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REVISTA BIBLIOGRÁFICA DE GEOGRAFÍA Y CIENCIAS SOCIALES (Serie documental de Geo Crítica) Universidad de Barcelona ISSN: 1138-9796. Depósito Legal: B. 21.742-98 Vol. VIII, nº 473, 15 de noviembre de 2003 |
El Atlas del Rey Planeta. «La descripción de España y de las costas y puertos de sus reinos», de Pedro Texeira (1634). Editorial Nerea, Felipe Pereda y Fernando Marías editores, 2002, 398 páginas. [ISBN: 84-89569-86-x]
Pablo Cisneros Álvarez
Doctorando por la Universitat de
València
Palabras clave: Atlas, cartografía, Pedro Texeira
Key words: Atlas, cartography, Pedro Texeira
Pedro Texeira (1595-1662), célebre especialmente por la realización de la Topografíade Madrid, de 1656, es el autor también de la mayor obra cartográfica conocida acometida en el siglo XVII en España: «La descripción de España y de las costas y puertos de sus reinos», de 1634. La categoría de esta extraordinaria obra reside -a parte de su gran importancia estética, cartográfica y heráldica- en ser encargo de la monarquía real austriaca, en este caso del Felipe IV, el Rey Planeta, para quien, junto a Felipe III, Texeira trabajaría más de cuarenta años de su vida.
El encargo regio de Felipe IV a Pedro Texeira tenía un fin muy claro, hacer una descripción precisa y completa de las costas de España, de sus puertos, de sus ciudades más importantes, e incluso de las antigüedades e historia. El recorrido tuvo como punto de partida Fuenterrabía (Guipúzcoa), desde donde, en 1622, un grupo de cosmógrafos siguieron el viaje requerido por la monarquía, concluyéndose este periplo al llegar a la frontera francesa.
La idea inicial del rey fue la de encargar la tarea de la descripción de las costas españolas a Joao-Baptista Lavanha (1555-1624). Lavanha trabajó como cosmógrafo de Portugal para Felipe III y posteriormente, en 1613 fue nombrado maestro de matemáticas del príncipe, futuro Felipe IV. Esto nos está relatando la gran cultura que poseía Lavanha ya que, en el siglo XVII el estudio de las matemáticas, además de la aritmética y la geometría, suponía el conocimiento de astronomía, cronología, geografía y cosmografía, sin eximir todo ello el dominio de instrumentos náuticos y matemáticos, materias en las que Lavanha, según nos relata Kagan en este volumen, era un auténtico experto.
Por una serie de circunstancias, este encargo que no vio finalizado Lavanha, pasó, en su totalidad, a manos de uno de sus discípulos, Pedro Texeira, del cual había sido también profesor de matemáticas el cosmógrafo Lavanha. Juntos trabajaron en varios proyectos cartográficos, pero sin embargo, a pesar de la colaboración de ambos en este propósito de la descripción de las costas de España, fue Pedro Texeira el que firmó el trabajo concluido.
Este gran encargo cartográfico llamado «La descripción de España y de las costas y puertos de sus reinos» es el que nos presenta, en formato de lujo, la editorial Nerea, siendo sus editores Felipe Pereda y Fernando Marías, los descubridores de esta joya cartográfica española del siglo XVII, que se daba por perdida y que sin embargo, encontraron en un biblioteca de Viena en un perfecto estado de conservación.
Esta encomienda regia cartográfica comenzó en Fuenterrabía en el año 1622, como ya se dijo, concluyéndose este largo viaje, en el que se recogía la información completa de las costas españolas, muy cerca de la frontera con Francia, es decir, después de haber bordeado toda la península ibérica, en el año 1629. Tras el largo viaje de esta comisión encabezada por Texeira, al año siguiente de su terminación, se comenzó a elaborar este Atlas, sellándose en el año 1634, bajo la firma de Pedro Texeria.
«La descripción de España y de las costas y puertos de sus reinos» constaba de dos partes: la literaria, que contenía información sobre la geografía, historia y población del territorio nacional, conocida a través de tres manuscritos conservados en la Biblioteca Nacional de Madrid, en la British Library y en Viena y la parte cartográfica, dada por desaparecida.
Esta obra, de importancia capital para el estudio de la cartografía del siglo XVII español, reproduce de manera facsimilar la obra de Texeira. Posiblemente, y siguiendo la opinión de uno de los autores, esta parte cartográfica pudo llegar allí a través de un intercambio de recursos entre las cortes austriaca y española o más bien, lo más probable, es que se lo llevara en su equipaje el archiduque Carlos III, pretendiente al trono español tras la muerte de Carlos II, ya que esta magna obra en la época contenía datos relevantes a nivel militar, estratégico y administrativo.
Todo este corpus recopilatorio de los trabajos cartográficos de Texeira en «La descripción de España y de las costas y puertos de sus reinos», viene acompañado de la opinión de varios prestigiosos especialistas. Así, Felipe Pereda se encarga del capítulo I titulado Un Atlas de las costas y ciudades iluminado para Felipe IV: La descripción de España y de las costas y puertos de sus reynos; Richard L. Kagan escribe en el capítulo II llamado Arcana imperio: mapas, ciencia y poder en la corte de Felipe IV; Agustín Hernando, en el capítulo III, nos habla sobre Poder, cartografía y política del sigilo en la España del siglo XVII; sigue Fernando Marías, en el capítulo IV, dedicado a las Imágenes de ciudades españolas: de las convenciones cartográficas a la corografía urbana. Después de estos cuatro primeros apartados, el libro presenta la edición facsímil de la obra «La descripción de España y de las costas y puertos de sus reinos», de Pedro Texeira. Tras la presentación de la gran empresa cartográfica concluida en el 1634, el libro continúa con el texto de Daniel Marías, titulado La llave del Altas: génesis, ejecución y contenido de un relato geográfico sobre el litoral de la península ibérica, y finaliza con la trascripción De la forma, Grandeza, Fertilidad y riqueza de España, realizada por el propio Pedro Texeira y explicada por Luis Zolle. Hay que decir que todo esto está precedido por una magnífica introducción realizada por los editores de la obra, Felipe Pereda y Fernando Marías.
El Atlas consistía en 173 páginas, con 116 imágenes a todo color de mapas de España y del mundo, así como los escudos de sus reinos, provincias y señoríos. Entre las imágenes figuran 11 de Guipúzcoa; 5 de Vizcaya; 5 de Castilla; 9 de León; 19 de Galicia; 21 de Portugal; 16 de Andalucía; 2 de Murcia; 5 de Valencia y 7 de Cataluña.
En cuanto a estas imágenes, hay que hacer varias puntualizaciones. Éstas son siempre representaciones pseudoperspectivas aéreas, tomadas desde un punto imposible, si nos atenemos a la época en la cual fue realizado el Atlas, e imaginado por parte de Texeira. A pesar de ello, estas vistas de las costas españolas representan, de manera fidedigna, cómo eran los litorales peninsulares del siglo XVII, reparando en detalles como los salientes de tierra, los sistemas defensivos de los pueblos costeros, las playas, los cabos, los golfos, los acantilados, tratados todos ellos con gran precisión, con el fin de que la persona que los leyera, en este caso concreto el rey Felipe IV, los pudiera interpretar de manera rápida y clara.
Esta exactitud en la obra de Pedro Texeira tenía una intención muy evidente. El Atlas pretendía ofrecer al rey un conocimiento completo de todo el litoral peninsular siendo, por tanto, un instrumento de defensa muy importante que permitía a la monarquía establecer estrategias a la hora de resguardarse de los ataques marítimos. Esta utilidad del Atlas le otorgaba un papel primordial de defensa de la nación, de ahí que no debía ser conocida por muchos, siendo para uso prácticamente exclusivo de la corona, convirtiéndose en un auténtico tesoro nacional que el estado debía de proteger debido a su carácter político, militar y estratégico.
Las imágenes de «La descripción de España y de las costas y puertos de sus reinos»destacan, además de por las características anteriormente descritas, por su enorme belleza. Esta belleza, a simple vista, se puede calificar de ingenua. Bien es cierto que los dibujos que realiza Texeira en esta obra no responden a unos criterios absolutos de realismo, aunque se ha de apuntar que éstos están concebidos para su rápida interpretación. Las representaciones ofrecen un detallismo realmente significativo, no hay más que acudir a los minuciosos escudos que ofrece la obra, o el estudio de las poblaciones por las que discurrió la comisión cartográfica -siendo de este modo un elemento más para el estudio del urbanismo español del siglo XVII-, o la precisión para clarificar la ubicación estratégica de los pueblos, todos con sus respectivos nombres. De esta forma, no cabe duda de la importancia vital de esta obra para la monarquía de Felipe IV como arma política. Su valía, y por tanto la protección que se le otorgó a este Atlas han sido, evidentemente, las causas de que durante muchos años haya estado desaparecida.
En definitiva, la presente obra
editada por Pereda y Marías y publicada por la editorial Nerea,
contribuye en mucho a la escasa producción cartográfica española
del siglo XVII, dando a conocer un magnífico trabajo concluido por
Texeira en 1634 que ha estado oculto en los archivos vieneses. Y, evidentemente,
gracias a las sabias aportaciones de los especialistas que han intervenido
en la consumación de este volumen, hace de esta obra un corpus
imprescindible en el estudio de la política militar de Felipe IV
y de la cartografía española del siglo
XVII.
Ficha bibliográfica
CISNEROS ALVAREZ, P.
El Atlas del Rey Planeta. «La
descripción de España y de las costas y puertos de sus reinos»,
de Pedro Texeira (1634). Biblio
3W, Revista Bibliográfica de Geografía y Ciencias Sociales,
Universidad de Barcelona, Vol. VIII, nº 473, 15 de noviembre de
2003. <http://www.ub.es/geocrit/b3w-473.htm>. [ISSN 1138-9796].