz, platónica y aristotélica en Cicerón, influirá mucho en la configuración
de los diálogos
agustinianos.
36 LEJARD, F.:
"Estudio...", 371-372. Para un examen de la cuestión de la discusión
véase MADEC, G.: "L'historicité des Dialogues
de Cassiciacum", en Revue
des Études Augusti-
niennes 32 (1986) 207-231, en concreto pp.
208-210.
37 "Así pues,
mediante el recurso a un secretario para que los aires no desvanecieran
nuestro trabajo, no he permitido que perezca nada" C. acad. 1, 4: Obras... 3, 75.
38 CHADWICK, H.: Augustin... 54.
39 Ésta es la
conclusión a que llegan LEJARD: "Estudio..." 372 y MADEC: "L'historici-
té..." 230-231, a los cuales seguimos.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 199
EPISTOLAS PERDIDAS I
En primer lugar hay un conjunto de cartas que fueron
traídas por Ali-
pio aprovechando un viaje a Milán40, del cual vuelve durante el
desarrollo
del Contra Academicos41. Las cartas llegaron el 22
de noviembre y fueron
respondidas al siguiente día por la mañana42, esto es, el 23 de noviembre43.
Desconocemos absolutamente los corresponsales, el número de cartas, el
tema de las mismas y su destino y origen.
LA CORRESPONDENCIA CON ZENOBIO
A Zenobio sólo lo conocemos
gracias a la Ep. 2 y al De ordine44. A
partir de la escasa documentación de que disponemos, vemos que for-
maba parte del círculo de amigos influyentes con los
cuales el tagastino
contactó en Milán. Esto lo sabemos por el hecho de que era amigo del
rico Romaniano45
y seguramente era también miembro del ordo senato-
40 Véase
supra, n. 16.
41 "Ahí tienes a
Alipio, cuya llegada ruego que pueda darnos vacaciones" C. acad. 2,
20: Obras... 3, 123.
42 "Al
día siguiente, si bien el tiempo había amanecido no menos templado y tranqui-
lo, apenas nos dedicamos a quehaceres domésticos, pues habíamos consumido gran
parte de
él, sobre todo en la escritura de cartas; y, como apenas quedasen dos horas,
salimos al prado"
Ibíd. 2, 25: Obras...3, 128.
43 OHLMANN, D.: De
S. Augustini... 27 cree que los días
fueron el 20 y 21 de noviem-
bre; ZARB, S. M.: "Chronologia..."
386 propone el 10 y 11 de noviembre.; PERLER, O.: Les
voyages... 190 piensa que fueron el 22 y 23 de
noviembre.
44 Sobre Zenobio
véase Mc NAMARA, M. A.: Friendship... 92;
"Zenobius", en la PLRE I,
1196, donde se identifica el Zenobio de la Ep. 2 y del De ordine con el que aparece
citado en
la Ep. 117 de Agustín como "magister memoriae" y hermano de Dióscoro:
"El hermano Zeno-
bio ha sido hecho Maestro de Memoria" Obras...
8, 843. A partir de esta identificación algu-
nos autores dicen que el corresponsal de Agustín era nativo de Grecia, como Dióscoro, y que
tenía su officina en la pars
Occidentis. La identificación de los dos Zenobio en una misma per-
sona es frágil y sin ningún argumento sólido. De ser
cierta, seguramente Dióscoro haría notar
de alguna manera a Agustín que su hermano es el mismo que conoció en Italia y
no lo nom-
braría de pasada, como hace.
45 "Como
estuviese presente, por familiaridad con tu padre o, más bien, con todos
nosotros, estaba muy preocupado no tanto de que mi cuidado atizase ciertas
chispas de tu
ingenio, en las que él diligentemente se fijaba, cuanto de que tu incuria no
las extinguiese"
De ord. 1, 20: Obras...1, 614; esto dice
Agustín a Licencio, hijo de Romaniano, acerca de
Zenobio. Sobre Romaniano,
patrón y benefactor de Agustín, véase McNAMARA,: Friends-
hip... 78-83; BROWN: Biografía... 22; DECRET, F.: L'Afrique manichéenne (IVe-Ve siècles).
Étude historique et doctrinale I, Paris 1978, 65-72. 373-374, se
centra sobre todo en los
aspectos de la vida de Romaniano relacionados con el
maniqueísmo; GABILLON, A.:
"Romanianus, alias Cornelius. Du nouveau sur le bienfaiteur et l'ami de saint
Augustin",
en Revue des Études Augustiniennes 24 (1978) 58-70; LEPELLEY, C.: Les
cités de l'Afrique
romaine au Bas-Empire. Notices d'histoire municipale, Paris
1981, II, 178-183, interesante
por el estudio que hace del papel público que juega Romaniano
en Africa; MANDOUZE, L.:
200
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
rius46.
Agustín lo admiraba mucho y lo tenía por un ideal de conducta y
Virtudes47. Lo veía destinado a
conseguir la sabiduría48
si entraba den-
tro del cristianismo49 y abandonaba un camino que
no era del agrado del
africano, probablemente una carrera civil, el matrimonio o ambos50.
De la correspondencia entre Zenobio
y Agustín tenemos documentadas
con toda seguridad dos cartas: una, perdida y que denomino 2a, y
otra, la Ep. 2, conservada.
Carta 2a
El tono de toda la Ep.
2 es el de una respuesta a una carta, perdida, que
no ha gustado demasiado a Agustín51. En la misiva Zenobio le dice al tagas-
tino que no se preocupe por su ausencia corporal ya que no es
real y él con-
tinúa verdadero y simple en su mente52. Entonces Zenobio se burla de los
que están atados por los lazos corporales53.
"Romanianus", en PCBE I, 994-997. Cf. NAVARRO
COMA, F.: "Romaniano y Agustín. Amis-
tad entre un curial rico y un curial pobre", en Polis
10 (1998) 247-267.
46 "Apresúrense
a perfeccionarse o antes de la edad senatoria o, por lo menos, en la
juventud" De ord. 2, 25: Obras... 1, 660.
Al estar la obra dirigida a Zenobio, esta referencia segu-
ramente va por él.
47 "Me son
conocidos tu ingenio y tu ánimo, el cual sin la inmoderación y sordideces
de la libido ama la omnímoda hermosura" Ibíd. 1, 4: Obras...1,
597-598. Según McNAMARA,
M.A.: Friendship...93, Zenobio
era uno de los más celosos discípulos de Agustín en el estu-
dio de la filosofía moral.
48 "Por derecho
divino este signo de la sabiduría que habrá en ti prescribe a dos dese-
os perniciosos, que engañado por placeres falsos no abandones tu causa,
prevaricación ésta
más torpe y peligroso que la cual nada puede encontrarse" De ord. 1, 4; Obras... 1, 598.
49 "Lograrás,
pues, esto, créeme, cuando te consagres a la erudición que purga y cul-
tiva el ánimo, antes en manera alguna idóneo para que
se le confíen las semillas divinas.
Cómo es todo esto y qué orden exige, o qué promete la razón a los estudiosos y
buenos, qué
vida vivimos tus carísimos y qué fruto cogemos del ocio liberal te lo enseñarán
suficiente-
mente, como opino, estos libros, más dulces para mí por tu nombre que por mi
elaboración,
sobre todo si, tras elegir lo mejor, quisieras insertarte en este orden sobre
el que te escribo, y
adaptarte a él" Ibíd.
50 Véase supra,
n. 46.
51 Véase infra,
n. 64.
52 "Siendo esto
así y, aunque en sí misma (mi) mente te vea verdadero y simple, cual
puedes ser amado sin angustia alguna..." Ep.
2: Obras... 8, 34. Por eso Agustín ironiza
diciéndole que, si consigue no sufrir por la ausencia del amigo, es sin duda
"grande y dife-
rente" (véase infra, n. 53). Zenobio usa
en contra del propio tagastino los argumentos plan-
teados por Agustín mismo en el De ordine. Así,
a partir de ellos le justifica su ausencia. Por eso
Agustín, víctima de sus propios planteamientos, le ha de decir que él aún no es
"grande y dife-
rente" y necesita de la presencia física de los amigos: "Yo
ciertamente, mientras deseo al
ausente, quiero que me desee" Ibíd.: Obras... 8, 35. Véase infra,
nn. 54. 64.
53 "Si eres de
ánimo tan potente que puedes reconocer esta trampa y reírte de quienes
ella captura, en verdad eres grande y diferente" Ibíd.: Obras...
8, 34-35.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 201
Cronología de Ep 2 y de la carta 2a
La Ep. 2 es la
respuesta, conservada, de Agustín a la Ep. 2a
de Zeno-
bio54. Los Maurinos
datan la Ep. 2 a finales del 386, como
resultado de
relacionarla con la redacción del De ordine55. Goldbacher
la sitúa dentro
del grupo de epístolas escritas en Casiciaco y que él
data entre otoño del 386
y abril del 387, si bien para la Ep. 2 en
concreto no da ninguna cronología
específica pues se la salta56. Cilleruelo
y Alimonti la proponen a finales del 386
o a inicios del 38757.
La clave para datar las dos cartas es el De ordine,
diálogo compuesto de
dos libros, dedicado a Zenobio58. Tiempo atrás, el amigo de
Agustín no
recibía por parte del tagastino la atención que
querría59; entonces, tratan-
do de atraer su atención, decidió escribirle un poema60. A pesar de todo, el
africano no pudo dedicarle a su amigo el tiempo que hubiera querido, y esto
provocó la ira de Zenobio, que se alejó
precipitadamente de su lado61. Más
tarde, cuando Agustín se retiró a Casiciaco intentó
recuperar el contacto
con su amigo, tanto para responderle por fin a las preguntas que le hacía
54 La
Ep. 2 aparece citada en el Indiculum
de Posidio -Indic.
X5, 3, MA II, 182:
Obras... 40, 864- bajo la mención siguiente: ad Zenobium.
En la Ep. 2 Agustín responde a la
carta 2a de Zenobio. En la carta del africano vemos
cómo Zenobio le argumenta que no es
necesario preocuparse de la ausencia del amigo, puesto que todo placer corporal
es fugaz. Lo
que hay que hacer es procurar que el alma se centre en las realidades
inmutables y auténticas.
Agustín acepta el razonamiento pero se rebela contra él y reconoce su debilidad
al confesar-
le la añoranza que siente por el amigo ausente.
55 PL 33, c.
15.
56 GOLDBACHER, A.:
"Index III", en CSEL 58, 12.
57 CILLERUELO, L.: Obras
completas de san Agustín. Edición
bilingüe. Cartas (I.º), BAC
VIII, Madrid 1986, 34; PELLEGRINO, M., ALIMONTI, T., CARROZZI, L.: Nuova
Biblioteca Agos-
tiniana. Opere di sant'Agostino. Le lettere, I (1-123), Roma 1969, 7.
58 "Abarcar, Zenobio, y comprender el orden de las cosas...es
dificilísimo y rarísimo
para los hombres... Quiero que esta disputa nuestra salga bastante pulida, pues
la debo a
oídos no gruesos. En efecto, nuestro Zenobio
frecuentemente ha cambiado impresiones con-
migo respecto al orden de las cosas" De ord.
1, 1.20: Obras... 1, 596.614.
60 "...Zenobio, investigador de profundidades a quien nunca he
podido satisfacer o
por la oscuridad de los temas o por la brevedad de los tiempos...Querría yo...
tener con-
migo..., por lo menos, al gran Zenobio, a quien nunca
recibí con el tiempo libre adecuado a
la magnitud de este tema que tanto le interesa" De ord.
1, 20.27: Obras... 1, 614-621.
61 "Tan
impaciente estaba él por los continuos aplazamientos, que, para forzarme a res-
ponder más diligente y elocuentemente, me provocó
incluso con un poema... Había él esta-
blecido dejármelo para responderle..." De ord. 1, 20: Obras... 1, 614..
A Zenobio le gustaba
mucho la poesía: "Y, pues él sabe que también tú (Licencio) eres
aficionado a la poética, se
felicitará tanto, que ya me parece verlo brincar de alegría" Ibíd.
CASATI, G.: "Nota sull'am-
biente e le persone di Casiciaco",
en Augustinianum 7 (1967), 502-513, en
concreto p. 510,
cree que el poema trataba sobre el orden del mundo.
62 "Su marcha
(de Zenobio) fue tan repentina y perturbada por ese
tumulto, que nada
de estas cosas puede venirme a la mente... Y quizá lo exigía así ese orden que
ha procurado
la ausencia de ellos" De ord. 1, 20.27: Obras...
3, 614.621.
202 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
-con dos libros que tratan de temas filosóficos y a través de cartas62-,
como para hacerlo partícipe del tipo de vida que llevaba en la villa de Vere-
cundo63. El De ordine es la
respuesta al poema de Zenobio, y será así como
Agustín se disculpará de la poca atención que le prestó en el pasado.
Cuando Zenobio recibe el diálogo,
responde a Agustín con la carta 2a,
a la cuál éste contesta con la Ep. 264. Visto que Zenobio era probablemen-
te de Milán y vista la proximidad con Casiciaco de
dicha ciudad, la corres-
pondencia entre ellos dos era rápida y fluida65. El De ordine,
aceptando la
62 "No
es propio de su humanidad (de Alipio) no esforzarse para mediante el mayor
número de cartas tenerte con nosotros a ti (Zenobio),
huido por no sé qué necesidad" Ep.2:
Obras... 8, 34.
63 "Conviene
indicar a su benevolencia hacia nosotros el género de vida que ahora lle-
vamos" De ord. 1, 20: Obras... 1,
614. Agustín invita a Zenobio a finalizar la
discusión que
habían dejado a medias: "Te recuerdo que ha de llevarse a cabo totalmente
la disputa incoa-
da contigo" Ep. 2: Obras... 8, 35.
64
Ep. 2 |
De
ordine |
En la carta 2a Zenobio responde
a |
"Me parece que, cualquiera que cono- |
"Por eso, la verdadera y divina filo- |
"Pues no se niega que este sabio, |
65Véase supra, n. 15.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 203
historicidad de los Diálogos, fue acabado a finales de
noviembre del 38666.
La reelaboración de los Diálogos y la realización de copias no tardaron
mucho en hacerse, puesto que Agustín tenía mucha prisa por enviar las
obras a sus amigos67.
El diálogo llegaría entonces a las manos de Zenobio
avanzado diciembre, éste leería la obra con avidez y muy a finales de diciem-
bre o a inicios de enero del 387 escribiría la
respuesta (carta 2a). Agustín
responde a la carta de Zenobio mediante la Ep. 2 ya en enero del 387. Con
todo, las fechas post quem y ante quem de las dos cartas son finales de
noviembre del 386, fin del De ordine, y 14 de marzo del 387, fecha
límite del
retorno de Agustín a Milán.
LA CORRESPONDENCIA CON HERMOGENIANO
Hermogeniano era un amigo de
Agustín68, del cual sólo tenemos noti-
cia gracias a la Ep.
1. Seguramente, como Zenobio y Firmino69, formaba
parte del círculo de amigos influyentes con los que el africano contactó en
Milán y ahora desde Casiciaco mantenía el contacto,
vía epistolar. A pesar
de todo, tampoco es inverosímil, si bien es poco probable, que este Her-
mogeniano sea el Anicius
Hermogenianus Olybrius
que aparece citado en la
PLRE como miembro del clan cristiano de los Anicii70, una de las familias
más ricas del Imperio, y que vivía en Roma, ciudad donde Agustín había
estado dos años antes71.
66 OHLMANN,
D.: De S. Augustini... 27 cree que la
obra fue acabada el 23 de noviem-
bre o poco después. ZARB, S. M.: "Chronologia..." 396 dice que algunos días
después del 17
de noviembre. PERLER, O.: Les voyages... 190
piensa que el 25 de noviembre o más tarde.
67 Agustín tenía
interés por enviar rápidamente copias de los Diálogos a sus amigos:
"Terminemos ya, como he dicho, esta disputa y, consignada en letras,
enviémosla, Licencio,
sobre todo a tu padre, cuya disposición respecto a la filosofía ya conozco
enteramente" C.
Acad. 1, 25: Obras... 3, 100.
68 "En tu
prudencia no puede caer error ni en tu amistad simulación" Ep. 1, 3:
Obras... 8, 33.
69 Véase infra.
70 PLRE I, 68.
Al respecto véase infra, n. 82. Por otra parte WANKENNE, L.-J.: "La
langue de la correspondance
de saint Augustin", en
Revue Bénédictine
94 (1984) 102-153,
en concreto p. 103, identifica Hermogeniano con Q. Clodius Hermogenianus Olybrius,
cónsul el 379.
71 La primera etapa
del viaje de Agustín a Italia fue Roma: "Diseñaste respecto a mí el
proyecto de que se me persuadiera a ir a Roma y enseñar más bien allí lo que
enseñaba en Car-
tago" Conf., 5, 14: Obras...
2, 205. En la Ciudad Eterna es donde es más probable que el afri-
cano contactara con el clan cristiano de los Anicios.
Sobre el tiempo que Agustín estuvo en
Roma, véase PERLER, O.: Les voyages...
134-136. Para la primera estancia de Agustín en Roma,
muy poco estudiada, véase O'MEARA, J. J.: La jeunesse
de saint Augustin. Introduction aux
Confessions de saint Augustin, Fribourg 1988, 135-147; CASATI, G.:
"S. Agostino a Roma", en
Augustinianum 9 (1969) 134-138.
204 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
De la correspondencia con Hermogeniano
tenemos documentadas dos
cartas: la que denomino carta 1a, perdida, y la Ep. 1, conservada. Quizá
existió una tercera misiva escrita por Hermogeniano
(carta 1b) en la cual
éste respondía a la Ep. 1.
Que la carta 1a ha existido, aunque hoy esté perdida,
lo demuestra el
hecho de que Agustín en su Ep. 1 responde a la
misiva de Hermogeniano72,
en la cual éste emite un juicio del Contra Academicos73. El juicio es tan posi-
tivo que Hermogeniano llega
a afirmar que el tagastino ha vencido a los
académicos74.
La Ep. 175 es, pues, la respuesta,
conservada, de Agustín a
la carta 1a.
Sobre la supuesta carta 1b, puede decirse lo siguiente.
En la Ep. 1
Agustín pide encarecidamente a Hermogeniano su
opinión sobre el final del
libro III del Contra Academicos76. Es imposible saber si Hermogeniano
escribió nunca esta carta, pero el contenido de la misiva, de haberse escri-
to, sería una opinión a la conclusión del capítulo veinte del tercer libro del
Diálogo. En él Agustín dice que para explicar y entender los temas más
complicados es preciso recorrer al platonismo, ya que es la doctrina más
acorde con el cristianismo77.
72 "No
me deleita tanto haber yo vencido a los Académicos, según escribes -en efec-
to, escribes esto de modo quizá mucho más amante que verdadero del todo-,
cuanto haber-
me yo arrancado violentamente las odiosísimas riendas
que, por desesperanza de la verdad,
que es el pábulo del ánimo, me refrenaban de la ubre de la filosofía" Ep. 1,3: Obras... 8, 33.
73 "Considero
gratísimo tu leal juicio de mis libritos y en ti imagino tanta valía..." Ibíd.
74 Véase supra,
n. 72.
75 La Ep. 1 aparece citada en el Indiculum
de Posidio -X5, 2, MA II, 182; Obras...40,
863- de la siguiente manera: ad Hermogenianum.
En la Ep. 1 Agustín ataca a los académicos
por su creencia de que a los hombres les está negada la comprensión de la
verdad.
76 "Lo que más
pido es que con gran diligencia consideres, y me contestes por escri-
to, si apruebas lo que al final del tercer libro -de modo quizá más conjetural
que cierto del
todo, más útil empero, como supongo, que increíble del todo- opiné que había de
creerse"
Ep. 1,3: Obras 8, 33.
77 En la Ep. 1 Agustín dice que al final del Contra Academicos hace una afirmación más
por sospechas que por certezas, pero esta afirmación hay que aceptarla ya que
es más útil que
increíble (véase supra, n. 76). En el capítulo veinte del tercer libro
del Diálogo, el africano dice
poder encontrar entre los platónicos, mientras no halle algo mejor, la doctrina
más conforme
con el cristianismo para entender algunos conceptos que necesitan razonamientos
muy difí-
ciles: "Ahora bien, respecto a lo que con
sutilísima razón ha de perseguirse... confío encon-
trar en los Platónicos lo que no repugna a nuestras
sacras realidades" C. acad. 3, 43:
Obras...
3, 188. Esto supone por parte de Agustín un claro posicionamiento respecto al neoplatonis-
mo. Por eso le pide con tanto interés a Hermogeniano su parecer: "Como aquí se hubiesen reí-
do, a tan gran debate pusimos fin, no sé si firmísimo, de modo empero más
mesurado y
rápido de lo que yo había esperado" Ibíd. 3, 45: Obras... 3,
190. Este hecho nos permite intuir
que Hermogeniano era quizá una persona docta en la
materia. DEWART, J. Mc. W.: "La auto-
biografía de Casiciaco" en AVGVSTINVS 31
(1986) 41-78, en concreto p. 77, afirma con
razón que en estos capítulos finales del Contra Academicos
se proporciona la justificación filo-
sófica para los desposorios formales de Agustín con
el neoplatonismo.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 205
Cronología del epistolario con Hermogeniano
Para la fijación de la cronología de las cartas
intercambiadas entre Her-
mogeniano y Agustín se siguen los mismos criterios
que vimos en la corres-
pondencia con Zenobio. Los Maurinos y Goldbacher fechan la Ep. 1 a
finales del 386, poco después de la redacción del Contra Academicos78.
Cilleruelo y Alimonti la
proponen a finales del 386 o a inicios del 38779.
La Ep. 1 es posterior
al Contra Academicos porque en ella Agustín
pide
la opinión a Hermogeniano sobre un aspecto del libro
III del Diálo-
go80. La obra fue acabada el 24
de noviembre del 38681
pero, debido a su
ulterior reelaboración, no será finalizada definitivamente hasta avanzado
diciembre. Entonces, después de mandar hacer rápidamente una copia,
Agustín la envía a su amigo. Hermogeniano, si
aceptamos que estaba en
Milán82, la recibe a finales de
diciembre del 386 o a inicios del 387 y a con-
tinuación, tras leer el diálogo, responde mediante la
carta 1a ya en enero del
387. Agustín contesta rápidamente la misiva también en enero del mismo
año con la Ep. 1. A continuación quizá Hermogeniano le responde con la
supuesta carta 1b a finales de enero o ya en febrero del 387.
Podemos ver aquí un proceso muy similar al de la
correspondencia
con Zenobio, si bien fue quizá un poco más lento,
porque la mayor longi-
tud del Contra Academicos
respecto al De ordine implica más tiempo por
parte del lector para leer la obra. Reconocemos que el argumento es extre-
madamente débil, pero es el único indicio de que
disponemos para saber
qué cartas -las de Zenobio o las de Hermogeniano- fueron anteriores en
el tiempo. Tal vez fueron simultáneas y las misivas de ambos llegaban jun-
tas con el mismo portador desde Milán.
Con todo, al igual que ocurre con la Ep. 2, las fechas post quem
y ante
quem son finales de noviembre del 386 (fin del Contra
Academicos) y 14 de
marzo del 387 (fecha límite del retorno de Agustín a Milán).
78 PL
33, 13-15; CSEL 58, Index III, 12.
79 Obras...
31; Nuova Biblioteca Agostiniana. Opere di Sant'Agostino. Le lettere I (1-
123), Roma 1969, 3.
80 Véase supra,
nn. 76-77.
81 OHLMANN, D.: De
S. Augustini... 27, cree que la obra fue acabada el 22 de noviem-
bre.; ZARB, S. M.: "Chronologia..."
386, piensa que es imposible saber el día exacto en que fue
finalizado el diálogo. PERLER, O.: Les voyages...
189, propone el 24 de noviembre.
82 El tiempo y las
dificultades que implicaría un intercambio epistolar con Roma son
los que nos llevan a pensar que seguramente Agustín se cartearía desde Casiciaco sólo con ami-
gos de Milán o cercanías. Por eso vemos poco probable
la identificación de Hermogeniano
con un miembro del clan de los Anicios, a no ser que
en aquellos momentos residiera en
Milán, lo cual no es inverosímil. Véase supra, n. 70.
206 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
LA CORRESPONDENCIA CON NEBRIDIO
Nebridio era un amigo íntimo
de Agustín83,
originario de la provincia
del Africa Proconsular, donde tenía una rica finca,
cerca de Cartago84.
Según el hijo de Mónica, Nebridio era una persona muy
dotada intelec-
tualmente85,
con una curiosidad sin límites86 y que brillaba por su pru-
dencia87 y ponderación88. Era más joven que Agustín89 y probablemente
fue alumno suyo de gramática y retórica en Cartago90. Fue precisamente en
la capital de Africa Proconsular donde los dos amigos
compartieron las doc-
trinas maniqueas91.
83 Sobre
Nebridio véase DE GONZAGUE,
M. M.: "Un correspondant de saint Augus-
tin", en Augustinus Magister, I,
93-99; Mc NAMARA, M. A.: Friendship... 46-52;
JONES, A. H.
M., MARTINDALE, J. R., MORRIS, J.: "Nebridius
4" en PLRE I, Cambridge 1971, 620; DECRET,
F.: L'Afrique... 371-372;
MANDOUZE, A.: "Nebridius", en PCBE I, 774-776,; FOLLIET, G.:
"La
correspondance entre Augustin et Nebridius", en L'opera letteraria di
Agostino tra Casiciaco e
Milano. Agostino nelle terre d'Ambrogio, Palermo 1987,
191-215; ID., "La correspondance
d'Augustin à Thagaste (388-391)", en De Magistro di Agostino, Roma
1993, 73-107, en con-
creto pp. 74-80; NAVARRO COMA, F.: La correspondencia entre Agustín y
Nebridio. La cronolo-
gía de la Ep. 4, en prensa.
84 "Nebridio, quien -dejados el natal suelo vecino a Cartago y
la misma Cartago don-
de frecuentísimamente estaba, dejada la óptima finca rural paterna, dejadas la
casa y la madre
que no lo seguiría- también había venido a Milán no por alguna otra causa
sino..." Conf. 6,
17: Obras... 2, 250.
85 "Gracias a la
mente, con que sobresales, puede suceder..." Ep.
14,3: Obras...8, 73.
86 "Nebridio... suspiraba igualmente e igualmente fluctuaba,
ardiente buscador de la
vida feliz y acérrimo escrutador de cuestiones dificilísimas" Conf.
6, 17: Obras...2, 250.
87 "Es una
importante cuestión, a la que según tu prudencia tú también percibes con
claridad que ha de responderse..." Ep.
9,2: Obras...8, 55.
88 "Un hombre (Nebridio) cuya consideración bien sé cuán importante
es" Ibíd. 3,1:
Obras... 8, 36.
89 "Mi carísimo Nebridio, adolescente muy bueno y muy casto, que se reía de
todo ese
género de adivinación" Conf. 4, 6: Obras... 2, 164. "Él
(Nebridio), entonces adolescente, que
no quería oír de mí brevemente tales cosas y en nuestra conversación me
preguntaba mucho"
Ep. 98,8: Obras... 8, 694. DE GONZAGUE,
M. M.: "Un correspondant..." 93, piensa que
sería
unos diez años más joven que Agustín.
90 Cf. FOLLIET, G.:
"La correspondance..." 192.
91 "Por idéntico
tiempo de nueve años, desde el decimonono de mi edad hasta el
vigésimo octavo, éramos seducidos y seducíamos"Conf.
4, 1: Obras...2, 159. Pero con el
tiempo Nebridio se irá desengañando del maniqueísmo.
Será así el joven africano quien
encuentre una objeción en uno de los puntos capitales del maniqueísmo (el
combate de la
Luz contra las Tinieblas), consiguiendo con ello la admiración de Agustín:
"Me bastaba,
Señor, contra esos engañados engañadores y locuaces mudos porque de ellos no
sonaba tu
Palabra, bastaba, pues, lo que ya tiempo atrás, desde Cartago, solía proponer Nebridio, y a
todos los que lo oíamos nos estremeció... Así pues, si a ti -cualquier cosa que
eres, esto es,
tu sustancia por la que eres- te denominaban incorruptible, todo aquello sería
falso y exe-
crable; si, en cambio, corruptible, esto mismo sería
falso y abominable desde la primera
letra..." Conf. 7, 3: Obras...2, 269-270. Con todo, Nebridio seguirá aceptando la cristolo-
gía de tipo docetista de la
doctrina de Mani; cf. DECRET, F.: L'Afrique...
371; MANDOUZE, A.:
"Nebridius", PCBE I, 775.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 207
La amistad de Nebridio hacia
Agustín le llevará al extremo de ir a su
encuentro en Milán para buscar con él la sabiduría y la felicidad92. Allí con-
tactará también con Alipio, y los tres africanos
vivirán juntos intensas expe-
riencias93. Por un lado, se integran en
la vida pública italiana: Nebridio,
como asistente de gramática de Verecundo94; Alipio, como asesor del
"conde del fondo de distribuciones italicianas"95; Agustín, con el apoyo
de los maniqueos y Símaco, será escogido profesor
oficial de retórica96
en
Milán97. Por otro lado, se alejarán
del maniqueísmo para irse acercando al
neoplatonismo y al catolicismo98. A pesar de todo, Nebridio no seguirá a
Agustín tan estrechamente como lo hará Alipio, y lentamente se irá distan-
ciando de sus dos amigos. El discípulo de Agustín en
su angustiosa bús-
queda intelectual no encontrará la salida en el catolicismo, como sí pasará
con los dos tagastinos99.
Además, Nebridio era una persona discreta y huía
92 "Había
venido a Milán no por alguna otra causa sino para vivir conmigo en arden-
tísimo afán de verdad y sabiduría" Conf.
6, 17: Obras...2, 250.
93 "Gemíamos
hondamente por estas cosas quienes juntos vivíamos amicalmente, y
sobre todo y del modo más familiar conversaba de ello con Alipio y Nebridio" Ibíd. 6, 11:
Obras...2, 242.
94 "Nebridio había concedido a nuestra amistad suplir como
maestro a Verecundo,
familiarísimo de todos nosotros, ciudadano milanés y gramático, quien
vehementemente dese-
aba y por derecho de familiaridad pedía con insistencia a nuestro grupo un adjutorio leal, del
que sentía necesidad demasiado" Ibíd. 8, 13: Obras... 2,
323.
95 Conf. 6,
16: Obras... 2, 249; cf. MANDOUZE, A.: "Alypius",
en PCBE I, 53-65, en
concreto p. 53.
96 "Y vino el
día en que también de hecho quedase yo liberado de la profesión retóri-
ca, de la que en el pensamiento ya estaba
liberado" Conf. 9, 7: Obras... 2, 354.
97 "Así pues,
tras haberse comunicado de Milán a Roma, al prefecto de la Urbe, que
se proveyera a esa ciudad de un maestro de retórica -concedido también el
transporte públi-
co-, yo mismo, mediante esos mismos ebrios de
vaciedades maniqueas de quienes iba a care-
cer -pero ni ellos ni yo lo sabíamos-, maquinaba para
que el prefecto, Símmaco entonces,
me enviara aprobado tras proponer yo un discurso" Conf. 5, 23: Obras...2,
216. Así, a lo lar-
go del 385, Agustín pronuncia dos panegíricos: el
primero con ocasión del acceso de Bauto al
consulado en enero del 385; el segundo en honor de Valentiniano II durante las decennalia del
22 de noviembre del 385. No obstante MARROU, H.-I.: Saint Augustin... 88, cree que no fue-
ron dos panegíricos sino sólo uno, hecho en honor de Bauto
en presencia de Valentiniano II.
El problema viene dado, porque Agustín nos habla dos veces de un panegírico
pronunciado
en Milán: la primera en Conf. 6, 9: Obras...240 -"Como me
preparase a recitar las loas al
emperador..."-; la segunda en el C. lit. Petil. 3, 30: Obras...33, 335-336: "Como
hubiese yo
venido a Milán ante el cónsul Bauto y el 1 de enero,
en tan gran asamblea y presencia de per-
sonas, según mi profesión de entonces, retórica,
recitase él, cónsul, la loa...". Marrou cree
que las dos referencias hablan del mismo panegírico, en cambio COURCELLE, P.: Recherches...
82-83, a quien seguimos, defiende la existencia de dos panegíricos diferentes.
98 En Milán Agustín
contacta con Ambrosio, hombre que jugará un papel clave en su
conversión al neoplatonismo y al cristianismo: "Y vine a Milán, al
obispo Ambrosio, conoci-
do para el disco de la tierra entre los mejores, piadoso adorador tuyo"
Conf. 5, 23: Obras...
2, 216. Sobre Agustín y Ambrosio la bibliografía es ingente. Para una primera
aproximación
véase el estado de la cuestión en MADEC, G.: Petites
Études Augustiniennes,
Paris 1994, 51-69.
99 "Aún no
imbuido en ningún sacramento de tu Iglesia, ardentísimo inquisidor empe-
ro de la verdad" Conf. 9, 6: Obras... 2, 352.
208 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
de la vida pública100. Por eso estará ausente en
los momentos claves de la
definitiva conversión de Alipio y Agustín: la visita de Ponticiano101, la
escena del jardín de Milán102
y el retiro a Casiciaco103.
Agustín, conscien-
te del alejamiento de su discípulo, nunca perderá la esperanza de que final-
mente se convierta al catolicismo104; por este motivo mantendrá
una
entusiasmada y activa correspondencia con su discípulo desde Casiciaco y
le enviará copias de sus obras105. Quería que Nebridio se contagiara del
entusiasmo y alegría que sentía en su interior tras la reciente conversión106.
De la correspondencia de Agustín con Nebridio durante su estancia en
Casiciaco tenemos documentadas dos cartas: una
perdida, que denomino
carta 3a, y otra conservada, la Ep.3. Quizás existió una tercera carta,
escrita por
Nebridio, que llamaríamos carta 3b, en la cual
respondía a la Ep. 3. Los dos
amigos, no obstante, se intercambiaron muchas más cartas, como vemos en
un conjunto de epístolas perdidas que tenemos documentado, las que agru-
pamos como "epístolas perdidas II".
Finalmente hay que destacar que la Ep. 4
no fue escrita en Casiciaco sino en Africa107.
100 A
aceptar sustituir en la escuela a Verecundo "no arrastró a Nebridio la codicia de
ventajas... Desempeñaba empero (su oficio) evitando prudentísimamente darse a
conocer a
personas importantes según este mundo" Ibíd. 8, 13: Obras...
2, 323.324.
101 "Cierto día
-no recuerdo la causa por que estaba ausente Nebridio-,
cuando he
aquí que nos vino a casa a mí y a Alipio cierto Ponticiano,
paisano nuestro en cuanto africa-
no, quien preclaramente desempeñaba una función en palacio..." Ibíd.
8, 14: Obras... 2,
324. Sobre Ponticiano véase MANDOUZE, A.: "Ponticianus 1" en PCBE I, 884; COURCELLE, P. :
Recherches..., 180-183.
102 "Me separé,
pues, al huerto y Alipio pegado a mis talones" Conf.
8, 19: Obras...
2, 330.
103 En el caso de Casiciaco el motivo era que tenía que trabajar como
asistente de gra-
mática de Verecundo. Véase supra, n. 94
104 "Estábamos...
aguardando a Nebridio, cuándo seguiría -cosa que tan
próxima-
mente podía y en este mismo instante era su decisión hacer-..." Conf.
9, 6: Obras...2, 353.
105 Véase infra,
n. 111.
106 Pero Nebridio seguirá su propio camino particular y no se
bautizará en la Pascua
del 387 con Agustín (Conf. 9, 14 ) y, cuando
los dos amigos de nuevo se carteen en Africa, en
sus cartas apreciaremos un progresivo enfriamiento y distanciamiento. Para ver
en profundi-
dad este proceso, cf. NAVARRO, F.: La correspondencia...
107 En nuestro
artículo sobre la correspondencia entre Agustín y Nebridio
intenta-
mos demostrar que la Ep.
4 fue escrita en Africa y no en Casiciaco;
cf. NAVARRO COMA, F.:
La correspondencia... Por otra parte, la Ep.
13 es una carta que partiendo de los Maurinos y
Lenain de Tillemont siempre
se ha emplazado en Africa: PL 33, 16; DE
TILLEMONT, L.:
Mémoires pour
servir à l'histoire ecclésiastique
des six premiers siècles XIII, 133. Pero a par-
tir de la edición de las cartas hecha por Goldbacher esto cambia. Así el editor del CSEL pro-
pone situar la Ep. 13 en Casiciaco
y para ello se basa en el hecho de que la carta trata el tema
de la naturaleza sensible y la naturaleza inteligible, una temática en la línea
de lo tratado en
las Ep. 3 y 4, que también sitúa en la villa
de Verecundo. Asimismo menciona en defensa
de su argumento dos pasajes de la Ep. 13: uno,
que habla de la separación entre los dos
amigos -"desde que me marché de ti"-, y otro, que habla de las largas
noches inverna-
les -"noches invernales demasiado largas"-, que identifica con las de
Casiciaco; cf.
GOLDBACHER, A.: "Index III" en CSEL
58, 12. Pero la propuesta de Goldbacher ha teni-
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 209
En la que denomino carta 3a Agustín responde a una
epístola, perdida,
de Nebridio108,
en la cual el joven africano le manifiesta una gran admira-
ción por las reflexiones emanadas de los tres diálogos109. El amigo de
Agustín los elogia mucho, pues son profundamente neoplatónicos. Se mues-
tra tan entusiasmado, que llega a afirmar que
Agustín, si bien todavía es un
ser humano con todas sus limitaciones110, puede considerarse sabio111.
Esto lleva a Nebridio a tener a Agustín por semifeliz (quasi beatus)112.
Entonces le pregunta al tagastino en qué consiste la semifelicidad que está
viviendo113. Finalmente Nebridio agradece a Agustín su sinceridad114.
La Ep. 3, conservada,
es la respuesta de Agustín a la carta 3a115. Sobre
la supuesta epístola carta 3b, puede decirse lo siguiente. En la anterior,
do
escaso eco y por regla general los investigadores de la vida y obra de Agustín
siguen
aceptando la tradicional ubicación de la Ep.
13 en Africa. A tal efecto véase entre otros
BROWN, P.: Biografía... 174; MANDOUZE, A.: Saint Augustin.
L'aventure de la raison et de la
grâce, Paris 1968, 555 n. 3; ID.: "Nebridius", en PCBE I, 775; PERLER, O.: Les voyages...
432-
433; PELLEGRINO, M., ALIMONTI, T., CARROZZI, L.: Nuova Biblioteca... 63;
CILLERUELO, L.:
Obras... 68; FOLLIET, G.: "La correspondance
entre..." 193 n. 18. Conviene destacar que
este autor en un reciente artículo -"La correspondance
d'Augustin..." 73 n.3- se retrac-
ta de su anterior postura y retoma la opinión de Goldbacher, situando la Ep.
13 en Casicia-
co. En la línea de la mayoría de investigadores,
nosotros también situamos la Ep. 13 en
Tagaste. Así el tema de la naturaleza sensible y la
naturaleza inteligible ya fue tratado en la
Ep. 4, escrita en Africa
(véase supra). Además en Tagaste los dos
amigos también estaban
separados, y el invierno al que hace referencia Agustín podría ser
tranquilamente un invier-
no africano, como así es en realidad. Finalmente en la Ep.
13 vemos una carta en la línea del
resto de misivas escritas entre Agustín y Nebridio en
Africa: no encontramos la cordialidad
que vemos en la Ep. 3, escrita en Casiciaco, y estamos ante un Agustín que no halla tiempo
para atender las cartas de su amigo: "Desde que me marché de ti, no se me
han dado opor-
tunidad alguna, ocio alguno para reflexionar ni
meditar sobre lo que entre nosotros solemos
investigar;... pero, cuando hay ocio, más se pone delante para pensar en ello
lo que es nece-
sario para debilitar el ocio" Ep. 13, 1: Obras... 8, 68.
108 "Junto al
candil he leído tu carta" Ibíd. 3, 1: Obras... 8, 36.
109 "Porque
cualquier cosa que he puesto en esas letras le ha resultado dulce, ha
escrito lo que supuso que también me sería dulcísimo, y lo ha escrito gozando y
no se ha pre-
ocupado de qué habría de encomendarse al gozoso cálamo" Ibíd.
110 "Ni él osa
negar que aún hay estultos" Ibíd.
111 "¿Acaso,
leídos esos opúsculos, osó creerme también sabio?... Pronto, pues,
derramó en mí el sumo nombre y no se reservó algo que con alegría total asevere
de mí" Ibíd.:
Obras... 8, 36-37.
112 "Casi
me has persuadido de que soy no ciertamente feliz -pues éste es predio de
solo el sabio-, pero al menos casi feliz... ¿Acaso no es verdad que -cosa que
place a Nebri-
dio- soy feliz?... Gracias a este ocio se ha explorado suficientemente que en
la alegría de lo
sensible no hay vida feliz. Quizá por estas cosas y semejantes parezco a mi Nebridio, si no feliz,
al menos casi feliz" Ep. 3, 1.4: Obras...
8, 36.40.
113 "Aguardas de
mí qué es esto" Ibíd. 1: Obras... 8, 36.
114 "Me deleita
que me das las gracias, si no te oculto nada que venga a la boca, y gozo
porque así te plazco" Ibíd. 5: Obras... 8, 40.
115 En la carta
Agustín responde a Nebridio que, ignorando aún muchas
cosas como
ignora, no puede ser llamado feliz. El tagastino
argumenta entonces que la verdadera felicidad
se encuentra en la mente y en la inteligencia (alma), y no en los sentidos
(cuerpo).
210 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
Agustín ruega a Nebridio que le aclare unas
cuestiones de gramática116.
De
existir la carta en cuestión, sería probablemente larga117, y en ella Nebridio
respondería a las preguntas de Agustín sobre el uso del verbo cupio y sobre
la pronunciación de las formas fugitum, cupitum y sapitum118. Es de espe-
rar en esta posible carta un comentario a los Soliloquia
que Agustín segu-
ramente envía acompañando la Ep.
3119.
Cronología del epistolario con Nebridio
Para la fijación de la cronología de las cartas
intercambiadas entre Nebri-
dio y Agustín seguimos los mismos criterios que vimos en la corresponden-
cia con Zenobio y Hermogeniano. Los Maurinos y Goldbacher fechan la
Ep. 3 después de la escritura de los Soliloquia,
obra que sitúan a inicios del
387120. Cilleruelo
y Alimonti la proponen también a inicios del 387121.
La Ep. 3 fue escrita
con posterioridad a la redacción de los tres Diálo-
gos122 y poco después de la
composición de los Soliloquia, obra posterior
a ellos123 y que muy seguramente
acompaña a la Ep. 3124. Los tres Diálo-
116 "Quiero
que me instruyas sobre esta declinación" Ep.
3, 5: Obras...8, 40.
117 "Querría
haberte provocado yo a una carta bastante extensa. Pido leerte un poco
más largamente, porque no puedo decir tanto, cuanto agradable es leerte" Ibíd.:
Obras... 8,
41.
118 "Los
sabios verdaderísimos, únicos a los que es legítimo
denominar felices, han
querido que los bienes de fortuna no se teman ni se deseen -¿este vocablo se
dice en latín
cupi o cupiri?
tú verás-. Y muy bien viene la pregunta, porque quiero que me instruyas sobre
esta declinación pues, cuando añado palabras semejantes, devengo bastante
inseguro, porque
cupio es como fugio,
sapio, facio,
capio, pero ignoro si el modo infinitivo es sapiri
o sapi.
Podría atender a iaci y capi, si
no temiera yo que me cazase y por ludibrio me arrojase a don-
de quisiera quien me convenciese de que una cosa es iactum
y captum, otra fugitum,
cupitum,
sapitum, tres vocablos éstos sobre los que
similarmente no sé si han de pronunciarse con la
penúltima larga y con acento circunflejo, o grave y breve" Ep. 3, 5: Obras... 8, 40.
119 Véase infra, n. 124.
120 PL 33, 15;
GOLDBACHER, A.: "Index III", en CSEL 58, 12.
121 CILLERUELO, L.: Obras...8,
35; PELLEGRINO, M., ALIMONTI, T., CARROZZI, L.:
Nuova Biblioteca Agostiniana...11.
122 Véase supra, n. 111. Los
opúsculos a que se refiere Agustín son sin duda los tres
Diálogos: Contra Academicos, De beata uita y De ordine.
123 En las Retractationes Agustín ordena los libros
cronológicamente: "Quizá todo el
que lea mis opúsculos en el orden en que han sido escritos hallará cómo he
progresado escri-
biendo". Retr.
prol. 3: Obras... 40, 645. En esta obra los Soliloquia
aparecen mencionados en
cuarto lugar detrás de los tres diálogos. Véase también n. siguiente.
124 Cuando Agustín
escribe la Ep. 3, Nebridio
aún no ha leído los Soliloquios: "¿Si
hubiese leído los Soliloquios?" Ep.3, 1: Obras... 8,
36. Además, cuando envía la Ep. 3, el tagas-
tino se justifica no haber profundizado en determinada cuestión, diciendo que
este tema ya lo
tratan los Soliloquia: "mis Soliloquios contienen ya, y
suficientemente persuaden de ello, que
nada de esto puede suceder" Ibíd. 3, 4: Obras... 8, 39-40.
En conclusión, visto que Nebridio
no ha leído los Soliloquios y que Agustín en la Ep.
3 se remite a ellos, concluimos que la carta
viene acompañada de una copia de la obra.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 211
gos fueron acabados
definitivamente a inicios de diciembre125. Pero la
fecha de redacción de los Soliloquia es muy difícil de precisar126. No obs-
tante, a partir de la reconstrucción de la
correspondencia entre Agustín y
Nebridio vemos que la fecha más probable es enero del
387. En efecto, aca-
bados los tres Diálogos, Agustín envió copias de
ellos a todos sus amigos,
entre los cuales evidentemente estaba Nebridio. Como
en el caso de las Ep.
2 y 1, la Ep. 3 es una respuesta de Agustín a
una epístola anterior -carta
3a-, que respondía al envío y lectura de los Diálogos a finales de diciem-
bre del 386 o a inicios de enero del 387. Por tanto,
siguiendo el mismo razo-
namiento que hemos seguido para la correspondencia
con Zenobio y
Hermogeniano, lo más lógico es fechar la Ep. 3 en enero del 387. Visto que
los Soliloquia hacía muy poco que habían sido compuestos al escribirse
la
Ep. 3, lo más razonable es situarlos muy a
inicios de enero del 387. La posi-
ble respuesta a la Ep.
3 -la supuesta carta 3b- sería escrita avanzado
enero o ya en febrero del 387.
Con todo, al igual que ocurre con las Ep. 2 y 1, las fechas post quem
y
ante quem son últimos de noviembre del 386
(fin del De ordine) y 14 de
marzo del 387 (fecha límite del retorno de Agustín a Milán).
Epístolas perdidas II
Finalmente, por un pasaje de las Confessiones
sabemos que Agustín y
Nebridio intercambiaron muchas más cartas127. Estas cartas fueron escri-
tas ora por Agustín ora por Nebridio, y su número,
cronología y contenido
son imposibles de precisar. Sólo podemos afirmar que fueron escritas
durante la estancia de Agustín en la villa de Verecundo y que, por tanto, las
fechas post quem y ante quem
son la segunda quincena de octubre del 386
(viaje a Casiciaco) y el 14 de marzo del 387 (fecha
límite del retorno de
Agustín a Milán).
125 Véase
supra, n. 66.
126 Los Soliloquia
son muy difíciles de fechar con precisión. ZARB, S. M.: "Chronolo-
gia..." 386 no quiere arriesgarse y los fecha
entre noviembre del 386 y mediados de marzo del
387. Por regla general los investigadores los sitúan en enero del 387 siguiendo
a los Maurinos
y a Goldbacher (véase supra, n. 120). Una
excepción la encontramos en DEWART, J. Mc. W.:
"La autobiografía..." 50-52, quien, basándose en el contenido de cada
uno de los dos libros
de los Soliloquia, cree que el primer libro fue escrito antes que los
tres diálogos.
127 "Las cartas
testifican de qué traté con el ausente Nebridio"
Conf. 9, 7: Obras...2,
354.
212 LA
CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN EN CASICIACO
LA CORRESPONDENCIA CON FIRMINO
Firmino era un rico
aristócrata con una buena educación128, y perte-
neciente a una de las más nobles y ricas familias
senatoriales de Milán129.
Era amigo de Agustín y ambos se conocieron en Mediolanum
cuando el
milanés fue a consultar el horóscopo al africano130. La historia que Firmi-
no explica a Agustín en las Confessiones
muestra que era de una familia con
grandes latifundios131.
Como señala Courcelle, el hecho de que el tagasti-
no lo ignore todo de la familia de Firmino lleva a
pensar que nos encontra-
mos ante una estirpe milanesa132.
De su correspondencia con Agustín sólo tenemos
documentada, a
partir del Indiculum de Posidio,
una epístola: la que denomino carta A,
perdida.
Esta misiva la encontramos mencionada en el Indiculum de Posidio133
en cuarto lugar, y a continuación de las diez cartas de Nebridio,
la carta a
Hermogeniano y la carta a Zenobio,
tres personas con que Agustín se car-
teó desde Casiciaco, y
todas ellas, como Firmino, vinculadas de una u otra
manera con la aristocracia milanesa. Como la lista de Posidio
depende del
fichero de Agustín, que por regla general estaba ordenado cronológica-
mente134, todo lleva a indicar que
Agustín también se carteó desde Casi-
ciaco con Firmino, un amigo
que había visto hacía poco en Milán. Es
probable, pero nada nos autoriza a afirmarlo, que esta carta siguiera el mis-
mo esquema trimembre que siguen las otras: al envío
de un ejemplar de los
Diálogos, realizado por Agustín, sigue la carta de su receptor, tras la cual
Agustín envía la respuesta a ella.
En este caso, el contenido es desconocido. Pero es de
esperar que fue-
ra parejo a los temas discutidos en los tres
Diálogos. Quizás, simultánea o
128 "Este
varón, pues, Firmino de nombre, educado liberalmente
y adornado de elo-
cuencia" Ibíd. 7, 8: Obras... 2,
277.
129 "...diciéndole
que yo hubiese debido, sí, ver que allí, principales entre los suyos,
estaban los padres, la noble familia de la propia ciudad, la honrosa cuna, la
honesta educación
y las doctrinas liberales... Y empero Firmino, nacido
cabe los suyos en magnífico lugar,
correteaba por las muy encaladas vías del mundo, las riquezas lo hacían
prosperar, los hono-
res lo sublimaban" Ibíd. 7, 9.8: Obras... 2, 278-279.
130 "A mi
tozudez... procuraste, pues, tú un hombre amigo, por cierto no perezoso
consultante de los matemáticos ni bien experto en estas letras, sino, como he
dicho, consul-
tante curioso y empero conocedor de algo que decía
haber oído a su padre... Este varón,
pues, Firmino de nombre... al consultarme como a carísimo
sobre ciertas cosas suyas..."
Ibíd. 7, 8: Obras... 2, 276-277.
131 La historia trata
sobre el nacimiento simultáneo de Firmino y un
esclavo; cf. Conf.
7, 8-10: Obras... 2,
276-280.
132 COURCELLE, P.: Recherches...
77, n. 6.
133 "Ad Firminum", en POS.: Indic. X5, 4: Obras...
40, 864.
134 Cf. DE BRUYNE,
D.: "Les anciennes collections..."
285-286.
LA CORRESPONDENCIA DE AGUSTIN
EN CASICIACO 213
alternativamente, habría en ella referencias a los
horóscopos y comentarios
sobre ellos, referidos en concreto a los pasajes del Contra Academicos don-
de se ataca a la astrología135, esto es, en los capítulos
seis, siete y ocho del
libro primero136.
Respecto a la cronología, evidentemente nos es
desconocida. Sólo pode-
mos decir que sus fechas post quem
y ante quem son los límites cronológi-
cos del viaje a Casiciaco:
primera quincena de octubre del 386 (viaje a la
villa de Verecundo) y 14 de marzo del 387 (fecha límite del retorno de
Agustín a Milán).
Francesc NAVARRO COMA
Universidad de Barcelona
135
"Pensad que he dicho esto de arúspices, augures, de todos estos que
consultan a las
estrellas y de los adivinos, o presentad, si podéis, a alguno de este género de
hombres que, con-
sultado, nunca haya dudado de sus respuestas, nunca,
por último, haya respondido falseda-
des" C. acad., 1, 19: Obras...3,
93.
136 C. acad. 1, 17-23: Obras... 3, 91-98.