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Scripta Nova |
LAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN EN LA SALIDA DEL AISLAMIENTO RURAL. EL CASO DE ARIÑO
Carmen Elboj Saso
Depto. de Psicología y Sociología –
Universidad de Zaragoza
celboj@unizar.es
Miguel Ángel Pulido Rodríguez
Facultad de Educación Social y
Trabajo Social Pere Tarrés – Universitat Ramón Llull
mpulido@peretarres.url.edu
Thushari
Welikala
School of Education – University of Nottingham
thushari.welikala@nottingham.ac.uk
Las Tecnologías de la Información y la Comunicación en la salida del aislamiento rural. El caso de Ariño (Resumen)
Ariño es un pueblo minero situado en la comarca de Andorra-Sierra de Arcos en la provincia de Teruel empobrecido por la grave crisis que atraviesa el sector de la minería del carbón en España. Desde las perspectivas estructuralistas y postestructuralistas se determinaría que toda zona pobre y rural está predestinada a la exclusión y a todo tipo de desigualdades. Sin embargo, fue suficiente un profesor con ideas transformadoras para convertir el Centro de Educación Infantil y Primaria de Ariño en uno de los centros educativos más avanzados del mundo en su incorporación y manejo de las TICs en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Para Microsoft constituye un ejemplo a seguir y así lo ha manifestado públicamente. Por otro lado, la transformación en Comunidad de Aprendizaje no sólo ha generado un profundo cambio en la escuela, sino que también en su entorno.
The Information and Communication Technologies in the leaving of rural isolation. The case of Ariño. (Abstract)
Ariño is a mining town located in the region of Andorra-Sierra de Arcos in the province of Teruel, impoverished by the current serious crisis of the coal mining sector in Spain. From the structuralist and poststructuralist perspectives it would be determined that all poor and rural areas are predestined to the exclusion and all type of inequalities. Nevertheless, a teacher with transforming ideas was enough to turn the Center of Pre-Primary and Primary Education of Ariño into one of the most advanced educational centers in the world in its incorporation and handling of the ICTs in the education-learning process. For Microsoft he is an example to follow and because of that the enterprise has showed that publicly. On the other hand, its transformation into a Learning Community has generated a deep change not only in the school but also in its environment.
El artículo
que presentamos a continuación muestra, a partir del estudio de caso de la
población turolense de Ariño, cómo se puede contribuir a la transformación de
un territorio rural condenado a la despoblación a través de la educación.
Concretamente el estudio analiza cómo la innovadora introducción de las TIC (a
través de los Tableta PC) en el funcionamiento habitual del centro y la
conversión del mismo en una Comunidad de Aprendizaje[1] ha posibilitado no sólo que los alumnos y alumnas
aprendan a utilizar las nuevas herramientas de la Sociedad de la Información, sino que las personas adultas se involucren también en este
desarrollo. La consecuencia inmediata de esta apuesta educativa ha sido el
desarrollo socioeducativo de este núcleo rural, ayudando a frenar su
despoblación e incluso sirviendo de ejemplo no sólo para la región de Aragón, a
través del Proyecto Pizarra Digital impulsado por la Administración, sino, también, para el resto del país (mediante el Proyecto Escuela 2.0),
e incluso a escala internacional, ya que Microsoft ha referenciado al proyecto
de Ariño como modelo a seguir.
La contribución principal de este estudio de caso, por tanto, pretende ser el contravenir las perspectivas estructuralistas y post estructuralistas, que defienden que toda zona pobre y rural está predestinada a la exclusión. Todo ello a través de un ejemplo concreto en el que se demuestra que el ser humano es capaz de transformar su entorno a través de la educación. Para ello se analiza en primer lugar la situación de Ariño antes de la transformación antedicha, poniendo especial énfasis en su situación socioeconómica de auge inicial, posterior declive y nuevo desarrollo una vez puestos en marcha los proyectos de los Tableta PC y la Comunidad de Aprendizaje, además de otras medidas socioeconómicas llevadas a cabo por las administraciones públicas que son decisivas en este desarrollo aunque no son objeto de estudio en este artículo. Posteriormente, se estudia la implantación de ambos proyectos en el CRA de Ariño tomando como referencia contextual las características de estos centros rurales en nuestro país. A continuación se detalla la transformación del pueblo a través de las innovaciones llevadas a cabo en la escuela rural. Finalmente se establecen una serie de conclusiones a partir de las aportaciones realizadas.
Contextualización
Ariño es un pueblo situado en una zona minera del norte de Teruel, concretamente en el área denominada Val de Ariño, en la Sierra de Arcos. El subsuelo de esta zona conserva una de las reservas de carbón más importantes de la Provincia, recurso que sirvió como motor económico para sus habitantes desde el siglo XVI y alcanzó su mayor esplendor en el XVIII, época en la que se documentan más de 20 minas abiertas[2].
Figura 1. Situación de las minas
de carbón abiertas en el Val de Ariño. |
Sin embargo, esta actividad extractiva comenzaría a verse mermada en el siglo XIX, paralizándose completamente en 1906. Este hecho llevó a los habitantes de Ariño a reconvertir su actividad económica principal dirigiéndola a la agricultura y la ganadería. No obstante, profesionales del sector minero de Cataluña, conocedores de la riqueza mineral de Ariño, se arriesgaron a buscar nuevas explotaciones en el lugar, promoviendo un segundo auge minero en la población turolense, ya que la mayoría de sus habitantes se emplearon en esta actividad nuevamente. Incluso hubo que instalar una pequeña central térmica en las proximidades del pueblo, hoy denominado barrio de SAMCA.
Figura 2. Fotografía de los topógrafos que realizaron las
concesiones de las minas en Ariño (1915). Fuente: http://arinoentaban.blogspot.com/2009/04/samca-en-la-val-de-arino.html |
Esta explotación fue regentada por la Sociedad General Azucarera de España hasta 1940, año en el que su gestión pasó a manos de la Sociedad Anónima Minera Catalana Aragonesa. Durante estos años los trabajadores de las minas, procedentes en su mayoría de Ariño y otras poblaciones cercanas como Oliere, Alloza, Aválate o Andorra, simultaneaban su labor extractiva con el trabajo en el campo, lo que provocaba que la empresa tuviera que buscar en muchas ocasiones personal procedente de otros puntos de España. Este hecho provocó que el pueblo creciera gracias a la creación de infraestructura destinada a acoger a los trabajadores foráneos (40 viviendas, 2 residencias, una clínica, y varias instalaciones recreativas y deportivas), además de los numerosos talleres que se crearon para apoyar la labor de SAMCA y que emplearon a jóvenes del pueblo e inmigrantes que llegaban a Ariño sabedores de su auge socioeconómico.
Figura 3. Taller en Ariño (1952). |
A partir de mediados de los sesenta, las precarias condiciones de trabajo y las luchas internas entre el personal técnico provocaron serios problemas financieros a SAMCA, que decidió comenzar una intensa modernización de su actividad. Tal modernización se implantaría de manera definitiva a partir de 1972. Esta apuesta sirvió para que SAMCA, a diferencia del resto de empresas de explotación minera en Teruel, haya continuado su labor hasta la actualidad.
La crisis del sector del carbón provocó que los 4500 trabajadores que se empleaban en las minas turolenses se redujeran a los actuales 450. A partir de la década de los ochenta la crisis de la industria y del sector minero dejó a esta zona rural en una situación de precariedad con una gran parte de la población emigrada y con una gran necesidad de reorientar su actividad económica acorde con la sociedad actual (según el INE, la población en Ariño se redujo de 954 habitantes en 1994 a 856 tan sólo un año después).
Además de dicha crisis, la escasa población que vive en esta zona tradicionalmente ha tenido problemas de aislamiento. Se ha tratado tanto de un distanciamiento físico (falta de carreteras y sistemas de comunicación y transporte) como de un aislamiento tecnológico o virtual producto del acceso limitado, hasta hace relativamente poco tiempo, a las tecnologías de la información y comunicación. Situaciones como ésta han llevado a la Unión Europea a principios del presente siglo a proponer a las administraciones públicas que tomen las medidas pertinentes si se quiere reducir la distancia entre las zonas fuertes y las más débiles, como sucede entre zonas urbanas y rurales y como es el caso de la provincia de Teruel en comparación con urbes españolas[3]. Tal distancia incluye también la “brecha digital”[4].
En este contexto, la economía de Ariño comienza un proceso de diversificación hacia el sector de la industria y de los servicios, fundamentalmente hacia el sector turismo, tomando gran protagonismo el turismo termal en detrimento de la minería[5]. Al mismo tiempo, a comienzos del siglo XXI, el Centro Rural Agrupado –CRA- Ariño-Alloza, compuesto por los dos centros educativos de infantil y primaria de las dos localidades que le dan nombre, está inmerso en un proceso de reflexión sobre las oportunidades socioeducativas de la zona para su alumnado y sus familias y en la búsqueda de experiencias que han demostrado el éxito educativo en zonas como la suya. En este contexto, el centro decide ser pionero en la implantación de las TIC y transformarse en Comunidad de Aprendizaje[6], un proyecto cuyos objetivos principales se orientan a que ningún alumno y alumna se quede excluido y excluida de la sociedad de la información y a la posibilidad de crear, desde el centro educativo y sin salir de su entorno de aprendizaje, nuevas oportunidades de aprendizaje para toda la comunidad.
Esta nueva reorientación junto al aumento demográfico de la zona, en parte gracias a la llegada de población extranjera y a la estabilización de la población autóctona, ha supuesto una reactivación de la actividad socio-educativa de la zona. Si la década de los ochenta supuso para Ariño la pérdida de más del 23% de sus habitantes (INE)[7], durante los últimos años (período 1995-2009), y como podemos ver en la siguiente tabla, el crecimiento poblacional ha sido de un 11%, mientras la mayoría de poblaciones aragonesas de las mismas características han visto mermado seriamente su crecimiento demográfico durante los últimos años.
Cuadro 1.
Número de habitantes en Ariño (1995-2009)
1995 |
1997 |
1999 |
2001 |
2003 |
2005 |
2007 |
2009 |
856 |
826 |
901 |
817 |
897 |
856 |
867 |
950 |
Fuente: INE. Instituto Nacional de Estadística. |
Por lo que respecta a la población extranjera, los datos de 2010, según el IAEST[8], reflejan que en Ariño hay 181 personas extranjeras empadronadas, lo que representan casi el 20% de la población, fundamentalmente procedente de países europeos.
Cuadro 2.
Número de extranjeros según nacionalidad. 2010
Extranjeros |
% |
|
TOTAL |
181 |
100,00 |
Fuente: Padrón municipal de habitantes. IAEST. |
||
Por nacionalidades, Polonia es la procedencia de la mayoría de la población extranjera que reside en Ariño, seguida de Rumanía, República Checa y Hungría.
Cuadro 3.
Número de extranjeros por nacionalidades más frecuentes. 2010
Nacionalidades más frecuentes |
|
Polonia |
165 |
Fuente: Padrón municipal de habitantes. IAEST. |
En cuanto a su estructura demográfica, podemos apreciar en la siguiente pirámide de población, que a diferencia de otros municipios rurales, el grueso demográfico de Ariño lo componen jóvenes y personas de mediana edad (mayoritariamente entre 30 y 55 años).
Figura
4. Pirámide de población de Ariño (2009). |
En este punto es interesante contrastar el caso de Ariño con experiencias como la llevada a cabo hace algunos años en el pueblo turolense de Acquaviva, una población de similares características que emprendió también un proyecto para luchar contra la despoblación y el aislamiento rural[9]. La iniciativa consistió en dar la posibilidad de residir en la localidad a personas extranjeras de origen argentino con un salario superior al de su país y de adquirir una vivienda en unas condiciones muy ventajosas. Se dio prioridad a las familias numerosas. Dichas familias debían firmar un contrato de permanencia de cinco años. Las repercusiones mediáticas del Ayuntamiento de Aguaviva y las expectativas fueron muy elevadas desde sus inicios. Sin embargo, aunque en su fase inicial de captación pudo ser exitosa, en la etapa posterior de culminación el proyecto no ha tenido el éxito esperado a pesar de movilizar a un importante flujo de nuevos residentes y de dar importantes facilidades económicas y laborales. Collantes, Pinilla y Sáez señalan que el éxito a largo plazo de los proyectos que ayudan a la no despoblación y a salir del aislamiento rural en las zonas rurales son aquellos que además de generar riqueza y empleo ayudan a dinamizar la vida cultural, social, educativa y política de los pequeños municipios[10].
En relación a dichos pequeños municipios, los análisis científicos de la sociedad requieren del estudio de realidades empíricas como la del pueblo de Ariño que permitan contrastarlas, aportar alternativas y nuevos elementos de utilidad para superar las situaciones de desigualdad[11] en nuestro caso, superar a largo plazo situaciones producidas por el aislamiento rural desde la educación con el uso de las TIC.
En esta línea, los Tablet PC y la pizarra digital son los dos grandes exponentes de la apuesta tecnológica de Ariño, lo que les ha convertido en un referente internacional en el uso de las TIC desde una perspectiva dialógica. Basta con teclear las palabras Ariño y Tableta PC en Google para encontrar casi 3000 enlaces, muchos de ellos relacionados con la prensa, que hablan de sus objetivos y experiencias para conseguir el éxito académico y salir del aislamiento rural a través de las TIC. Resulta fascinante presenciar la plena inclusión de estas herramientas en las aulas del centro y ver la implicación de toda la comunidad en este proyecto ilusionante y con futuro en una zona donde las oportunidades no han sido muchas.
Según la Ley Orgánica 2/2006 de educación los centros escolares situados en zonas rurales presentan características propias que deben ser atendidas por las Administraciones Educativas, para que el derecho del alumnado a la educación no se vea afectado negativamente por estas circunstancias, garantizando el principio de equidad e igualdad de oportunidades. En el ámbito rural es muy habitual la fórmula organizativa denominada Colegios Rurales Agrupados[12], cuya constitución viene dada por el Real Decreto 2731/86 del 24 de diciembre[13]. Estos centros se caracterizan por poseer aulas repartidas por diversas localidades cercanas, con un centro de gestión comarcal de carácter administrativo. La itinerancia del profesorado representa el factor clave en el funcionamiento de este modelo organizativo.
En cuanto a su presencia a nivel nacional, tal y como observamos en la siguiente tabla, existen un total de 526 CRAs que dan cabida a 61.869 alumnos y alumnas en el curso 2008-2009. Descendiendo un nivel territorial, destacan en cuanto a número de centros las Comunidades Autónomas de Castilla y León con 197 centros, Castilla la Mancha con 75 y Aragón con 76.
Cuadro 4. |
|
Fuente: MEC. Ministerio de Educación y Ciencia. |
Por tanto podemos ver cómo Aragón contribuye actualmente al total nacional con el 15% de CRAs, los cuales incluyen a 356 localidades y 9929 alumnos y alumnas (el 16% de alumnos y alumnas de los CRAs españoles son aragoneses).
Continuando con el caso de Aragón, en aplicación de dicho Real Decreto, por Orden de 20/9/88, se crearon determinados CRAs fundamentalmente durante los años 1994, 1995 y 1996, hasta llegar a su configuración actual. Estos centros están formados por la unión de pequeñas escuelas de una misma comarca que conforman un único núcleo escolar. En cada escuela hay un profesor o profesora tutora, con un pequeño número de alumnos y alumnas, de edades comprendidas entre 3 y 12 años (2º ciclo de Educación infantil y 1º 2º y 3º ciclo de Educación Primaria), que se encarga de enseñarles las materias y áreas básicas, mientras que las materias especializadas –inglés, educación física y música son impartidas por profesores itinerantes que se encuentran adscritos a un CRA que está ubicado en un municipio cercano con mayor índice de escolarización. La complejidad organizativa y los requisitos mínimos exigidos en la educación secundaria son difíciles de conseguir mediante alternativas de organización de carácter itinerante. Por eso, al finalizar los estudios primarios el alumnado se adscribe a un Instituto de Enseñanza Secundaria de la zona donde proseguirán sus estudios[14].
El principal objetivo de los CRA es la atención educativa del alumno y de la alumna de educación infantil y primaria, independientemente del centro en el que se encuentra matriculado, con el objetivo de que no tenga que desplazarse a otras localidades para cursar esos estudios, evitando así los problemas derivados del transporte y desarraigo de los niños y de las niñas de sus localidades de origen. En la adopción de medidas educativas específicas destinadas al ámbito rural, los CRAs desempeñan un papel importante, ya que en torno a ellos se organizan los recursos didácticos, materiales y el personal docente necesario para atender las necesidades de la población rural afectada.
El funcionamiento de los CRAs se realiza de forma conjunta, ya que se dispone de un mismo equipo directivo y un consejo escolar común. Las agrupaciones de centros organizan reuniones periódicas en alguno de los pueblos en las que participan los profesores y profesoras y alumnos y alumnas de los centros adscritos, por lo que resulta más fácil obtener una mayor calidad educativa. Todo ello permite el mantenimiento de la escuela rural en muchos municipios que, de lo contrario, hubieran dejado de tener la referencia de la escuela desde hace años, evitándose, además, el aislamiento de profesorado y alumnado.
En cuanto a su distribución, podemos apreciar en el mapa inferior que todas las comarcas aragonesas poseen, al menos, un CRA. En Huesca encontramos 22 centros de este tipo, 26 en Zaragoza y 28 en Teruel. Los CRAS aragoneses agrupan entre dos y nueve núcleos poblacionales.
Figura 5. Distribución por comarcas de los Centros Rurales
Agrupados en Aragón (2008-2009). |
Atendiendo específicamente al CRA que nos ocupa, el de Ariño-Alloza, éste se localiza en Ariño, siendo el único centro de este tipo en la Comarca de Andorra-Sierra de Arcos. Su creación como centro educativo, formado por la integración de las escuelas de las dos localidades antedichas se dio en 1996. Las dos poblaciones se encuentran a 17 Km. de distancia una de otra. Ariño, como ya se ha mencionado, es un pueblo minero de unos 1000 habitantes. Alloza se ocupa en la agricultura y alberga una población de unos 700 habitantes. El total de alumnado escolarizado en el curso 2008-2009 es de 98. De los cuales, 71 (13 de Infantil y 58 de Primaria) se encuentran en Ariño y 47 (10 de Infantil, 37 de Primaria) en Alloza. Las unidades que hay en funcionamiento son 5 en Ariño y 3 en Alloza, que son atendidas por 14 profesores y profesoras (2 de Educación Infantil, 2 de Primaria, 2 de Educación Física, 2 de Francés, 2 de Inglés, 1 de Pedagogía Terapéutica, 2 de Música y 1 de Religión)[15].
En cuanto a su evolución, el Instituto Aragonés de Estadística únicamente ofrece datos relativos a los CRA a partir del curso 2006-2007, tal y como podemos apreciar en la tabla inferior. En ella observamos que durante los cuatro últimos cursos se ha ido incrementando el número de alumnado en el centro, a razón de un 3% anual, correspondiéndose al incremento demográfico de la zona que ya se ha analizado, derivado a su vez de la modernización educativa de esta población.
Cuadro 5.
Evolución del número de alumnado en el CRA Ariño-Alloza (2006-2010)
Curso |
2006-2007 |
2007-2008 |
2008-2009 |
2009-2010 |
Nº de alumnos |
92 |
96 |
98 |
102 |
Fuente: IAEST. Instituto Aragonés de Estadística. |
La transición de una economía industrial a una de la sociedad de la información ha supuesto pasar de una economía centrada en los recursos materiales a una economía centrada en los recursos intelectuales. No sólo ha cambiado la forma de trabajo sino también la vida cotidiana: la forma de acceder al conocimiento, las formas de comunicación, así como los contextos en los que nos socializamos. El conocimiento es un factor determinante en la constitución y desarrollo de la sociedad de la información y, en consecuencia, también para la inclusión de las personas en ella[16]. Afirmaciones como “quien tiene la información tiene el poder” hoy ya no son ciertas. La información es fácilmente accesible desde cualquier lugar. La clave y el desafío en la actualidad es saber seleccionar y procesar la información para identificar cuál es la información relevante en cada momento.
La economía global basada en la información está generando nuevas oportunidades socioeconómicas y, al mismo tiempo, está acompañada por una fuerte exclusión del mercado y la producción de grandes sectores de población. Precisamente aquellos sectores que debido a su formación, contexto socio-cultural o situación económica no han tenido la oportunidad de aprender a utilizar las nuevas tecnologías y, por tanto, el manejo de la información, se encuentran en una situación de aislamiento especialmente en los ámbitos laboral y educativo, en los que se requieren unas aptitudes, capacidades y conceptos para manejar estos nuevos sistemas. Ejemplo de este aislamiento podrían ser los núcleos rurales en los que el éxodo rural, el envejecimiento de la población y la carencia de servicios avanzados, han frenado la introducción de las nuevas tecnologías que hubieran contribuido a paliar esta exclusión. Si bien, como defiende el presente artículo, existen excepciones que pueden servir como modelo de desarrollo a otras zonas rurales, como es el caso de Ariño.
Así, en el ámbito laboral el sistema de producción de la sociedad de la información se basa en una combinación de alianzas estratégicas y cooperación entre grandes empresas, sus unidades descentralizadas y redes de pequeñas y medianas empresas. Redes que, en muchas ocasiones, están funcionando como nuevas formas de organización y articulación territorial[17]. Se produce un cambio en la organización empresarial que se gestiona a través de métodos menos jerárquicos, priorizando la participación de los trabajadores y trabajadoras, y promoviendo una producción flexible desde modelos basados en las franquicias y la subcontratación. Los diferentes agentes económicos se organizan en redes que interactúan entre ellas en un proceso que afecta a todos los componentes de un sistema económico que se basa en el manejo de la información.
Como ya expresábamos más arriba, este nuevo paradigma tampoco ha dejado fuera a la educación. Al contrario, la educación se convierte en uno de los ejes fundamentales en el acceso a la información, a las tecnologías y en la adquisición de las habilidades necesarias para saber seleccionar y procesar la información en cualquier parte del mundo y desde cualquier lugar. Esto ha supuesto que el aislamiento de las zonas rurales sea progresivamente menor, gracias en gran parte a la labor de los CRAs, en los que se ha comenzado a promover el uso de las TICs entre los alumnos y las alumnas y a sus familiares. Cada vez existen más proyectos y redes que proporcionan al alumnado y sus familiares la posibilidad de estar conectados con el resto del mundo en tiempo real y ofrecen nuevas posibilidades de comunicación y de aprendizaje especialmente en zonas aisladas a las cuales sin las TIC sería imposible acceder. Para ello, es necesario construir una nueva concepción de escuela, no podemos seguir ofreciendo la misma educación que en la sociedad industrial. La mayoría de centros educativos tiene la misma organización física que en la sociedad industrial. Seguimos con un modelo de aprendizaje enciclopedista basado en la acumulación y memorización de contenidos. En un mundo en el que desde cualquier lugar y en cualquier momento podemos tener acceso a mucha más información de la que es posible almacenar en nuestra memoria este modelo no tiene sentido.
Además, Internet, por ejemplo, que constituye el máximo exponente de la revolución de la información, ofrece un acceso cada vez más fácil, rápido y barato, lo que supone un gran avance hacia una sociedad más igualitaria. Es un medio masivo que potencia la comunicación y rompe con la estructura tradicional, en la que el emisor desempeña un papel activo en la transmisión del mensaje, mientras que la masa de receptores no tiene ninguna posibilidad de hacer oír su voz. Su propia estructura se basa en la comunicación y el intercambio de información, fomenta la flexibilidad y la horizontalidad, y ofrece a todas las personas la oportunidad de desarrollar su creatividad. Estas son precisamente las características de las iniciativas alrededor de las TIC que más aceptación están teniendo en todo el mundo.
Si observamos los datos proporcionados por el Observatorio Aragonés de la Sociedad de la Información[18] encontraremos algunos datos interesantes en el acceso y uso de las TIC en el ámbito rural y urbano de Aragón. En la tabla siguiente observamos como existe una evolución constante en la presencia de ordenadores en los domicilios en los últimos cuatro años tanto en el ámbito rural como urbano. Sin embargo, la diferencia entre los hogares que poseen ordenador en las áreas urbanas es de 16,26% más que en las áreas rurales. Por lo que respecta al contexto rural del 2005 al 2009 se ha incrementado en un 15,55% los ordenadores en los domicilios. Sin embargo, todavía a día de hoy más del 50% de los hogares rurales no tienen un ordenador.
Cuadro 6.
Hogares con ordenador por ámbito rural y
urbano en Aragón: evolución 2005-2009
2005 |
2006 |
2007 |
2008 |
2009 |
|
RURAL |
32,10 |
32,47 |
39 |
43,60 |
47,65 |
URBANO |
54,63 |
56,96 |
59,04 |
63,33 |
63,91 |
Fuente: Elaboración propia a partir de los datos del Observatorio Aragonés de la Sociedad de la Información (2009). |
Por lo que respecta al acceso a Internet desde los hogares que poseen un ordenador llama la atención el incremento de este acceso en los últimos cuatro años en las zonas rurales, pasando de un 55,4% en 2005 a un 79,56% en 2009. Es decir, ha habido un incremento del 24,16% en sólo cuatro años, mientras que el incremento en las áreas urbanas ha sido del 16,88%, situándose en el 88,77% en el 2009. La diferencia del acceso a Internet entre los hogares urbanos y los rurales es de un 9,21% en el 2009.
Cuadro 7.
Hogares con acceso a Internet por ámbito rural
y urbano: evolución 2005-2009
(sobre el total de hogares con ordenador)
2005 |
2006 |
2007 |
2008 |
2009 |
|
RURAL |
55,49 |
65,01 |
59,55 |
74,19 |
79,56 |
URBANO |
71,89 |
78,41 |
79,63 |
86,70 |
88,77 |
Fuente: Observatorio Aragonés de la Sociedad de la Información (2009). |
En cuanto a los lugares desde los que se ha accedido a Internet en el 2009, lo más sobresaliente de los datos es que desde los contextos rurales se hace un mayor uso de otros espacios para acceder a Internet. Los lugares más habituales son el trabajo, el centro de estudio y el cibercentro. Sin embargo, en ambos casos el domicilio propio es el más usado en dicho acceso.
Cuadro 8.
Lugar de acceso más frecuente a Internet por
ámbito rural y urbano: 2009
(Sobre el total de usuarios de Internet)
Desde casa |
Trabajo |
Estudios |
Cibercentro |
Cibercafé |
Casa familiar o amigo |
|
RURAL |
74,18 |
14,59 |
3,65 |
5,91 |
0.90 |
0,76 |
URBANO |
80,92 |
14,01 |
1,81 |
2,16 |
0,58 |
0,52 |
Fuente: Observatorio Aragonés de la Sociedad de la Información (2009). |
No obstante la presencia de ordenadores en los domicilios de las áreas rurales todavía no llega al 50% de la población. Sin embargo, cuando lo poseen casi el 80% tienen acceso a Internet, lo que demuestra la disposición de la población rural a utilizar las TIC como medio para comunicarse y salir, de este modo, de su aislamiento. Hecho que también queda demostrado en que la población rural cuando no tiene acceso desde sus domicilios busca, en un porcentaje mayor que las áreas urbanas, otros espacios como el trabajo, el centro de estudios o el cibercentro para acceder a Internet.
Por tanto, teniendo en cuenta que las TIC han marcado profundamente la vida en todos los territorios y contextos, la creciente presencia de las TIC en las áreas rurales puede ser un aliado muy valioso para salir del aislamiento. Movimientos sociales o personas que utilizan las TIC para emprender y difundir acciones solidarias y transformadoras están demostrando día a día que los discursos catastrofistas que afirmaban que las TIC reforzarían el aislamiento y la incomunicación entre las personas estaban equivocados.
En este sentido, podemos destacar proyectos como los telecentros (derivados de un acuerdo entre el Ministerio de Agricultura, la Federación Española de Municipios y Provincias y red.es), extendidos en las áreas urbanas y rurales, definidos como espacios públicos y comunitarios de formación y uso público de las TIC. El objetivo fundamental es acercarlas a todas las personas y, en especial, a todas aquellas que tienen menos posibilidades de acceder a ellas. Para lograrlo, diseñan su oferta a partir de las necesidades de estas personas y siempre orientan sus actividades hacia la inclusión y participación social. Los telecentros instalados en el marco del programa Internet Rural permiten por un lado, acercar los beneficios de la sociedad de la información a las poblaciones rurales y, por otro, contribuyen en buena medida a fomentar el desarrollo territorial de estas áreas.
Esta incorporación de las TIC a las escuelas rurales como forma de paliar el aislamiento de estos núcleos ha sido motivo de reflexión y análisis por parte de varios profesionales de la educación. Si bien, como reconoce Bustos[19], los estudios centrados en las escuelas rurales españolas son muy reducidos y, en su mayoría, se centran en remarcar las carencias de la escuela en el medio rural, diagnosticar su organización, criticar la ausencia de legislación específica, describir las deficiencias formativas de los docentes y establecer perfiles de escuelas y docentes[20].
Pero también existe otra línea, si bien todavía menos numerosa que la anterior, y es la que se centra en la búsqueda de soluciones para esta situación escolar a través de distintos medios, entre los que se encuentran las TIC o la diversidad de agrupamiento escolar. Ejemplo de ello es la publicación de Lorenzo y Santos[21] en la que se defiende que los déficits provocados por la mengua de recursos y consiguiente actividad en los planos sociocultural y educativo, junto a las menores posibilidades de hacer efectiva una auténtica diversidad curricular, se pueden paliar con programas educativos volcados en la red. El contexto aragonés ha sido estudiado por José Luis Bernal[22], quien, asumiendo que la infraestructura y los recursos en los CRAs son su talón de Aquiles, defiende la inclusión de estos medios novedosos como forma de reducir este handicap estructural. Uno de los más activos en este sentido es el trabajo ya mencionado de Antonio Bustos[23] quien ha analizado la introducción de las nuevas tecnologías en las escuelas rurales como medio para transformar espacios tradicionales basados en una economía algo primitiva en núcleos dinámicos e interconectados, lo cual está dando lugar a nuevas ruralidades, alejándose de la previsión estructuralista que los condenaba al ostracismo. Argumentación que también defiende Pep Borràs[24] en su artículo “Ordenadores en la Escuela Rural”, en el que trata estos medios tecnológicos como un elemento esencial al servicio del aprendizaje colectivo en estas zonas.
No obstante, el proyecto educativo que mostramos en el presente artículo da un paso más allá en la incorporación de las TIC a las aulas rurales, ya que analiza un caso en el que esta implantación fue acompañada de la transformación del CRA Ariño-Alloza en una Comunidad de Aprendizaje. En una publicación reciente, Bustos[25] abogaba por emplear en los centros rurales grupos heterogéneos (denominados “grupos multigrado” por la diversidad de edades de los alumnos que participan) para atender a la diversidad del alumnado como otro medio de evitar el aislamiento de la población de estos núcleos. Esta situación se ve aún más favorecida cuando se implica a toda la comunidad, como ocurre en el CRA de Ariño-Alloza a partir de su transformación en una Comunidad de Aprendizaje en 2002.
El proyecto de Comunidades de Aprendizaje pretende cambiar las escuelas heredadas de la sociedad industrial en centros en los que participa toda la comunidad para dotar a sus hijos e hijas de una educación que garantice la igualdad de oportunidades y la no exclusión de la sociedad de la información. Se trata de que el alumnado pueda alcanzar resultados educativos iguales o superiores a los de aquellas personas que disfrutan de situaciones de privilegio económico, social o territorial.
Por esta razón, el proyecto necesita la máxima implicación de toda la comunidad educativa y de toda la sociedad local en el centro para que el alumnado desarrolle al máximo sus capacidades y sus aprendizajes sin verse limitado por condiciones externas. Así se ponen en marcha grupos interactivos, ampliación del tiempo de aprendizaje, bibliotecas autorizadas, tertulias dialógicas, inmersión en las TICs o la formación de familiares como algunos de los ejes fundamentales del proyecto. Para conseguir estos objetivos es necesario coordinar todos los recursos existentes en la comunidad, fundamentalmente, a los profesores y profesoras, al personal voluntario del pueblo y a los familiares. La participación de todos y todas se extiende a todos los ámbitos de la escuela incluida el aula. Esto implica que los familiares y otras personas del entorno deben de hacer suyo el centro para su propia formación, aprendiendo a utilizar los ordenadores y entrar en Internet en el aula de informática, por ejemplo. En definitiva que la escuela se convierta en el eje educativo de toda la comunidad y para toda la comunidad[26].
Por lo tanto, la decisión de entrar a formar parte del proyecto de Comunidades de Aprendizaje, que reúne a 96 centros de diferentes comunidades autónomas del Estado Español, en el CRA Ariño-Alloza surge como una alternativa educativa y al mismo tiempo como una necesidad para poder hacer realidad una serie de innovaciones en el centro relacionadas en su mayoría con las TIC y que tuvieran continuidad a largo plazo en el contexto de su Centro. Para el claustro de profesorado sólo a partir de la implicación de las familias y de toda la comunidad educativa en la vida del Centro era posible aspirar a obtener la mejor educación para esta zona rural.
Continuando con el apartado tecnológico, en este contexto de aplicación escolar de las TIC a las escuelas podemos situar el caso de Ariño. La situación actual del centro es el resultado de una evolución que comenzó con la propia creación del CRA de Ariño-Alloza. En 1996 accede al proyecto Atenea del Ministerio de Educación. En dos años recibe una dotación de 10 ordenadores que dieron lugar a la creación del aula de informática. Estos recursos posibilitaron la edición y publicación de la revista escolar con aplicaciones informáticas, así como la formación del profesorado en el propio centro y la utilización de programas de enseñanza asistida por ordenador en las distintas áreas de aprendizaje. Estas actividades se llevaron a cabo complementariamente, de tal forma que la formación recibida por el profesorado se materializara en actividades en el aula.
La formación del profesorado en seminarios dependientes del Centro de Profesores y Recursos de la zona termina en la escuela en 1997, justamente en el primer curso en el que centro es Colegio Rural Agrupado. Dos son los motivos que hacen cambiar la estrategia para conseguir la formación del profesorado que el centro necesita para una mayor integración de las TIC: la inestabilidad endémica de la plantilla del Centro y la suficiente oferta, ya existente, de cursos de formación. Aunque la formación del profesorado ya no será un objetivo prioritario, ésta se consigue indirectamente a través de las actividades con medios informáticos que se encuentran integradas en los distintos niveles educativos, llegando poco tiempo más tarde a crear la figura del profesor/a de apoyo al profesorado. El profesorado veterano interviene en las actividades de clase junto al profesor o profesora de la asignatura. De tal manera que la mayoría de los miedos se disipan y se aprende a resolver los problemas habituales del funcionamiento de las máquinas y programas. Con la llegada del proyecto Aldea Digital, en 1997, la escuela dispone de acceso a Internet. Estas nuevas posibilidades permiten que desde el centro surjan experiencias, como los talleres de Matemáticas y Lengua; o por ejemplo un grupo de trabajo entre profesorado de distintos centros educativos para fomentar el uso habitual de las herramientas de comunicación a través de Internet con el fin último de publicar la revista virtual “El Lapicero Digital”.
Tres años más tarde, en el 2000, aparece la necesidad de tener los recursos del aula de ordenadores en cada una de las aulas normales del centro. Surge el proyecto “Aulas autosuficientes”, con el que se dota a cada aula de una pizarra digital a la que se encuentra conectada también una videocámara. En el curso 2002-2003 todas las aulas están ya equipadas con esta tecnología. Surge entonces el proyecto del pupitre digital, con el que se dota a cada alumna y alumno de 4º de primaria en adelante con un tablet PC, siendo el primer centro en España que se dotaba con este tipo de tecnología, hecho que provocó su reconocimiento internacional por parte de Microsoft. El gran éxito de esta iniciativa del CRA, llevó al Gobierno de Aragón a impulsar esta experiencia en otros centros de la región.
El uso de las TICs y la transformación del centro en Comunidad de Aprendizaje provocaron que no sólo fueran los alumnos y alumnas los que avanzaran en conocimientos. El profesorado, los familiares y los vecinos y vecinas de Ariño han tenido la oportunidad de asistir a cursos de formación en este sentido, y participar en el uso de las nuevas tecnologías, concretándose en la actualidad en un elevado índice de utilización de las TICs por habitante en un municipio que parecía condenado al ostracismo y el abandono paulatino, siguiendo el modelo de muchas de las poblaciones rurales del país. Sin embargo, gracias a su apuesta educativa transformadora, Ariño se ha convertido en sí misma en un modelo a seguir por otros pueblos que han sufrido los avatares del éxodo rural y que ahora tienen la posibilidad de integrarse en la Sociedad de la Información.
Hoy en día, fruto de una política de extensión de las TIC a toda la sociedad, el programa Pizarra Digital se encuentra extendido a la práctica totalidad de los centros públicos de Aragón. Además, los resultados del Programa Pizarra Digital están en el origen del diseño del Programa Escuela 2.0 de carácter nacional, que no autonómico, impulsado a través del Ministerio de Educación[27]. Gracias a este tipo de proyectos, la opción de la sociedad de la información para todos y todas se va convirtiendo en un contexto real donde se avanza hacia la igualdad creando las condiciones para superar o disminuir algunas de las más graves desigualdades existentes en la primera fase de la sociedad de la información.
Muestra de esta relevancia de la incorporación de las TICs en Ariño son los datos que proporciona el Instituto Aragonés de Estadística en relación al número de centros educativos de la región que poseen conexión a Internet y el número de ordenadores usados por los alumnos y alumnas con conexión a Internet. Comparando los resultados por Comarcas podemos apreciar que aunque Andorra-Sierra de Arcos, a la que pertenece el municipio de Ariño, es una de las zonas con menos centros educativos (dada su menor densidad demográfica respecto a otras Comarcas), posee un número de ordenadores con conexión a Internet para el uso del alumnado muy superior al de otras localidades que tienen un número de centros educativos muy superior (como pueden ser las Comarcas de Sobrarbe, Ribagorza, Ribera Baja del Ebro, Campo de Cariñena, Cuencas Mineras, o Jiloca).
Cuadro 9.
Número de centros educativos aragoneses
con conexión a Internet por Comarcas.
Número de ordenadores usados por alumnos
con conexión a Internet (curso 2009-2010)
Nº total de centros por comarcas en Aragón |
Centros con |
Nº total de estudiantes |
Ordenadores usados por los alumnos con conexión a Internet |
||
TOTAL |
837 |
506 |
201.524 |
28.132 |
|
1 |
La Jacetania |
17 |
10 |
2.805 |
369 |
2 |
Alto Gállego |
14 |
10 |
2.076 |
317 |
3 |
Sobrarbe |
9 |
6 |
902 |
198 |
4 |
La Ribagorza |
13 |
8 |
1.428 |
311 |
5 |
Cinco Villas |
23 |
14 |
4.445 |
651 |
6 |
Hoya de Huesca |
45 |
26 |
11.444 |
1.285 |
7 |
Somontano de Barbastro |
13 |
10 |
3.413 |
462 |
8 |
Cinca Medio |
16 |
10 |
3.809 |
656 |
9 |
La Litera / La Llitera |
12 |
7 |
2.547 |
301 |
10 |
Los Monegros |
25 |
13 |
2.090 |
326 |
11 |
Bajo Cinca / Baix Cinca |
24 |
15 |
3.549 |
573 |
12 |
Tarazona y el Moncayo |
7 |
6 |
2.170 |
304 |
13 |
Campo de Borja |
15 |
9 |
2.043 |
407 |
14 |
Aranda |
6 |
4 |
994 |
200 |
15 |
Ribera Alta del Ebro |
24 |
15 |
3.731 |
725 |
16 |
Valdejalón |
18 |
12 |
4.433 |
724 |
17 |
D.C. Zaragoza |
367 |
208 |
118.502 |
14.795 |
18 |
Ribera Baja del Ebro |
11 |
7 |
1.009 |
196 |
19 |
Bajo Aragón-Caspe |
12 |
8 |
2.139 |
419 |
20 |
Comunidad de Calatayud |
26 |
16 |
5.134 |
947 |
21 |
Campo de Cariñena |
10 |
8 |
1.212 |
263 |
22 |
Campo de Belchite |
4 |
2 |
391 |
118 |
23 |
Bajo Martín |
7 |
4 |
688 |
179 |
24 |
Campo de Daroca |
8 |
6 |
480 |
110 |
25 |
Jiloca |
10 |
7 |
1.613 |
341 |
26 |
Cuencas Mineras |
9 |
7 |
1.179 |
278 |
27 |
Andorra-Sierra de Arcos |
6 |
4 |
1.615 |
404 |
28 |
Bajo Aragón |
26 |
14 |
4.958 |
938 |
29 |
Comunidad de Teruel |
34 |
22 |
8.219 |
1.254 |
30 |
Maestrazgo |
4 |
3 |
340 |
139 |
31 |
Sierra de Albarracín |
3 |
3 |
331 |
140 |
32 |
Gúdar-Javalambre |
10 |
6 |
902 |
252 |
33 |
Matarraña / Matarranya |
9 |
6 |
933 |
200 |
Fuente: Elaboración propia a partir de datos del IAEST. Instituto Aragonés de Estadística. |
Por tanto, desde principios del presente siglo, el CRA Ariño-Alloza es uno de los centros de educación infantil y primaria que más esfuerzos está invirtiendo en desarrollar una formación adecuada a las exigencias de la sociedad de la información en
todo el Estado Español. Tener la oportunidad de pasear por sus clases es entrar de lleno en un esperanzador futuro. Es un centro acogedor, comprometido con el aprendizaje de las dos comunidades en las que se reparte y completamente sumergido en las herramientas tecnológicas que facilitan y aceleran el aprendizaje de las alumnas y alumnos y crea redes y posibilidades de comunicación para toda la zona.
Figura 6. Aula Autosuficiente del CRA Ariño-Alloza. |
Es frecuente pensar que las personas comprometidas con la superación de desigualdades sociales y territoriales a través de la educación y las TIC, como en el caso de Ariño-Alloza, son voluntariosas pero poco rigurosas. En el ámbito de las ciencias sociales durante los años cincuenta y sesenta se desarrollaron muchos movimientos sociales progresistas que repercutieron en el ámbito social y educativo generando diversas experiencias y políticas de igualdad de oportunidades para todas las personas. Es el caso, por ejemplo, de los movimientos sociales de los colectivos afroamericanos[28].
Al mismo tiempo, desde la academia el estructuralismo marxista[29] negaba la capacidad de los sujetos para superar las desigualdades sociales, lo que supuso un freno a esta transformación. El modelo de la reproducción se alejaba de cualquier alternativa que defendiera la igualdad a través de la práctica ya fuera desde una iniciativa política o desde la participación en experiencias sociales transformadoras a la vez que contribuía a su desmovilización.
Dentro de la sociología de la educación se ha denominado modelo de la reproducción al sostenido a partir de los años setenta por autores como Bourdieu y Passeron[30] Bowles y Gintis[31] o Baudelot y Establert[32], desde el que se afirmaba que la función de la escuela era la reproducción de las desigualdades sociales. En este marco, Bourdieu y Passeron, en su libro la Reproducción[33] explican como la cultura que se ofrece en la escuela es producto de una selección cultural y productora de una selección de los estudiantes. Quienes debido a su posición económica, social y territorial pertenecen a la cultura seleccionada serán los que tengan éxito y los demás serán excluidos.
Samuel Bowles y Herbert Gintis desarrollaron la teoría de la correspondencia en la que establecían una estrecha dependencia de la escuela respecto al sistema de producción. Consideraban que el sistema educativo contribuía a la integración de los y las jóvenes en el sistema económico a través de la correspondencia estructural entre sus relaciones sociales y las de la producción[34]. Esta teoría ha recibido innumerables críticas de economicismo y reduccionismo al ignorar otras formas de exclusión como el sexismo, el racismo o la territorialidad. De esta forma, Bowles y Gintis han tratado de recuperar una cierta validez actual a su ya antigua obra. A finales de los ochenta precisaron que: “nuestros lectores no deben tomar Schooling in Capitalist America como una teoría comprensiva de la escolarización, sino como una teoría de la vinculación entre educación y economía”[35].
Similar orientación siguieron Baudelot y Establet al proponerse hallar una base empírica que corroborara la adecuación del modelo de la reproducción al sistema educativo francés y, por extensión, al de cualquier país capitalista. La encontraron en las redes de escolarización que se exteriorizan a partir de la educación secundaria donde el sistema educativo ofrece diferentes itinerarios para el alumnado pero que ellos descubren que ya empieza esa selección en la misma primaria[36]. Similar orientación siguieron los Bourdieu y Passeron de La reproducción[37].
Más adelante, varios de los autores reproduccionistas se desvincularían de este modelo. Bourdieu, por ejemplo, no quiso que se le valorara por su obra La reproducción, la que él consideraba más estructuralista. Las teorías de la reproducción defienden que la educación no puede generar transformaciones. Sin embargo, los importantes problemas éticos que plantea este modelo no son su única crítica, sino también su falta de rigor científico. Por un lado, no existe un impacto de los resultados de estas teorías en la mejora de las condiciones de vida de los diferentes territorios y colectivos, por lo que podemos afirmar que sus análisis y conclusiones no tienen ninguna utilidad social. Por otro lado, la influencia de estas teorías reproduccionistas fue doblemente contraproducente ya que no solamente desprestigió teorías científicas basadas en el análisis de las realidades transformadoras, sino que también influyó negativamente a iniciativas que buscaban mejorar las condiciones de vida de las personas de zonas territorialmente degradadas o en peligro de exclusión a través de la educación.
Las teorías sociológicas más importantes de la actualidad se alejan de estos enfoques reproduccionistas y se orientan a la transformación territorial, económica y social. Precisamente, lo que diferencia las teorías de la educación reproduccionistas de las que se orientan a la transformación es que mientras las primeras invalidan la utilidad de la educación para superar las desigualdades sociales, las segundas analizan, no sólo cómo se reproducen estas desigualdades, sino también cómo funcionan las prácticas educativas que contribuyen a su superación.
Los estudios actuales muestran cómo a partir de la agencia humana sí es posible mejorar las condiciones de vida y las expectativas en enclaves rurales. Al mismo tiempo que han descalificado a aquellas investigaciones que argumentaban, con errores estadísticos, de diseño de investigación y de metodologías que toda zona pobre y rural estaba destinada a la exclusión y a todo tipo de desigualdades tanto en la misma población como en comparación con otras zonas urbanas.
Precisamente porque es posible transformar el contexto a través de la educación, el CRA Ariño-Alloza es uno de los centros más avanzados del mundo y es un referente a nivel internacional por el éxito obtenido en su incorporación a las nuevas tecnologías en el proceso de aprendizaje. El mismo Bill Gates lo toma como centro de referencia y ejemplo a seguir por la comunidad educativa[38].
Figura 7. Bill Gates con varios alumnos del CRA Ariño-Alloza en
el Foro de Líderes Gubernamentales organizado en Berlín en 2008. |
En el CRA y Comunidad de Aprendizaje Ariño-Alloza a través del programa de Aulas Digitales el alumnado trabaja las asignaturas desde un pupitre digital con conexión a Internet por medio de una red inalámbrica dentro de la red local del centro. Con los Tablet PC los niños y las niñas pueden acceder a Internet y consultar toda la información que necesiten para resolver las actividades de enseñanza y aprendizaje en entornos virtuales. En las aulas todos los ordenadores están conectados en red, de forma que los niños y niñas comparten la información de su tablet PC con otros niños y niñas y resuelven conjuntamente problemas no sólo con sus compañeros y compañeras sino también con estudiantes de otros cursos de la misma escuela e incluso de otros centros. Concretamente, el centro forma parte del proyecto Agrupaciones Escolares financiado por el Ministerio de Educación junto con los centros Agro do Muiño de Ames de la Coruña y Sant Serni de Prats i Sansor de Lérida[39]. En esta iniciativa participa toda la comunidad educativa intercambiando información, realizando trabajos conjuntos y construyendo redes sociales entre los diferentes colectivos de los tres centros a través de las TIC y de los intercambios entre los tres centros. Así, la comunidad del CRA se ha desplazado a Galicia y Lérida y también estos centros han visitado Ariño.
Figuras 8-9-10. Equipamiento
informático del CRA Ariño-Alloza. |
La incorporación de las TIC en la vida diaria del centro ha introducido nuevas formas de comunicación entre el profesorado y el alumnado y entre las familias y la escuela. Estas nuevas formas de comunicación han multiplicado los diálogos y transformado espacios no escolares. El profesorado explica cómo ahora por las noches se conecta al Chat y sus alumnos y alumnas le hacen preguntas sobre los deberes para el día siguiente sobre algún contenido que no han acabado de entender o sobre otros aspectos relacionados con la vida escolar, de forma que la comunicación virtual se convierte en un instrumento más para acelerar los aprendizajes y en una posibilidad para estrechar las relaciones entre el alumnado y el profesorado. Laura una alumna de cuarto de primaria demostraba con su Tablet PC como funciona esta nueva forma de aprender:
cada asignatura tiene una web donde vas colgando todos los ejercicios de la asignatura y el profe va corrigiendo los ejercicios. Nos comunicamos con el correo electrónico y con el Chat. Lo mejor es que puedes conectarte desde casa si no te salen los deberes.
En el CRA Ariño-Alloza comparten entre todos ellos y ellas y con los profesores y profesoras sus trabajos. Son los alumnos y alumnas los que buscan la información a través de buscadores y preparan los power points con los resultados de los trabajos realizados en pequeños grupos. Utilizan la prensa digital para preparar sus debates. El correo electrónico, los grupos de trabajo en red, el blog personal, el blog colectivo, el blog del profesor para la asignatura o la web de cada una de las asignaturas son para la comunidad educativa herramientas cotidianas. Por otro lado, Proyectos como el Periódico escolar Ariniños[40], la radio escolar Sierra de Arcos[41] y la televisión escolar CRA Ariño-Alloza[42] implican a toda la comunidad educativa tanto en su desarrollo y funcionamiento como en el disfrute como receptores de la información que se transmite por tales medios a todo el pueblo.
Contrariamente a lo que pueda parecer, la socialización del alumnado en estas nuevas herramientas y cambios metodológicos es rápida y poco problemática. Como explicaba el director de la escuela de Ariño, la primera vez que tuvieron los chicos y chicas de 4º de primaria un tablet PC en sus manos daba la impresión de que ya lo conocían, como si siempre hubieran estado allí. Seguramente esta impresión estaba provocada por el desconocimiento que tenía el profesorado de esas máquinas. Otra de las profesoras puntuaba como fue esta incorporación tecnológica al centro:
El primer día que llegaron los ordenadores a la escuela de Ariño se formó un gran revuelo de políticos y medios de comunicación que se habían dado cita en nuestro centro. Sin embargo, los niños y niñas de aquel curso de 4º de primaria permanecieron ajenos a todos ellos y rápidamente comenzaron a investigar y utilizar sus tablets PC.
Desde entonces ha aumentado la motivación en todo el alumnado, las ganas de comunicarse, de aprender cosas nuevas y los buenos resultados académicos. Transformar los materiales tradicionales por materiales digitales, encontrar nuevas posibilidades y situaciones para enseñar y aprender, advertir la potencialidad de la presentación multimedia o entender la nueva ubicación como profesores y profesoras de un nuevo concepto de escuela. Como bien apuntaba un docente del CRA Ariño-Alloza en esta línea:
Si seguimos educando a nuestros hijos como nos educaron a nosotros nunca van a encontrar la educación que necesitan porque el mundo ha cambiado mucho y ahora nuestros hijos aprenden mucho más por sí mismos, en Internet, en las redes sociales, con otros compañeros, antes que en el aula.
Por otro lado, es importante destacar que en este proyecto, no sólo el trabajo del profesorado es importante sino que cada vez más es necesaria la implicación de las familias y de toda la comunidad para seguir avanzando en esa “escuela del futuro”. Colaboración e implicación tanto en su propia formación en TIC para ayudar a sus hijos e hijas en este nuevo contexto educativo como en su incidencia en la actividad del centro en todos sus ámbitos (aula, secretaria, creación de materiales,...). De esta forma, las familias, tienen un papel fundamental en la digitalización del centro y también utilizan las TIC para consultar y participar en el forum virtual de la escuela, así como para leer las revistas digitales en las que escriben sus hijos e hijas, como El Lapicero Digital. Confiesan que en muchas ocasiones han sido sus hijos e hijas quienes les han enseñado el uso de las TIC, todas las familias del CRA tienen ordenador en sus casas y prácticamente todos los domicilios del pueblo están conectados a Internet.
Todas las transformaciones que se producen dentro de la escuela y que se generan a través de las interacciones con las TIC tienen un impacto directo en las interacciones y transformaciones que se producen en el contexto más inmediato. El caso de Ariño es un claro ejemplo de cómo el uso dialógico de las TIC y la participación de toda la comunidad en el centro ha contribuido no sólo a aumentar el nivel académico de sus estudiantes sino a transformar una zona rural. Una de las madres explicaba de esta forma el cambio que las TIC y la participación en el centro había supuesto para ellas:
Nosotras también utilizamos el ordenador, hay que ponerse al día. Más bien ellos nos han enseñado a nosotras. Desde que comenzaron todos compramos ordenador y todos tenemos ordenador en casa. Se produce un cambio en casa.
En estos espacios pueden pasar casos como el de madres que aprenden conjuntamente con sus hijos e hijas el uso de las TIC y eso les aporta tanto que a partir de ese aprendizaje inician uno más amplio de formación más general. Por tanto, el sentido que cada persona le encuentre a las TIC puede variar enormemente en función de sus necesidades: la importancia radica en el uso que se le da y cómo se favorecen procesos de transformación social y personal a través de esa utilización. El centro se convierte en un espacio tecnológico en el que mayores y jóvenes se encuentran y en el que precisan una interacción para el objetivo común de aprender sobre tecnologías de la información y la comunicación para usarlas como herramientas de aprendizaje. Así, el alumnado que sabe resolver los pequeños problemas que tiene la tecnología ayuda a los voluntarios y voluntarias y al profesorado a solucionar algunas situaciones que para ellos y ellas pueden resultar complicadas, sobre todo cuando acaban de llegar a la escuela.
Por lo tanto, se consigue una doble finalidad con el uso de las TICs: su empleo diario favorece el aprendizaje práctico de su funcionamiento y manejo y, a su vez, posibilita la adquisición de nuevos conocimientos relacionados con otros campos que sin esta tecnología democratizadora del saber no habría sido posible. En esta línea, las interacciones que se llevan a cabo mediante un diálogo igualitario, democrático, horizontal y en el que todas las personas tienen las mismas posibilidades de intervenir constituyen también la base para el aprendizaje humano y un instrumento fundamental para consensuar acciones comunes en vistas a la superación de desigualdades.
Todas las personas implicadas en este proceso de transformación saben que el cambio se ha iniciado, y que las cosas ya no volverán a ser como antes. Las nuevas tecnologías abren nuevas posibilidades a las familias para participar en la escuela a través de la red. En este sentido, el CRA cuenta con Adivipupi. Se trata de un duende que todo lo ve y que constantemente plantea adivinanzas y actividades de investigación a los más pequeños a través del correo electrónico. Este duende es una madre que desde su casa dedica un tiempo a esta actividad, participando así de forma diferente pero con el mismo sentido en la educación de las niñas y niños. Al realizar esta actividad, el domicilio también ha cambiado; ahora es un lugar desde donde también mejoran el aprendizaje de sus hijas e hijos. Este es un ejemplo de cómo las TIC tienen la capacidad de aumentar la comunicación y participación aunque no dispongamos del tiempo y la cercanía necesarios para estar presentes en algunos espacios.
Las familias que al principio del proyecto eran más críticas, ahora son las más incondicionales y las mejores defensoras. La primera promoción de estudiantes que comenzó con este sistema de digitalización de la enseñanza cuando cursaban 4º de primaria está ya en el instituto cursando bachiller. Las familias están muy contentas con el éxito escolar de sus hijos e hijas. Con el bagaje en Comunidades de Aprendizaje, las chicas y chicos aprenden más, son capaces de resolver situaciones y problemas en el momento y tienen unas competencias y habilidades imprescindibles para desenvolverse en la sociedad actual que les diferencia del alumnado procedente de otros centros de primaria de la zona que también asisten al Instituto situado en la localidad de Andorra. Así, el CRA Ariño-Alloza es conocido por sus éxitos académicos por otros centros donde el alumnado cursa estudios superiores. Según la Evaluación del Programa Pizarra Digital, realizada por el Grupo de Análisis de Políticas Educativas y Formación de la Universidad Autónoma de Barcelona[43], el 27,6% de los alumnos que usan Tablet PC en el aula asegura que han mejorado sus notas académicas. En base a estos resultados sería interesante ahora elaborar un análisis a fondo del impacto socioeconómico y cultural de la introducción de las TICs en los centros educativos del medio rural, tal y como se ha propuesto en el presente estudio de caso.
La imagen del espacio rural también ha cambiado. El CRA de Ariño-Alloza ha pasado de ser un destino más de paso de los tantos que hay en las zonas rurales de Aragón, a ser un lugar en el mundo en el que quedarse a trabajar por un proyecto común en una zona rural aislada. Si bien hasta el momento de las 14 personas que componían el proyecto quedaban como fijas para el curso siguiente un máximo de 5, en la actualidad ya son 8 las que se van a quedar como fijas un mínimo de dos años más. Por otro lado, ya hay muchas maestras y maestros aragoneses que sueñan con poder entrar a formar parte del equipo de Ariño-Alloza, estudiantes de magisterio de Catalunya y Aragón quieren hacer allí sus prácticas, escuelas europeas y de los Estados Unidos piden tener intercambios con el profesorado del CRA. Se ha invertido la tendencia de “pasar por el proyecto” a ser un lugar en el que querer quedarse a trabajar. Estos hechos demuestran cómo la transformación va más allá del propio proyecto educativo e impacta en el territorio rural de Ariño. La incorporación de las TIC en el centro ha cambiado la imagen del centro y del pueblo pasando de ser prácticamente uno de los últimos destinos a elegir por el profesorado a ser un centro deseado para trabajar en él. Por otro lado, la imagen del pueblo al exterior ha pasado de conocerse por un lugar degradado y condenado a la exclusión e incluso a su desaparición a ser ahora un lugar referente en el uso y acceso a las nuevas tecnologías por su población y al que se quiere conocer. Mientras antes eran un pueblo desconocido, ahora son a menudo noticia en los medios de comunicación y reciben visitas de intelectuales de diferentes partes del mundo. Incluso tienen voluntariado de Estados Unidos que participa en las aulas a través de Skype. Las familias son muy conscientes de estas transformaciones y éxitos. En palabras de una madre, mientras antes eran un pueblo olvidado de Teruel, ahora todos les conocen:
Recibimos muchas visitas de investigadores, de profesores y de políticos que quieren conocer nuestra experiencia directamente y a nosotros también nos llaman de diferentes lugares para que expliquemos como es nuestro proyecto. También hemos salido en la televisión en reportajes del centro y del pueblo. Todos nos conocen.
En definitiva, experiencias como la del CRA Ariño-Alloza están demostrando día a día que las TIC ayudan a superar el aislamiento y la incomunicación en zonas en mayor riesgo de sufrir esos procesos.
Para concluir
La presencia de las TIC en las aulas de secundaria y de primaria de los centros educativos españoles, en contextos urbanos y rurales, es ya una realidad cotidiana. Como se ha visto en el presente artículo, el CRA Ariño-Alloza ha sido un centro pionero en su proceso de implementación haciendo llegar la sociedad del conocimiento a una comunidad alejada de las grandes ciudades, con un pasado industrial y de aislamiento relevante. El proceso vivido en el CRA ha permitido reducir la brecha digital que viven este tipo de zonas, pero es importante apuntar en estas conclusiones las claves que han hecho este éxito posible. No ha sido la tecnología por sí sola.
El enfoque dialógico y comunitario, a través del proyecto Comunidades de Aprendizaje, ha acompañado la transformación de la escuela de Ariño-Alloza todos estos años y es precisamente esto lo que ha facilitado que las TIC hayan tenido tanto calado, no exclusivamente en el alumnado, sino también en los dos pueblos que forman parte del CRA y en todo el territorio. La formación tecnológica de los familiares, la conexión a internet en las casas, la presencia de voluntariado internacional, la participación de los padres, madres, exalumnos y alumnas, vecinos y vecinas de los pueblos en las decisiones y los espacios de aprendizaje son ejemplos de los mecanismos a través de los cuales se ha contribuido desde una particular inclusión de las TIC en la escuela a la reconversión y desarrollo de ambas zonas de Teruel. Los familiares, profesorado y voluntariado que se implican y participan de las actuaciones de éxito del proyecto acaban adquiriendo más conocimientos sobre las tecnologías que luego aplican al ámbito profesional y personal. Ello permite una mejora laboral y facilita que se genere un clima de aprendizaje en las casas que promueve la aceleración de los aprendizajes tanto de estudiantes como de sus familiares. En este sentido, los datos sobre centros escolares con ordenadores con conexión a internet de la comarca donde se ubica el CRA indican que la comarca es una de las zonas con mejores referencias[44]. Por lo que respecta al alumnado, cabe señalar también la preparación de calidad de los chicos y chicas cuando llegan a los centros de secundaria correspondientes que les permite ser quiénes mejores cualificaciones obtienen. Además, como hemos observado en las citas textuales de los familiares, son las y los estudiantes los que también han fortalecido el aprendizaje de las TIC en toda la zona ya que han enseñado su manejo a las familias, vecinos y vecinas.
Es todo este trabajo basado en la participación de todos y todas lo que ha permitido cosechar este impacto del proyecto que el CRA Ariño-Alloza inició a finales de los 90. Dado sus resultados, el CRA fue seleccionado en 2008 por el Foro de Líderes Gubernamentales que Microsoft organizó en Berlín sobre Educación y Economía. Representantes del CRA explicaron y demostraron cómo utilizan en su escuela el tablet PC quedando claro no sólo que esta experiencia se ha convertido en un referente en todo el mundo en el uso de las TIC, sino también que es posible transformar un territorio rural, su imagen y vida a través de un proyecto educativo basado en la tecnología y que implica a toda la comunidad. Así mismo, los resultados conseguidos han tenido efectos en otros enclaves rurales en riesgo de exclusión a través del desarrollo de políticas basadas en los éxitos conseguidos en Ariño-Alloza. Sin ir más lejos, en el año 2008 la Consejería de Educación del Gobierno de Aragón, dentro del programa “Pizarra Digital” aprovisionó con casi 3.000 Tablet PC los colegios de 122 localidades rurales de la Comunidad Autónoma, e impulsó la formación de los más de 2.000 profesores de éstos y otros centros en las nuevas tecnologías[45].
Notas
[1] Información extraída de la página web del Proyecto Comunidades de Aprendizaje<http://www.comunidadesdeaprendizaje.net>.
[2] Albaine, 2008.
[3] Escalona y Díez, 2005.
[4] Castells, 1999.
[5] Información extraída de las páginas web <http://arino.deteruel.es/InternetRural/arino/home.nsf/documento/economía> <http://www.diariodeteruel.es/bajoaragon/12369-el-centro-de-interpretacion-del-arte-rupestre-de-arino-reabrira-sus-puertas-a-finales-de-2011.html> <http://www.lacomarca.net/index.php/index.php?option=com_content&view=article&id=4562:el-balneario-de-arino-afronta-a-principios-de-mayo-su-quinta-fase&catid=82:andorra-sierra-de-arcos&Itemid=459>
[6] Información extraída de la página web <http://craarino.educa.aragon.es/weduca/>
[7] Información extraída de la página web <http://www.ine.es/inebmenu/mnu_cifraspob.htm>
[8] Información extraída de la web del IAEST: <http://www.aragon.es/DepartamentosOrganismosPublicos/Organismos/InstitutoAragonesEstadistica/AreasTematicas/Demografia/PadronMunicipalHabitantes/ci.18_Extranjeros_empadronados.detalleDepartamento?channelSelected=448c2135fc5fa210VgnVCM100000450a15acRCRD>
[9] Collantes, Pinilla y Sáez, 2010.
[10] Collantes, Pinilla y Sáez, 2010.
[11] Aubert et al. 2008.
[12] A partir de ahora, Centro Rural Agrupado será sustituido por las siglas CRA, y su plural, Centros Rurales Agrupados, será sustituido por las siglas CRAs.
[13] (BOE 9/1/87).
[14] Gómez, 2007.
[15] Información extraída de la página web del centro <http://adigital.pntic.mec.es/~arino/>
[16] Castells et al., 1999.
[17] Caravaca y González, 2009.
[18] Año 2009.
[19] Bustos, 2010.
[20] Santos, 2002; Berlanga, 2003; Boix, 2004; Bustos, 2006.
[21] Lorenzo y Santos, 2004.
[22] Bernal, 2004.
[23] Bustos, 2009.
[24] Borrás, 2010.
[25] Bustos, 2010.
[26] García et al., 2010.
[27] Información extraída del la página web del Departamento de Educación, Cultural y Deporte del Gobierno de Aragón <http://www.catedu.es/Escuela20_Primaria/>
[28] Santa Cruz, Flecha y Serradell, 2009.
[29] Althusser, 1970; Althusser y Balibar, 1969.
[30] Bourdieu y Passeron, 1977.
[31] Bowles y Gintis, 1988.
[32] Baudelot y Establert, 1976.
[33] Bourdieu y Passeron, 1977.
[34] Bowles y Gintis, 1988.
[35] Bowles y Gintis, 1988, p. 236.
[36] Baudelot y Establet, 1976.
[37] Bourdieu y Paseron, 1977.
[38] Microsoft, 2010.
[39] Información extraída de la página web <http://agrupacionescolar.blogspot.com/>
[40] Periódico escolar del alumnado del CRA Ariño-Alloza <http://arininos2.blogspot.com/>
[41] Radio escolar <http://radioescolarsierradearcos.blogspot.com/>
[42] Televisión escolar <http://craarinotelevision.blogspot.com/>
[43] Grupo de Análisis de Políticas Educativas y Formación de la Universidad Autónoma de Barcelona, 2010.
[44] Ferrer, 2010.
[45] Información extraída de la página web EducarC <http://educarc.blogcindario.com/2008/01/01864-aragon-aprovisiona-con-3-000-tablet-pc-a-colegios-de-122-localidades-rurales.html>
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© Copyright Carmen Elboj Saso, Miguel Ángel Pulido
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Nova, 2013.
Ficha bibliográfica: