REVISTA ELECTRÓNICA DE GEOGRAFÍA Y CIENCIAS SOCIALES Universidad de Barcelona ISSN: 1138-9788. Depósito Legal: B. 21.741-98 Vol V, nº 102, 1 de diciembre de 2001 |
Instituto de Geografía de la Academia de Ciencia
de Rusia (Moscú)
GEODE UMR 5602/CNRS
Université de Toulouse-Le Mirail (France)
La Ciencia del Paisaje nació en Rusia a finales del siglo XIX y principios del XX. Su especificidad es debida tanto al original desarrollo de la geografía rusa como a la historia de la apropiación de "tierras vírgenes" por parte del Estado Ruso.
¿Cómo y porqué aparece el concepto de paisaje en Rusia? ¿Cómo han contribuido las grandes escuelas de geografía rusa a la evolución de la noción de paisaje? ¿Cuales son los problemas epistemológicos de esta nueva concepción?
El objeto de este artículo es mostrar la epistemología de los modelos geográficos del paisaje en el contexto de las condiciones culturales, sociales y políticas de Rusia entre los años 1860 y 1920.
Palabras clave: Ciencia del paisaje, epistemología, geografía, Rusia.
The Landscape's science in the Russian Geography (Abstract)
The Landscape' science has appeared in Russia between the end of the XIXth and the beginning of the XXth century. Its specific features were determinated both by the original development of the Russian geography and by the history of appropriation of the « virgin lands » by the Russian State.
How and why has appeared the concept of landscape ? How has contributed the schools of Russian geography to the evolution of the notion of landscape ? In what do consist the epistemological problems of this new conception ?
This article deals with the epistemology of the geographical models of landscape in the contexts of cultural, social and political conditions of Russia in the years 1860-1920.
Key-words: epistemology, geography, Landscape' science, Russia.
La Science du paysage est née en Russie entre la fin du XIXe début du XXe siècle. Sa spécificité s'enracine à la fois dans le développement original de la géographie russe et dans l'histoire de l'appropriation des « terres vierges » par l'Etat Russe.
Comment et pourquoi apparaît la conception de paysage en Russie ? Comment les grandes écoles de géographie russe ont-elles contribué à l'évolution de la notion de paysage ? Quels sont les problèmes épistémologiques de cette nouvelle conception ?
L'objet de cet article est de montrer l'épistémologie des modèles géographiques du paysage dans le contexte des conditions culturelles, sociales et politiques de Russie entre les années 1860-1920.
Mots-clés: épistémologie, géographie,
science du paysage, Russie.
La Ciencia del Paisaje aparece en Rusia a finales del siglo XIX y principios del XX, en la época de las primeras reflexiones sobre el paisaje como método geográfico de estudio del medio. Varios factores participaron en la formación de la Ciencia del Paisaje en Rusia: la necesidad de estudiar vastas extensiones de territorios poco habitados, las grandes expediciones, la participación activa de militares e ingenieros en las investigaciones geográficas, la inspiración de los naturalistas rusos por las ideas de la Natur Philosophie del siglo XIX, las perturbaciones políticas y la influencia de la ideología marxista en el siglo XX. La compleja historia de la apropiación de nuevos territorios por parte de los rusos, ligado a los factores políticos, geográficos y culturales de esa época, abocaron al nacimiento de una actitud específica de los científicos rusos en torno a la naturaleza. En efecto, la geografía rusa se desarrolló bajo la fuerte presión de la necesidad de colonizar vastos espacios, a la vez próximos y marginales, tales como Siberia, los Urales, el Caúcaso, etc., teniendo en el centro de este dispositivo la conquista de la naturaleza.
Será a finales del siglo XIX, en el apogeo de esta apropiación del territorio, cuando se constituye una nueva concepción geográfica, en cuyo núcleo se encuentra la noción de paisaje (Frolova. 2000a). Los albores del siglo XX marcaran una gran ruptura en la visión que tienen del paisaje los geógrafos y naturalistas rusos. Esta ruptura fue precedida por importantes cambios en el interior mismo de la geografía. A lo largo del siglo XIX, la geografía, surgida por el cruce de diversas prácticas -las exploraciones militares, las experiencias de viaje y descripciones estadísticas-, se afianza como disciplina universitaria (1).
Hay que decir que en los trabajos de los geógrafos rusos, la noción de paisaje surge fundamentalmente, y en primer lugar, en el contexto de la elaboración de nuevos métodos para la división regional. El desarrollo de ésta nueva concepción se realiza simultáneamente a la evolución del sistema de división territorial, que, desde el último tercio del siglo XIX, se convierte en una de las ocupaciones principales de los geógrafos rusos.
En la segunda mitad del siglo XIX, a las divisiones administrativas y topográficas arbitrarias se opone la idea de definir como principio de análisis de la realidad geográfica las diferencias geológicas y geomorfológicas, los contrastes biogeográficos, de los suelos y de los climas. Así, los elementos naturales, según la corriente determinista del siglo XVIII, se convierten en el fundamento de la delimitación del cuadro espacial de los estudios regionales. La noción de paisaje se encuentra, desde los inicios del siglo XX, en el centro de estos estudios.
La cientificación del paisaje llegará más rápido en Rusia que en la mayoría del resto de países europeos. Así, por ejemplo, en Francia a partir de finales del siglo XIX se constituye la geografía antropocéntrica caracterizada por la "aprehensión de la parte visible" (Robic. 1995) (2). La geografía francesa, ligada en sus orígenes a la historia, se desarrolla como disciplina universitaria y académica (3), pero en Rusia la geografía se constituye, a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX, como una ciencia práctica. Hay que decir que, igualmente, esta orientación pragmática es propia también de ciertas corrientes geográficas formadas durante los primeros decenios del siglo XX en Alemania y los países anglosajones. No obstante, en las geografías alemana y anglosajona estas corrientes coexisten con los estudios del paisaje cultural (Kulturlandschaft o cultural landscape). A pesar de que en la geografía francesa la noción de paisaje cultural no se desarrolla de la misma manera, los estudios geográficos en Francia están marcados por un profundo interés en las condiciones concretas de la evolución de la cultura material o nacional (Roncayolo. 1986).
En Rusia esta dimensión cultural de la geografía esta menos acentuada. Como consecuencia de las investigaciones sobre medios eficaces para la gestión de los inmensos espacios y de la rápida creación de cartografía, tanto la geografía rusa como la alemana intentarán sustituir el estudio de las relaciones funcionales por la de datos fisionómicos (Rougerie, Béroutchachvili. 1991) (4). Los científicos rusos, desarrollando la lógica de investigación geográfica propuesta por A. Humboldt, continúan reflexionando sobre el paisaje como objeto específico del estudio geográfico cuya función es la de abordar la relación universal existente entre los diversos elementos del medio y su subordinación en el espacio.
Será durante los años 1880-1920 cuando se asientan las bases de la nueva ciencia geográfica que será llamada, en Rusia en el siglo XX, Landschaftovédenie o Ciencia del Paisaje (5). Esta ciencia surge como resultado del esfuerzo por unir dos ideas: de una parte, la de discontinuidad del medio, fruto de su estructura pluridimensional, y, por otra, la de su continuidad y su unidad en el espacio y en el tiempo (Mijeiev. 1997). Para definir el objeto de estudio de esta ciencia, el paisaje, los rusos utilizaron la palabra alemana Landschaft. El paisaje, presentado como un grupo de objetos y de fenómenos que se repiten regularmente sobre la superficie terrestre, estará ligado a la vez a los hechos "visibles", que remontan a la experiencia común de la observación -el punto de partida de las descripciones geográficas tradicionales-, y a la aprehensión de fenómenos inaccesibles a la intuición del hombre, como, por ejemplo, la organización estructurada del espacio geográfico. La esencia objetiva del paisaje, escondida detrás de las formas percibidas por el ojo del observador, se constituirá progresivamente como centro de la investigación geográfica. Así es cómo los geógrafos rusos descubren, entre finales del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX, los nuevos componentes del paisaje, como, por ejemplo, el suelo. Estos componentes no entraban en el cuadro de la antigua concepción del paisaje, ligada a la visibilidad.
A diferencia del paisaje de Humbold, el Landschaft de los geógrafos rusos adquieren cada vez más los rasgos del modelo científico abstracto, que se aleja progresivamente de la representación sensible del paisaje. El paisaje será cada vez más objetivo, sobre todo bajo la influencia de la doctrina marxista que va a dominar en Rusia desde 1917. No obstante una contradicción se oculta en el centro mismo de la noción de paisaje, que es a la vez objeto de la realidad espacial y sujeto de la percepción. Esta dualidad va a dar lugar, en el siglo XX, a contínuas discusiones entre los geógrafos sobre su definición, sobre la morfología de su estructura y sobre sus métodos de estudio.
¿Cómo aparece la concepción del paisaje geográfico
en Rusia? ¿Cómo las grandes escuelas de la geografía
rusa han contribuido a la evolución de la noción de paisaje?
Para responder a estas cuestiones hace falta remontarse al periodo de constitución
de los primeros enfoques científicos del paisaje en Rusia.
Orígenes de la concepción del paisaje (años 1860-1880)
En el transcurso de los últimos decenios del siglo XIX el estatus de la geografía y de los geógrafos en el estudio de Rusia cambió bastante. La geografía en Rusia cada vez estaba más orientada hacia las Ciencias de la Tierra. Los años 1860-1890 corresponden en Rusia al surgimiento de nuevas bases de la lectura geográfica del espacio y también del tiempo. Siguiendo los principios de la escuela alemana de la descripción geográfica comparativa, propuesta por Alexander von Humboldt y Carl Ritter, los geógrafos intentan englobar la realidad geográfica, natural y humana, en un doble sentido, espacial y metodológico. Como en Francia, las fuentes de esta nueva geografía se remontan a las experiencias heredadas de épocas precedentes (Roncayolo. 1986): a los libros de viajes y de las expediciones científicas, a las descripciones utilitarias de los militares, ingenieros, geólogos y médicos, y a la estadística. Estos estudios serán completados, en el siglo XIX, por los estudios económicos y agronómicos organizados por la Sociedad Económica Libre.
Los años 1860-1890 se convertirán, por segunda vez después de la época de las Expediciones Académicas (6), en la época de apogeo de las investigaciones geográficas, que coinciden con un periodo de importantes transformaciones económicas y sociales en Rusia. Los años 1860 fueron en Rusia una época de grandes cambios: en 1861 Alexandre II abolió la esclavitud, que aún afectaban a un tercio de la población campesina, y también realiza reformas en la vida social. Por un lado, los campesinos liberados tienen necesidad de tierra para cultivar. Por otro lado, la anexión, a lo largo del siglo XIX, del Cáucaso y del Asia Central ofrece un campo inmenso para la colonización. Esta es la razón por la que esa época estuviera marcada por la apropiación de nuevos recursos y de nuevas tierras. El Estado inició no solamente la colonización y siembra de cultivos tradicionales en las zonas anexionadas, sino también favoreció el desarrollo del cultivo de algodón en Asia Central y en la Transcaucasia, por lo que se necesitó realizar trabajos para la puesta en regadío de estas tierras. La realización de todas estas múltiples reformas se hicieron al mismo tiempo que el cambio de carácter de los estudios geográficos. La descripción estadística es progresivamente reemplazada por una investigación más especializada y aún más orientada sobre la práctica, centrándose sobre los problemas del desarrollo de la agricultura, del comercio y de la industria.
Las reformas no fueron siempre eficaces y son mal aceptadas por ciertas clases de intelectuales revolucionarios. La situación económica en Rusia se complica por desastres climáticos y malas cosechas. Así pues, desde los años 1860-1870, los geógrafos comienzan a desempeñar un importante papel (como anteriormente geólogos, botánicos y militares) en la investigación sobre los medios eficaces para resolver los problemas económicos del país y la puesta en valor desde un punto de vista científico de los vastos espacios todavía poco estudiados, en particular de las estepas de Ucrania y de Siberia meridional, y de regiones del Cáucaso y del Asia Central. La Sociedad Económica Libre lanza un programa de investigación para evaluar los recursos naturales del sur de Rusia, que será realizado durante los años 1880-1890 por numerosas misiones científicas. Así, la geografía pasa gradualmente de una disciplina que se basa esencialmente en la estadística descriptiva (7) a otra que engloba los diversos hechos del espacio desde un punto de vista más sintético.
Durante los años 1860, la estadística descriptiva todavía supone un enfoque importante de la información geográfica pero ésta empieza a diferenciarse. Ya no se reduce solo a una descripción global sobre las condiciones naturales y humanas de las diferentes regiones de Rusia. En 1863, se creó el Comité estadístico central bajo la dirección del geógrafo P.P. Semionov Tian-Chanski. Las estadísticas que demanda este Comité se especializan: en lugar de grandes trabajos descriptivos que conciernen a todos los aspectos de los territorios, aparecen trabajos regionales realizados por departamentos especializados (Departamento forestal, Departamento de mejora de suelos, etc.). Al mismo tiempo, la Sociedad Geográfica y la Sociedad Económica Libre organizan grandes expediciones destinadas a resolver problemas ligados a la puesta en valor del territorio, a través de estudios polivalentes del medio. Hay que señalar que la Sociedad Imperial de Geografía continúa las investigaciones de carácter naturalista, llevadas a cabo anteriormente por la Sección geográfica de la Academia, y representa la geografía "oficial", determinista y "fatalista" (Orain. 1996). Paralelamente, existe otra geografía que se orienta hacia la aprehensión del lugar del hombre en la naturaleza, cuyo promotor es, entre otros, la Sociedad Económica Libre que centra su actividad sobre los estudios político-económicos y agronómicos del país (V.V. Dokuchaiev y A.I. Voieykov están entre sus miembros). Curiosamente, la concepción de paisaje (Landschaft) que cristalizada en el seno de esta segunda geografía, se convertirá en una encarnación del determinismo geográfico en el siglo XX.
Paralelamente, la geografía rusa evoluciona bajo la influencia de nuevas ideas venidas de Europa. La sistematización de los datos recogidos en varias expediciones organizadas durante los años precedentes y el nuevo punto de vista sobre la realidad espacial suponen un progreso importante en las investigaciones geográficas. Este cambio en la concepción geográfica aparece ya en los trabajos de P.P. Semionov Tian-Chanski que desarrolla en Rusia las ideas de la geografía comparada (8). Semionov se apoya en gran manera sobre las concepciones de la geografía alemana, a la que otorga mucha importancia: conoce personalmente a Ritter y le considera como su maestro; al mismo tiempo también es influenciado por Humboldt, cuyos obras analiza minuciosamente. Después de haber traducido la Geografía de Asia de Ritter al ruso (1856), Semionov enriquece esencialmente la concepción de su "maestro" de la Ciencia de la Tierra comparativa y el programa de estudios descriptivos de las relaciones entre la naturaleza y las poblaciones de diversos países. Contrariamente a Ritter, Semionov concibe la geografía como una ciencia práctica, que puede servir a las necesidades del hombre (9).
De manera diferente a la escuela de geografía "cameral" de Ritter, la escuela geográfica rusa se desarrolla sobre la base de un conocimiento práctico del terreno, siguiendo las tradiciones de las Expediciones Académicas. Intentando resolver la contradicción entre explicación y descripción, Semionov distingue ya dos tipos de ciencias geográficas: geografía general, cuya concepción es tomada de la Erdkunde de Ritter y "geografía en sentido restringido". Mientras que la primera estudia el carácter general de la distribución de fenómenos geográficos sobre la superficie terrestre, la segunda describe sus particularidades regionales y la influencia del hombre sobre el medio. Atribuyendo una gran importancia a la división regional a partir de criterios geográficos y económicos, desecha las bases de la rama particular de la geografía que será llamada más tarde "regionalización" económica.
Fiel al espíritu del enciclopedismo que domina todavía en la geografía, dirige la edición de varias obras geográficas populares: Diccionario geográfico y estadístico del Imperio Ruso (1863-1885), La Rusia pintoresca… (1881-1885) (10), etc. Todas estas obras son concebidas como libros pluridisciplinares. Es por ello que Semionov invita a geólogos, biólogos, etnólogos, historiadores, economistas, estadísticos, etc., para escribir capítulos consagrados a los diferentes aspectos de la fisionomía del país.
Aún más importante, para el desarrollo de la geografía rusa, será la influencia de las escuelas geográficas de Anuchin y de Dokuchaiev, formadas en este mismo periodo. Estas escuelas propusieron ya métodos más concretos de investigación y definirán el paisaje (con nombres diversos) como objeto integrador de la geografía. La primera escuela se forma en el seno de la Sociedad Imperial de amigos de las Ciencias de la naturaleza, de la Antropología y Etnología de Moscú, fundada en 1863. Su promotor, el primer doctor en geografía de Rusia, D.N. Anuchin orienta progresivamente la geografía en Rusia hacia el estudio geomorfológico y crea una escuela denominada "regiones morfológicas". Este autor afirma que los objetos particulares de la geografía física son las esferas que envuelven la Tierra y sus interrelaciones (Anuchin. 1912, 1949). Por tanto, él propone centrar el estudio geográfico sobre las leyes físicas de la evolución de la superficie terrestre y sobre la historia de la formación de los objetos y de los fenómenos geográficos. Igualmente trabaja sobre la instrucción geográfica y sobre los problemas de la cartografía relacionando las características del relieve actual con el análisis del mapa hipsométrico de Tillo. Formado a la vez como zoólogo, antropólogo y geógrafo, él estaba no obstante persuadido de que cada ciencia tiene sus objetos, fines y métodos particulares de estudio, e insiste sobre la delimitación de la geografía como ciencia. Anuchin propone refusar las investigaciones de carácter enciclopédico llevadas a cabo en otros países por los geógrafos: Rusia está relativamente bien explorada, no se trata más de descubrir geográficamente nuevas tierras. Por el contrario, hace falta profundizar en el estudio de aspectos específicamente geográficos de las regiones de Rusia. Según él, el estudio de las diversas regiones del país debe ser más especializado. Considera a la geografía no como "conglomerado de ciencias variadas de la Tierra", sino como una ciencia independiente y sintética (citado por Abramov. 1972).
Anuchin utiliza mucho el método de comparación geográfica, tomado de las concepciones de la geografía alemana(11), prestando especial interés a la historia de la formación de los objetos y fenómenos naturales y sus relaciones de causalidad. Hay que señalar que desde 1884, Anuchin es el director de la primera cátedra de geografía y etnología fundada ese año, dentro de la Facultad de historia y de filología de la Universidad de Moscú (12), lo que refuerza la influencia de sus ideas sobre la geografía rusa.
Constatamos, por tanto, siguiendo a O. Orain (1996), que Anuchin no dejó tras de sí un modelo epistemológico constante, como lo hicieron los fundadores de otras escuelas geográficas. Su concepto de la geografía, todavía frágil como disciplina, se muestra contradictorio: a pesar de sus intentos por redefinir los objetos de la geografía, él mismo tiene dudas de su independencia como disciplina. Ello lo atestigua N. Dronin en su libro Evolución de la concepción de paisaje en la geografía rusa y soviética (1999). Este autor cita a algunos contemporáneos de Anuchin que afirman que las obras de este gran geógrafo tenían más un carácter analítico y crítico que constructivo o doctrinario. Igualmente, O. Orain (1996) escribe que Anuchin aparece más bien como un letrado, un hombre de despacho, dotado de un remarcable espíritu de síntesis y de difusión, que como un fundador de una verdadera escuela geográfica.
La tercera corriente geográfica rusa formada durante este mismo periodo es la de Vasili Vasilieviich Dokuchaiev, mineralogo de formación, profesor de la Universidad de Moscú. La escuela geográfica de Dokuchaiev tendrá un lugar muy específico en la evolución de la geografía rusa. Esta escuela se desarrolla en los ámbitos de geólogos y agrónomos y se apoya sobre dos fuentes científicas. En primer lugar, Dokuchaiev parte, en sus reflexiones, de la idea filosófica extendida en el siglo XIX de que la Naturaleza es unica, continua e indivisible. En segundo lugar, es el análisis de la práctica agrícola, que le llevará a cuestionarse el rol del suelo en los sistemas territoriales, que él considera, por primera vez, como particular cuerpo natural.
El nacimiento de este nuevo punto de vista de la realidad geográfica está íntimamente ligado al carácter mismo de los problemas que Dokuchaiev busca solución (Valebni. 1998). Él hace este descubrimiento durante sus expediciones, organizadas por la Sociedad Libre Económica y por el Departamento Forestal, después de las sequías devastadoras de los años 1877-1878 que afectaron a 29 provincias de la Rusia europea y que fueron seguidos de malas cosechas y hambrunas. En 1882, se envía una expedición a las estepas del sur para comprender las razones de la regresión de los bosques y del empobrecimiento de los suelos. El profesor Dokuchaiev, formado en el seno de la Facultad de Geología y Mineralogía de la Universidad de Moscú, investiga las razones de la ineficacia de los procedimientos agrícolas en las estepas de las tierras negras. Las graves consecuencias de la sequía le hicieron reflexionar sobre las medidas de prevención de los efectos de las catástrofes naturales sobre las cosechas.
Apoyándose en los fenómenos observados en las estepas, propone una teoría revolucionaria que consiste en considerar el suelo como un objeto distinto que se desarrolla en un proceso de interacción entre los componentes abióticos y bióticos de un complejo espacial, y también del hombre (13). Por otra parte, se cuestiona la aproximación histórica de los suelos y de las zonas geográficas en general. Para Dokuchaiev, el suelo es a la vez un cuerpo natural e histórico, cada zona geográfica representa igualmente la región genética, es decir, formada en el transcurso del proceso histórico, donde hace falta estudiar la variabilidad de la naturaleza en el tiempo y en el espacio. Esta nueva aproximación esclarece las interacciones entre vegetación, relieve, geología, clima y la actividad humana y orienta la geografía rusa hacia el análisis sintético del paisaje y de la historia de su formación.
Dokuchaiev expone esta concepción, por primera vez, en su artículo
Zonas
pedológicas verticales y horizontales del Caucaso en 1898 (1948,
p. 11):
Generalmente se estudia los cuerpos separados -minerales, rocas, plantas y animales- y los fenómenos o los elementos separados -fuego (vulcanismo), agua, tierra, aire […], pero no se estudia nunca sus relaciones genéticas, permanente […], que existe entre las fuerzas, los cuerpos y los fenómenos de la naturaleza, entre la naturaleza muerta y viva, entre los reinos vegetales, animales y minerales, de un lado, y el hombre, su vida material y espiritual, por otro. No obstante son estas relaciones e interacciones regulares que representan la esencia de la comprensión de la naturaleza, el núcleo de la verdadera filosofía - el "interés" superior de las ciencias de la naturaleza.
Es importante señalar el hecho que Dokuchaiev no haya empleado
el término Landschaft para materializar este enfoque (Nikolaiev.
1996). No obstante sus ideas fueron asumidas, en el siglo XX, no solamente
en los trabajos de sus discípulos (G.N. Glinka, A.N. Krasnov, G.F.
Morozov, G.I. Tanfiliev, V.I. Vernadski, G.N. Vysotski), sino también
en varias investigaciones físico-geográficas llevadas a cabo
en Rusia.
Desarrollo de la teoría de paisaje en la Rusia prerevolucionaria
Los historiógrafos de la geografía rusa no interpretan de la misma manera la cuestión del nacimiento de la ciencia del paisaje. La mayoría pone el acento en el nexo que existe entre la teoría del paisaje y la concepción de las zonas geográficas de Dokuchaiev. Algunos insisten sobre la importancia primordial para la geografía rusa de las ideas de A. Hettner (14). La diferencia entre la visión del paisaje de la escuela de Dokuchaiev y la de Hettner es con frecuencia presentada de la siguiente manera: según la concepción tomada de la geografía alemana, el paisaje es un complejo territorial único en su género ("región natural"), continuo (15), pero heterogéneo en el interior (visiónregionalista); según las ideas del edafólogo ruso, el paisaje puede ser estudiado como un tipo de complejo territorial, homogéneo en el interior, pero discontínuo (16) (enfoque tipológico) (Sujova. 1981). Esta oposición de escuelas nos parece injusta ya que durante toda la historia de la evolución de la Ciencia del Paisaje se ha asimilado tradiciones científicas diferentes.
En los años 1890, las revistas rusas publicaron algunos artículos cuyos autores (17) señalan que la geografía es una ciencia que estudia la distribución espacial de los fenómenos terrestres. En el transcurso de los años 1890-1910, aparecieron varias obras que reflexionan sobre la noción de paisaje. Sus autores se apoyan sobre observaciones hechas en las regiones poco habitadas de latitudes medias. En 1895, el botánico y geógrafo A.N. Krasnov propone estudiar las "especies" y los "géneros" de los "complejos geográficos" cuya formación resulta de las particulares conbinaciones de climas, relieves, de procesos geodinámicos y de la vegetación (1895, p. 5). En 1904, el discípulo de Dokuchaiev, G.N. Vysotski, que hace sus investigaciones en las estepas, propone como objeto de investigación físico-geográfica los ecotopos.
Una de las primeras obras que proponen una visión del paisaje próximo de la teoría paisajística que dominará en la geografía rusa durante los años 1930-1990 es el artículo de A.A. Kruber Las regiones físico-geográficas de la Rusia europea (1907). Su autor señala que la geografía estudia la superficie terrestre desde el punto de vista de las diferencias espaciales entre sus fenómenos, que se manifiesta en el paisaje. En este sentido, Kruber remarca que la división regional debe tener en cuenta no solamente los elementos naturales de las regiones estudiadas sino también "las particularidades de sus condiciones culturales, etnográficas y de vida, en definitiva de su pasado histórico" (1907, p. 163). No obstante su esquema de división regional es físico-geográfico por excelencia y muy determinista. Esto lo justifica por el hecho que en Rusia "el nivel cultural es bastante bajo […] es por ello que los límites regionales dependen, en mayor parte, por las condiones físico-geográficas […] El hombre se adapta [en Rusia] a la naturaleza" (Idem., p. 164).
Un año mas tarde, A.A. Borzov, apoyandose en el esquema de división territorial de Rusia propuesta por Kruber, desarrolla la concepción del complejo natural territorial. En su obra Marcos geográficos de Rusia (Borzov. 1908), donde se refiere a los trabajos de E. Reclus, F. Ratzel y A.N. Krasnov, afirma que la geografía es una ciencia de los paisajes, que son a la vez conjuntos de elementos físicos y los "marcos" armoniosos de la naturaleza.
Finalmente, en 1913, Lev Semionovich Berg propone, en su artículo Ensayo de la división de Siberia y Turkestan en regiones paisajísticas y morfológicas (Berg. 1913), la primera definición científica de paisaje. En su obra posterior Objeto y problemas de la geografía (Berg. 1915) muestra el paisaje como un objeto integrador de la geografía, que marca su especificidad en relación a otras disciplinas y representa la finalidad de sus estudios. Desarrollando ideas similares a las de Dokuchaiev y a la concepción cronológica de A. Hetter, él propone, como objeto de estudio geográfico, las unidades espaciales de escalas diferentes (del paisaje a la zona geográfica). Así, la geografía, como afirma, L.S. Berg, encuentra su objeto (el paisaje o Landschaft) y su método (la regionalización).
Eligiendo para su concepción la palabra de origen alemán Landschaft, Berg definía el paisaje como una región en la que las particularidades del relieve, clima, aguas, suelo, de la vegetación y de la actividad humana están organizados en un conjunto geográfico armonioso, según un modo que puede repetirse en el interior de una misma zona geográfica.
Durante los años 1914-1918 los discípulos de Dokuchaiev
-botánicos y pedólogos- comienzan a emplear el término
paisaje
para la materialización de la idea de la interacción entre
los elementos naturales y el hombre. Hay que señalar que los naturalistas
de esta corriente utilizan la concepción de paisaje primero para
elaborar clasificaciones de cenosis vegetales complejas (bosque, marismas,
etc.) para poner de relieve la importancia de su unidad genética
y dinámica, oponiéndose así a las clasificaciones
tradicionales fundadas sobre la investigación de cenosis con flores
homogéneas. Así, el botanista G.F. Morozov en sus estudios
de tipos de bosques, introduce la noción de "elementos constitutivos
del bosque" entre los que se encuentran el clima, las condiciones pedológicas
y geológicas, el relieve, las particularidades "silvícolas"
de especies de árboles, la influencia del hombre (Berg, Dubnianski.
1914). En 1918 Morozov señala que las unidades de su clasificación
corresponden a los tipos de paisaje propuestos por L.S. Berg. Igualmente
R.I. Abolin (1914) en su análisis de tipos de marismas y, más
tarde, en 1918, el edafólogo S.S. Neustroiev en su obra, consagrada
a la división regional de la provincia de Orenburg, se presentan
como promotores de esta misma concepción.
Problemas epistemológicos de la concepción del paisaje
La nueva interpretación del paisaje propuesta por Berg conlleva en sí tres caracteres importantes. En primer lugar, el paisaje es considerado como una unidad homogénea. En segundo lugar, la identidad de los diferentes paisajes se revela en la similitud de sus composiciones. Y finalmente, el paisaje de Berg engloba elementos del ecosistema y de la actividad del hombre.
En el fondo, se pueden observar dos enfoques posibles de la realidad geográfica. Si el paisaje es una unidad territorial homogénea que "se repite de una manera típica" en el interior de una misma zona geográfica, puede ser estudiado como un complejo territorial original, pero también como un tipo de región geográfica de una escala precisa. Se trata, en efecto, de dos visiones opuestas del mismo objeto. Por un lado, esta concepción atestigua la existencia de unidades naturales subordinadas unas a otras y ligadas a un territorio en concreto, fijando así la discontinuidad espacial de la naturaleza. Por otro, la afirmación de que se repiten sobre la superficie terrestre en los límites de ciertas zonas geográficas está ligada a la idea de la continuidad. Esta oposición, todavía no muy pronunciada, va a provocar la aparición, en el interior de la Ciencia del Paisaje, de puntos de vista antagónicos sobre el paisaje (18). La definición "paisajista" de Berg presenta otro problema: ¿qué lugar hay que atribuir al hombre en el paisaje? A lo largo de todo el siglo XX, los geógrafos de paisaje van a dudar entre un enfoque totalizador, según el cuál el hombre forma parte del paisaje que transforma, y un enfoque dualista, según el que el hombre representa una fuerza exterior al paisaje. Berg, él mismo, formado en el seno de la escuela de Anuchin, consideraba al hombre como parte integrante del paisaje, al comienzo de su trayectoria científica, pero, a continuación, cambió su punto de vista original.
Desde la invención del paisaje científico las cuestiones de su continuidad o de su discontinuidad y del dualismo o del globalismo del enfoque del paisaje serán tratadas de manera diferente. En efecto, puntos de vista opuestos van a coexistir en Rusia durante todo el siglo XX y van a servir para resolver problemas diversos.
Para comprender los procesos que unen entre sí los elementos del medio, era indispensable adaptar la visión del paisaje como cuerpo continuo e integrador en el espacio y en el tiempo. Ya a comienzos del siglo XX, se abandonarán las bases de un nuevo enfoque del espacio geográfico, fundado sobre la idea de la continuidad de los procesos que tienen lugar en el medio. Un gran impulso al desarrollo de este enfoque fue dado por V.I. Vernadski. Basándose sobre la ley periódica de elementos químicos de Dmitri Mendeleïev y sobre la idea del flujo de materia, pasó de los problemas de la mineralogía descriptiva a la creación de una ciencia nueva, la geoquímica. La geoquímica se esfuerza en profundizar en los problemas teóricos que supone el origen de la repartición de los elementos químicos y de sus combinaciones en las diversas esferas del globo. En 1906, Vernadki publica su obra La concepción científica del mundo donde desarrolla su concepción de biosfera (19).
Vernadski reconoció que es incorrecto estudiar aisladamente el organismo viviente y la biosfera, pero igualmente señala, a instancias de Dokuchaiev, la importancia de las interacciones entre los fenómenos de la vida (biosfera) y de la materia abiótica (atmósfera, hidrosfera, litosfera) que se llevan a cabo por medio de los flujos de materia y de energía. Consecuentemente, cuestionándose el papel que desempeña la energía solar en los procesos terrestres, él introduce, en las ciencias naturales, el estudio de los intercambios de materia y de energía.
Más tarde, en los años 1920, el geobotánico B.B. Polynov adopta las ideas de Vernadski sobre la interacción de los elementos del medio a la escala del paisaje. B.B. Polynou reconoce la existencia de una esfera intermediaria entre las rocas y la materia viviente -"capa de alteración"- que funciona según las particulares reglas de intercambio de energía y materia. Posteriormente, propone la noción de "paisaje geoquímico" -complejo natural territorial, cuyos componentes están unidos genéticamente y por la migración de elementos químicos. Por tanto, se puede señalar el nacimiento de un nuevo enfoque sobre el paisaje. Éste no está compuesto ya por elementos estáticos fijados visualmente: los componentes del paisaje están unidos por procesos, expresión misma de la continuidad del medio. El paisaje es, a la vez, un proceso natural y la metáfora de una interrelación entre elementos de la Naturaleza (20).
Durante este mismo periodo, los geógrafos rusos continuarán haciéndose nuevas preguntas en torno a la estructura de los complejos territoriales y de los paisajes. Ya en 1938 L.G. Ramenski, en su obra Introducción al estudio integral de los suelos y de la vegetación, formula la hipótesis de la discontinuidad natural, intrínseca de la vegetación y de la existencia de una frontera neta entre la cenosis debido a la influencia de las culturas y a la alternancia discontínua de otros factores. Así, la discontinuidad de la vegetación no aparecerá más como un fenómeno inherente a una dinámica propia de la vegetación, sino como resultado de circunstancias medioambientales. En consecuencia, desarrollando la misma idea de la unidad y de la discontinuidad simultánea de la naturaleza, emplazada en el corazón de la noción de paisaje, Ramenski propone una reflexión sobre la división del paisaje en partes (Ramenski, 1935).
Una decena de años más tarde, N.A. Solntzev, catedrático de la Universidad de Moscú, retoma las ideas de Ramenski y publica una serie de artículos donde propone su concepción de la "morfología del paisaje", basándose en unidades paisajísticas de diferente escala intercaladas unas dentro de otras y desembocando en cartografías del paisaje (Rougerie, Beroutchachvili. 1991). Desde entonces, el paisaje no será más considerado como una "unidad de medida" de un medio abosolutamente homogéneo y será presentado como un complejo territorial que comporta sistemas de orden menor como urochisché, mestnotst', facies (21), etc., unidos por flujos laterales de materia y energía. Al mismo tiempo, representa una parte de las unidades taxonómicas de rango superior (regionales o planetarias) en las que el paisaje se individualiza por criterios de diferenciación. Este enfoque está marcado por el "objetivismo" de la definición de los complejos territoriales y de sus límites y por el determinismo en el análisis de las relaciones entre los componentes del paisaje. La delimitación de estos complejos territoriales, como señala A. Reteyum (1977), reporta verdaderos problemas, ya que las fronteras entre ellos son difusas y no existen criterios comunes para evidenciar los factores activos responsables de su formación, salvo, quizás, los factores zonales y azonales.
Al mismo tiempo los geógrafos rusos intentaban resolver otro problema de orden epistemológico. ¿Representa el hombre una fuerza comparable a la de la naturaleza y, por tanto, hay que considerar los elementos naturales y "antropo-geográficos" como un conjunto único? O, al contrario, ¿hay que oponer el hombre al medio natural, que determina la organización del espacio por las sociedades? Las primeras concepciones de los geógrafos rusos (escuelas de Anuchin y de Dokuchaiev) permanecen todavía permeables a todo lo que está anclado en la cultura y la historia de la relación hombre-naturaleza. Es el caso del mismo Dokuchaiev, quién habla en sus trabajos de una "interrelación genética, que existe desde siempre entre la naturaleza y su "Señor" imaginario, el hombre, y toda su vida material y espiritural" (1899, p. 19) que se manifiesta en las zonas históricas y naturales.
A finales del siglo XIX los geógrafos están siempre atentos al papel desempeñado por el hombre en la formación del paisaje. Por tanto, no comparten el mismo punto de vista sobre el carácter de las relaciones entre el hombre y el medio. Al enfoque totalizante de Dokuchaiev, se opone la visión dualista aparecida entre los geógrafos que participan activamente en los estudios consagrados a los efectos de la colonización rusa sobre los nuevos espacios. Así, en 1894 Alexandre Voieykov publica una serie de artículos sobreLa influencia del hombre sobre la Tierra (la traducción francesa será publicada en losAnnales de Geografía de Francia en 1901) donde analiza los diversos aspectos de la antropización del medio natural. Igualmente, A.N. Krasnov, en sus obras, explica los primeros fracasos de la colonización del Caúcaso subtropical debido a la ausencia de estudios sobre las relaciones ancestrales entre los pueblos locales y su medio.
Al mismo tiempo aparecieron las concepciones globalizantes todavía más radicales que las de Dokuchaiev y Berg de los años 1910-1930. Por ejemplo, la de Vernadski, según la cuál el hombre tiene un papel tan importante en sus procesos de intercambios energéticos y biogeoquímicos, que haría falta considerarlo como una fuerza equivalente a las geológicas y geoquímicas. En los años 1930-1940, desarrolla la teoría de la noosfera, la esfera del conocimiento, de la razón, de las transformación del medio por la civilización humana, que existe sobre el mismo plano que la biosfera, la litosfera, etc.
No obstante, la enfoque globalizante será progresivamente reemplazado
por una visión dualista. La aparación del término
paisaje
cultural, propuesto por L.S. Berg y S.S. Neustroiev, es un signo paradójico
de que la noción de Landschaft pierde su dimensión
cultural (22). En primer lugar esta noción
está más bien ligada a los paisajes agrarios, cuyo estudio
conocen, durante los años 1920-1930, una gran expansión.
Pero ya durante el decenio 1940-1950, la visión del paisaje cultural
cambia esencialmente. Así, el economista-geógrafo Yu.G. Sauchkin
entiende la noción de paisaje cultural como "todo paisaje
natural, donde las relaciones entre los elementos del medio natural son
cambiados por la actividad del hombre" (Sauchkin. 1946, p. 97). Esto significa
que "sobre la Tierra hay relativamente pocas regiones que no pueden ser
consideradas como paisajes culturales" (Idem.). Curiosamente, esta
noción desaparecerá durante los dos decenios siguientes del
vocabulario geográfico soviético.
Conclusión
Los problemas epistemológicos de esta nueva concepción de paisaje permanecen todavía lejos de ser resueltos durante la primera mitad del siglo XX. El contenido de la noción de paisaje es tan vago que la visión regionalista o individual, los enfoques tipológicos y la concepción de paisaje visible (23)cohabitan a menudo en las mismas obras geográficas. Incluso si ciertos geógrafos, como B.F. Dobrinin, emplea el términopaisaje y se esfuerzan en estructurar la descripción del paisaje en torno a sus elementos (geológicos, geomorfológicos, climáticos, hidrológicos, fitológicos, zoológicos y culturales), el paisaje es analizado, en sus trabajos, como una región geográfica. Además, no hay ninguna reflexión teórica sobre sus elementos. En efecto, la nueva concepción es elaborada por los geógrafos rusos desde principios de siglo durante sus investigaciones en un medio particular - en las llanuras de la Rusia europea. Los geógrafos se limitan a trabajos de división regional, o bien a sus descripciones especializadas (geomorfológicas, botánicas, etc.).
Las representaciones geográficas del paisaje en Rusia desde los primeros decenios del siglo XX son extremadamente ricas: los modelos naturalistas coexisten con concepciones que engloban la realidad natural y humana, los enfoques "objetivistas" con los que se basan sobre la aprehensión del paisaje como aspecto visible del territorio, las concepciones del discontinuismo espacial y temporal de la naturaleza con los enfoques geográficos basados sobre la hipótesis de la continuidad de los procesos naturales en el espacio y el tiempo. Esta diversidad de enfoques va a desaparecer progresivamente de la geografía bajo la influencia de la nueva ideología y de los cambios sociales y económicos en Rusia.
Desde el segundo cuarto del siglo XX, la visión "naturocentrica" triunfa en las investigaciones paisajísticas soviéticas y los elementos antrópicos así desaparecerán de las descripciones. La "naturalización" y la "objetivización" del paisaje corresponden al espíritu general de la época. En efecto, la Revolución de Octubre de 1917 ha jugado un importante papel en la modificación de la concepción de paisaje en Rusia. De una parte, las transformaciones políticas y sociales acentúan las tendencias ya existentes en el desarrollo de la geografía rusa, donde lo más importante es el aspecto utilitario de las investigaciones geográficas, su relación directa con la práctica y el desarrollo económico. Por otra parte, la concepción del materialismo marxista, según la cual nuestras sensaciones son medios eficaces para conocer el mundo en su objetividad, se convierte en dominante en Rusia. Consecuentemente, a lo largo del siglo XX, el paisaje es reducido, a título de "complejo geográfico natural", al sistema de componentes naturales, o más simplemente, a la suma de diferentes índices y formulas físicas y químicas.
Por consecuencia, la geografía rusa ha pasado al siglo XX a una
visión más interactiva y más globalizante del paisaje
con, en particular, la introducción del concepto de geosistema.
No obstante, si los métodos de su estudio son cada vez más
"objetivos" (cuantitativos), los elementos culturales del paisaje desaparecen
del modelo paisajístico ruso. Hará falta esperar a los años
1970 para que la Ciencia soviética de Landschaft vuelva a
tener interés de nuevo por el role del hombre en el proceso de la
evolución del paisaje.
Notas
1. Las "Cátedras" (término ruso para definir las áreas de conocimiento) de Geografía fueron creadas en las universidades rusas gracias al Edicto de 23 de agosto de 1884. Anteriormente, solo se enseñaba Geografía Física en las Cátedras de Física, a menudo reducida a la Climatología.
2. No es por azar que, a principios del siglo XX, Paul Vidal de la Blanche dió un título revelador a su introducción a la Historia de Francia de Ernest Lavisse: Tableau de la Géographie de la France. Según la concepción vidaliana, el paisaje concretiza el marco impuesto por la naturaleza al hombre, manifestandose también en la ingeniosidad de la adaptación de las sociedades, la riqueza de los "géneros de vida" (Sgard. 1997).
3. La geografía no se desarrolla como disciplina autónoma en el seno de la Universidad francesa hasta 1890. Como señala C. Rhein (1984, p. 70), la geografía en Francia, incluso durante la década 1870-1880, "solamente es enseñada en las escuelas primarias, los liceos y colegios. […] Si la geografía existe en Francia ya en los años 1880, habría que hablar más bien de geografias, dicho de otra manera, un conjunto de conocimientos relativamente abiertos y practicados fuera de las instituciones universitarias".
4. Sobre el nacimiento de la concepción del Paisaje en Alemania se puede citar también la obra dirigida por M. de Bolós (1992): Manual de Ciencia del Paisaje.
5. Hay que señalar que el término Ciencia del Paisaje aparece por primera vez en las obras de los geógrafos alemanes de finales del siglo XIX (Landschaftskunde). Como señalan G. Rougerie y N. Beroutchachvili (1991), los paisajes eran considerados por entonces más bien como una óptica territorial, como expresiones espaciales realizadas en la naturaleza por un juego de leyes científicamente analizables.
6. El término Expedición Académica es empleado por los historiógrafos rusos para describir las cinco expediciones enviadas por la Academia de Ciencias de San Petersburgo, en los años 1768-1774, para estudiar los recursos naturales y humanos del Imperio Ruso. Estas expediciones han desempeñado un importante papel en el avance de los descubrimientos geográficos no solamente a la escala de Rusia, sino también a la escala europea (Frolova. 2000b).
7. Estadística descriptiva o "cameral" es una escuela científica de recogida de información descriptiva sobre el territorio y la población del Estado, dominante en Rusia durante la primera mitad del siglo XIX. Históricamente, el modelo estadístico de descripción de Rusia fue tomado de los científicos alemanes. Su método se caracterizaba por la predominancia de las cifras sobre el texto, por la nomenclatura, por la exigüidad de comentarios, que manifiesta su origen militar y/o burocrático.
8. Si bien el papel de P.P. Semionov en el desarrollo de la geografía rusa de la segunda mitad del siglo XIX es sin duda importante, la legitimidad de "la escuela geográfica de Semionov" aceptada en la historiografía soviética (Abramov. 1972), es puesta en duda por O. Orain (1996, p. 226). Este autor señala que Semionov no tuvo concepciones verdaderamente originales para la geografía, ni verdaderos discípulos. No obstante, hay que remarcar que este funcionario del Estado, científico y explorador, ejerció una influencia importante sobre los geógrafos rusos y el gran publico en tanto que autor de las primeras obras de difusión geográfica, consagradas a la descripción sistemática del conjunto del país.
9. Contemporáneo de A. Humboldt, C. Ritter está completamente despegado de la noción de paisaje: él no es hombre de terreno, ni naturalista, sino más bien filósofo e historiador (Rougerie, Beroutchachvili. 1991).
10. Doce volúmenes bien ilustrados accesibles para todo el mundo (esta obra reunió a varias antologías, consagrados a diferentes regiones del país).
11. Él fué un atento lector de Richthofen, Wagner, Hettner, Ratzel (Orain, 1996).
12. A pesar de su pertenencia a la Facultad de Historia y Filología, ésta cátedra se ocupa de problemas verdaderamente geográficos y de la explicación de fenómenos físicos del espacio terrestre. Es por ello que desde 1888 pertenecerá a la Cátedra de Ciencias de la Naturaleza de la Facultad de Física y Matemática (Krasnopolski. 1995).
13. Anteriormente el suelo era tratado como una formación geológica superficial.
14. Así N.M. Dronin (1999) afirma en su obra sobre la Historia de la concepción del paisaje que hasta los años 1930, geógrafos rusos tan conocidos como Semionov y Berg ligaron sus definiciones de paisaje con la concepción cronológica de Hettner. Él explica la desaparación de referencias a los trabajos de Hettner en los años 1930 por la lucha ideológica contra el "idealismo" en la geografía soviética.
15. Puede ser presentado sobre un mapa por un solo contorno.
16. Puede repetirse en el espacio y puede ser representado sobre un mapa por contornos separados.
17. Entre ellos están los artículos de A. Hettner y E. Ritter, traducidos al ruso.
18. Desde su aparición, la concepción de Landschaft a llevado consigo postulados contradictorios que permanecerán como un lastre para varias generaciones de geógrafos y se traducirán en batallas científicas permanentes en torno a la noción de paisaje. Es interesante que los mismos geógrafos de paisaje, propusieron varias veces reemplazar la noción "demasiado vaga" de paisaje por otros términos como: complejo natural territorial (Borzov. 1908), aspecto geográfico, geocora, ourotchistché (Berg, años 1930), etc.
19. Su obra Biosfera será publicada en 1926 (Vernadski. 1926).
20. Como escribe N.M. Dronin (1999), en los años 1930, esta visión tomará una forma extrema en los trabajos del director del Instituto de Geomorfología A.A. Grigoriev, autor de la teoría del "proceso geográfico global", que va a dominar en la geografía soviética entre los años 1930-1940.
21. Los términos urochische y facies fueron introducidos en la geografía de los paisajes por L.F. Ramenski en 1935 y 1938. Según G. Rougerie y N. Beroutchachvili (1991, p. 39), las facies es el componente más pequeño de la estructura del paisaje, un espacio homogéneo que reúne condiciones naturales más o menos complejas. El urochisché es una asociación de facies y la mestnost' - la asociación de urochisché's (Pedroli. 1983).
22. Ya desde finales de los años 1930 - en la segunda (1937) y tercera (1947) edición de su famosa obra conceptual Zonas paisajísticas y geográficas de la URSS (1930)- Berg adopta el enfoque dualista sobre la relación entre el hombre y el paisaje. De un lado, él escribe que la actividad humana no tiene más que un papel secundario en el conjunto paisajístico (1947). De otro, señala que solamente los paisajes naturales o los agrarios son conjuntos geográficos armoniosos.
23. El promotor de este enfoque del
paisaje, ligado a los hechos visibles, V.P. Semionov Tian-Chanski formuló
de esta forma la esencia de la investigación geográfica:
[…] La investigación de los tipos de regiones geográficas
[de paisajes] es un trabajo esencial, necesario e imprescindible de la
geografía, que aproxima esta ciencia al arte (Semionov. 1928, p.
47). El paisaje artístico tiene una importancia primordial y determinante
para la geografía, ya que ella se baja sobre impresiones visuales
[…] (Idem., p. 266).
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