Universidad de Barcelona [ISSN 1138-9796] Nº 215, 7 de marzo de 2000 |
LA REHABILITACIÓN DE LOS CENTROS HISTÓRICOS EN MÉXICO: UN ESTADO DE LA CUESTIÓN
Martha Rosalía Sánchez López
El patrimonio urbano nos permite conectar tres dimensiones de la cultura: la cultura en cuanto herencia a conservar, la cultura en cuanto componente de nuestra conciencia y la cultura productiva como generadora de riqueza.
Las ciudades hay que explicarlas como realidades complejas dado que en su paisaje se interrelacionan elementos del medio ambiente, herencias de la historia, las fuerzas económicas, el progreso técnico, el genio creador del hombre, las tensiones sociales, los modos de vida de sus habitantes y también, las aspiraciones y los deseos de los ciudadanos. La ciudad, además de ser un paisaje cultural, es una realidad dinámica donde los problemas de reorganización del espacio urbano han estado siempre presentes.
La ciudad, tiene que responder a las necesidades que cada época ó coyuntura histórica le plantea. De aquí que, de cara a la valoración del patrimonio cultural, a la superación de las visiones museísticas de los centros históricos y también a la intervensión urbanística, sea necesario hacer conciencia sobre el hecho de que cada espacio urbanístico tiene una etapa histórica que es clave en su formación y articulación, además, se trata de ciudades vivas que han tenido que adaptarse a diversas etapas.
En la mayoría de las ciudades lo viejo y lo nuevo, lo tradicional y lo moderno se combinan; las ciudades están esculpidas en piedra. Los rasgos de una ciudad se advierten en la fachada de sus edificios, en sus cascos antiguos, en sus iglesias, en el conjunto de sus trazos, en el sabor de sus barrios y en el sentir de sus habitantes (1).
Es en el lenguaje de las piedras que se ha escrito la historia de las ciudades, algunas de las cuales han sabido transmitir su mensaje y son un libro abierto para mostrar su historia, cultura y folklore, tanto a sus habitantes como a sus huéspedes, conformando parte importante de su patrimonio turístico. Es así que, las localidades tradicionales con sus referencias al pasado, son los nuevos lugares que llaman al turismo alternativo.
Pero existen otras que por negligencia o por el deseo de dar paso a la modernidad no han preservado la fisonomía que antaño las identificaba, y en las que deben participar una serie de organismos especializados y la misma población, a fin de salvaguardar el patrimonio arquitectónico, apoyados en una serie de leyes y reglamentos que decretan la obligación de conservarlo y mantenerlo en buen estado; determinando asimismo el nivel de intervención en cada uno de los edificios, que van desde la remodelación hasta la demolición, según el caso.
Es importante señalar que una pronta y eficaz intervención en los edificios y un uso apropiado de los mismos podrían incrementar la oferta turística que podría aumentar la estancia promedio de sus visitantes.
En el caso de México, éste cuenta con un gran legado histórico reflejado en cada uno de los Estados que lo conforman. Dicho legado se debe en gran parte a los cambios socioeconómicos, políticos y culturales que la Conquista Española dejó en el país, dando como resultado el mestizaje, que significó la creación de nuevas generaciones, con características propias que identificarían a una futura nación, ya que ésta se compone también de un rico pasado prehispánico.
En México, la mano del hombre aplanó lo alto de las montañas y les hizo terrazas en las faldas para su conveniencia. La religión y la arquitectura iban de la mano. Los edificios más importantes de Mesoamérica se levantaban para honor y gloria de seres sobrenaturales, más bien que para albergar al hombre. Los edificios van desde una simple cueva hasta palacios lujosos y templos de enormes proporciones.
Es difícil calcular las dimensiones a que llegó la arquitectura en Mesoamérica durante la época prehispánica, pues queda muy poco de lo que alguna vez fueron poblaciones y ciudades prósperas. Los mejores ejemplos existentes se encuentran en el área maya, siguiéndoles los de la región mixteco-zapoteca. Se conoce menos de las edificaciones en otras áreas, ya sea por lo poco durable de los materiales de construcción o por la destrucción causada durante la conquista y la ocupación española, así como por el olvido de los últimos doscientos años.
Las casas de la gente común eran de construcción débil, y quedan pocos restos de ellas. En los templos antiguos, como en los actuales, hubo muchas clases de casas, algunas grandes para la gente más acomodada y otras muy humildes que merecen más bien el nombre de "choza" ó "jacal". Varían bastante en su construcción según la región donde se encuentran.
Los arquitectos indígenas combinaban también el espacio, la distancia y la altura para imprimir un sentido de majestad, misterio, dignidad y solemnidad, como lo demuestran las espaciosas plazas de Teotihuacan y Chichén Itzá.
Se construyeron ciudades fortificadas en muchas regiones debido a las intensas acciones de guerra de Mesoamérica. Las típicas ciudades fortificadas mayas son Tulum, edificada en un acantilado frente al mar y protegida por una muralla; Mayapán, Iximché y Utatlán, construidas en medio de un terreno casi inaccesible. En el Valle de Tehuacán las principales ciudades clásicas se encuentran sobre cerros altos, no muy accesibles.
Los lacandones construyeron una ciudad en una isla del lago Miramar ("Chan-K’ak-Na"), a la que se podía llegar únicamente en canoa, y que costó a los españoles varias expediciones hasta capturarla y rendirla. Los conquistadores tuvieron grandes dificultades para vencer a Tenochtitlan y Petén Itzá, ciudades fortificadas por los aztecas y los mayas, respectivamente, ambas construidas en islas.
Los purépechas también fortificaron ciudades, como Oztuma (Teloloapan), Zitácuaro y Ajucitlán. Alrededor de todo el actual estado de Tlaxcala se construyó una muralla alta y gruesa para proteger a los habitantes contra los aztecas, con entradas especiales, reforzadas, en zigzag. En Huexotla había una cerca de seis metros de altura, que en otras épocas rodeaba y defendía a la ciudad. Los zapotecas, mijes y chinantecas eran famosospor sus fortalezas casi inaccesibles en los picos de las montañas, como de Quiengola. En algunos sitios los habitantes tenían que usar escaleras para atravesar sus fortalezas.
Tenochtitlan, la fantástica capital azteca, queda varios metros debajo de la actual ciudad de México, y dondequiera que se hacen zanjas en el corazón de la ciudad los obreros cruzan las ruinas de la gloria azteca. Creció rápidamente en cuanto se le conquistó, y desde entonces no se ha detenido. Sabemos cómo se veía antes de la gran destrucción gracias a los escritos de los cronistas españoles, quienes nunca dejaron de encomiar y asombrarse de las maravillas de Tenochtitlan (2).
Una de las manifestaciones culturales más sobresalientes de la influencia española fue la arquitectura, con el estilo colonial que se desarrolló durante la época virreinal y que prevaleció medio siglo después de la emancipación.
Característica de la colonización española es la forma urbana de asentamiento que, por lo regular, siguió dos estructuras básicas: una era la retícula en forma de damero y la otra la que se adaptaba a los accidentes geográficos del terreno.
Los asentamientos urbanos fortificados prestaban protección contra las incursiones de los numerosos indígenas y aseguraban las comunicaciones comerciales. Una política constante de la Corona española fue la de arraigar en las ciudades a los colonizadores e impedir su dispersión por la campiña, pero aún así, en el ocaso de la época colonial había más españoles y criollos dispersos por la campiña; en haciendas y ranchos, que los que vivían en las ciudades.
La construcción de ciudades planificadas comienza con el envío del gobernador Ovando en 1501, quien hizo construir la nueva ciudad de Santo Domingo según el modelo de construcción urbana planificada en la Península Ibérica durante la Edad Media tardía. Esa forma de trazado, que delimita, mediante la red de calles paralelas, cuadriláteros edificados y que se conoce como esquema ajedrezado, se encuentra también en las colonizaciones del Mediodía francés y del este de Alemania.
Fundándose en las experiencias prácticas de la construcción y ampliación de ciudades, el gobierno español estableció tempranamente pautas para el trazado urbano en el Nuevo Mundo. En 1513 se le encomendó a Pedrarias Dávila que al fundar ciudades trazara simétricamente las calles y solares. El agrimensor Alonso García Bravo, que había llegado con Pedrarias Dávila, diseñó después, por encargo de Hernán Cortés, el esquema ajedrezado para la reconstrucción de la ciudad de México. Fue ésta la forma típica de los asentamientos urbanos españoles en América.
Las ordenanzas de Felipe II del 13 de julio de 1573 incluían las disposiciones legales sobre la construcción de ciudades en América, que fueron retomadas en el código colonial de 1680. Plazas, calles y solares debían ser trazados en línea recta, para lo cual había que comenzar con la delimitación de la plaza principal, o plaza mayor, y a partir de allí construir la red de calles (3).
El interés por conservar nuestro patrimonio cultural, se remonta a un pasado " muy cercano", poco después de declarada la independencia (1821), cuando surge la necesidad de crear la nacionalidad, es decir, el sentido de pertenencia a una tierra, y en este caso son los mestizos, producto de la fusión indígena y española, quienes deberán desarrollar este sentimiento (4).
De esta forma, empieza una producción de leyes, reglamentos, decretos, documentos y bibliografía sobre la riqueza cultural de México, que desembocarán en la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos de 1972, que es la vigente.
Una forma de fomentar la conciencia nacional tras la independencia fue la creación de museos. En 1825 se creó el primer Museo Nacional Mexicano en la Universidad, fundándose a la vez la Sociedad del Museo Mexicano. En 1835 se creó la Academia Nacional de Historia con la participación de todas las tendencias políticas. Su objetivo: ilustrar la historia de la nación, corrigiéndole los errores que hasta ese momento tenía.
No obstante, hacia mediados del siglo XIX las orientaciones políticas fueron determinantes para lo que actualmente se considera el patrimonio arquitectónico y urbano de la colonia. Las leyes de nacionalización de los bienes eclesiásticos que los liberales decretaron al tomar el poder hacia 1865, incidieron también en la conservación de monumentos.
La ley del 13 de julio de 1859, en su artículo 5º, se refería a la manera como los peritos debían hacer planos para dividir los edificios de las comunidades suprimidas, valuadas para proceder a su remate, disposición que a veces llevó consigo la destrucción por la apertura de calles para su mejor fraccionamiento, así como una modificación muy importante de las trazas de la ciudad colonial, lo que indica que, en esa época no todos los edificios coloniales eran considerados monumentos.
Es importante destacar el apoyo que brindó Maximiliano a la protección del patrimonio cultural de México, a través de disposiciones administrativas y exaltando la historia nacional con actos como el que realizó el 16 de septiembre de 1864 cuando mandó colocar en el edificio de Dolores en que habitó Don Miguel Hidalgo una inscripción, siendo el primer monumento histórico reconocido por el gobierno.
Hacia el último tercio del siglo XIX el régimen porfirista acentúo su apoyo al estudio de la arqueología, que había despertado el interés de viajeros extranjeros y los conocimientos derivados de nuevos descubrimientos arqueológicos. Apoyo que se prolongará hasta el final de su mandato a través de acuerdos y decretos tendientes a la preservación de los monumentos arquitectónicos.
La herencia colonial tuvo otra valoración, ya que representaba aquello contra lo que había luchado la nueva nación; sin embargo, algunos aspectos fueron valorados, como la pintura, así como edificios que llamaban la atención por su excelente factura. En cuanto a la vertiente popular de la arquitectura colonial, la constituyeron los poblados mestizos: Pátzcuaro, Taxco, San Angel ó Coyoacán, que se fijaron también como imagen de "lo típico".
Con todo lo anterior se valoraron algunas manifestaciones de la cultura colonial y se elevaron a rango de patrimonio cultural, con un claro interés de conservarlas como testimonios. Este proceso se formalizó oficialmente con su inclusión en las leyes de 1930 y 1934 para su protección y conservación (5). La culminación de esta tendencia se produjo en 1939 al crearse el Instituto Nacional de Antropología e Historia (6).
Surgió así la ideología del mestizo como poseedor de la verdadera cultura nacional. De aquí la necesidad de conservar nuestro pasado, tanto prehispánico como colonial, del cual era exponente precisamente el mestizo (7).
En 1952 se crea la Secretaría de Bienes Nacionales, cuyas funciones cumple actualmente la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología; tenía como fin inventariar los bienes nacionales.
En el régimen de Luis Echeverría Álvarez se añadió el patrimonio del siglo XIX, es decir, el de la cultura del Estado Nacional, antecedente del contemporáneo; concretamente se trata de la Ley Federal del Patrimonio Nacional de la Nación, de 1970, y de la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, de 1972.
En el ámbito internacional también se gestó un movimiento semejante. Algunas naciones decretaron leyes de protección para sus monumentos (ejemplo: Francia, 1911; España, 1926), y México en particular ha participado de manera activa en este movimiento: desde la fundación de la Unesco en 1945, sumándose a los esfuerzos internacionales para la Conservación de los Monumentos y Ciudades Históricas; en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Viajes Internacionales y Turismo celebrada en Roma en 1963; en la Reunión sobre Conservación y Utilización de Monumentos y Lugares de Interés Histórico y Artístico de 1967 en Quito; en el Coloquio Internacional sobre la Conservación, Preservación y Valoración de los Monumentos y Sitios en Función del Desarrollo del Turismo Cultural, reunido en Oxford en 1969; o en la Conferencia llevada a cabo en México en 1972, donde se abre una amplia gama de posibilidades para la sociedad civil a través del turismo cultural
A partir de 1950, el patrimonio cultural ha entrado en una nueva esfera, la del desarrollo económico a través del turismo, al reconocerse el atractivo que tiene para los visitantes la rica gama de testimonios de las diferentes etapas históricas y de las múltiples culturas regionales.
Como consecuencia de lo anterior, se produjo la creación por parte de la Secretaría de Turismo, en 1989, de los fondos mixtos de promoción, que son los mecanismos de participación conjunta en las que interviene el gobierno federal, el gobierno estatal, el gobierno municipal, así como los prestadores de servicios turísticos organizados a través de la misma Secretaría para impulsar el desarrollo de la actividad turística por medio de la publicidad, promoción y comercialización tanto en el mercado nacional como en el internacional. De los Fondos Mixtos existentes hasta el presente, está el destinado a las ciudades coloniales ( y sus centros históricos) que se denomina: Fondo Mixto Ciudades Coloniales y que engloba 44 ciudades de las más de 100 que se asentaron durante lo que se denomina época colonial. A manera de ejemplo de lo que se hace en cuestión de rehabilitación en los centros históricos en México, señalo algunas de estas ciudades en que se están realizando actuaciones de rehabilitación financiada por el fondo mixto (Anexo 1). Esta relación, restringida, está formada por las ciudades de las que he lograda reunir información relativa a los valores históricos y monumentales. Conviene tener en cuenta que la Secretaría de Turismo, se ha limitado ha publicar la lista de las 44 ciudades que la componen, sin ninguna otra información complementaria (Anexo 2).
Por lo anterior, en la actualidad, estoy realizando una investigación
tanto documental como de campo, con vista a recabar todos los datos pertinentes
que permitan una mejor percepción del problema.
Bibliografía consultada:
A. PETERSON, Federico. México antiguo. México: Ed. Herrero, S. A. 1966. 426 p.
BONET CORREA, Antonio. Urbanismo e historia urbana en el mundo hispano, Segundo Simposio, 1982. Madrid: Universidad Complutense de Madrid. 1985. 680 p.
CABRALES BARAJAS, Luis Felipe y MORENO ROMERO, Eduardo (Compiladores). La ciudad en retrospectiva. Guadalajara: Universidad de Guadalajara – Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño. 1998. 318 p.
DÍAZ DEL CASTILLO, Bernal. Historia verdadera de la conquista de la Nueva España. Madrid: Historia 16. 1984. 558 p.
FLORESCANO, Enrique (Compilador). El patrimonio cultural de México. México: F. C. E. 1993. 424 p.
HADOY, Jorge Enrique y GUTMAN, Margarita. Impacto de la urbanización en los centros históricos de Iberoamérica. Madrid: Mapfre. 1992. 460 p.
KOTETZKE, Richard. América Latina, II. La época colonial. México: Herrero, S. A. 1966. 426 p.
MARTIN LOU, María Asunción y MÚSCAR BENASAYAG, Eduardo. Proceso de urbanización en América del Sur. Madrid: Mapfre. 1992. 308p.
México Desconocido. Ciudades coloniales. Edición Especial No. 5. México, D. F. 1994. 96 p.
SEDESOL (Secretaría de Desarrollo Social). Palabra de ciudad
(renovación urbana de los centros de las ciudades – una visión
de sus cronistas). Programa de Cien Ciudades. México: SEDESOL.
1994. 285p.
Notas bibliográficas:
(2) Ejemplo de los testimonios españoles sobre las ciudades en el México prehispánico es: DÍAZ DEL CASTILLO, Bernal. Historia verdadera de la conquista de la Nueva España. Madrid: Historia 16. 1984. 2 vols.
(3) BONET CORREA, Antonio. Urbanismo e historia urbana en el mundo hispano. Segundo Simposio, 1982. Madrid: Universidad Complutense de Madrid. 1985. 2 vols.
(4) Para mayores referencias sobre la evolución de las políticas de conservación del patrimonio, se puede consultar el capítulo IX del libro de FLORESCANO, Enrique (Compilador). El patrimonio cultural de México. México: FCE. 1993. 424 p.
(5) "Ley sobre protección y conservación de monumentos y bellezas naturales" de 1930 y "Ley sobre protección y conservación de monumentos arqueológicos e históricos, poblaciones típicas y lugares naturales" de 1934. GERTZ
(6) MANERO, Alejandro. La defensa jurídica y
social del patrimonio cultural. México: FCE. 1976 p.79-130.
Publicado en el Diario Oficial de la Federación el 3 de Febrero
de 1939.
(7) GALVÁN, Luz Elena. Leyes de 1930 y 1934 sobre protección y conservación de monumentos, Primera reunión para definir una política nacional de conservación de monumentos. México: INAH, Dirección de Monumentos Históricos (Cuaderno de Trabajo, núm. 1). 1985. p. 69
Relación de ciudades de México y la rehabilitación de sus centros históricos:
Es importante señalar que por encontrarse la investigación en etapa inicial (investigación hemerobibliográfica), algunos de los apartados no han sido localizados (señalado como d.n.e., dato no encontrado), enumerándose los mismos de la siguiente manera:
1.- Nombre de la ciudad y estado
2.- Año de fundación
3.- Tipo de asentamiento
4.- Origen y significado del nombre
5.- Área que abarca el centro histórico
6.- Características del centro histórico (morfología)
7.- Antecedentes de protección del centro histórico
8.- Planes, programas, patronatos y asociaciones existentes
9.- Acciones de renovación
1.- Aguascalientes, Aguascalientes
2.- 1575
3.- Español
4.- Por los manantiales de aguas termales encontrados en el lugar
5.- 86 manzanas
6.- La estructura urbana es ejemplo de aquellas ciudades que requirieron
adaptarse a los accidentes del terreno, ya que la tipografía imposibilitó
la formación de la retícula, características de otras
ciudades coloniales.
7.- d.n.e.
8.- d.n.e.
9.- 1997: rehabilitación de la plaza principal y restauración
de la catedral.
1.- Guadalajara, Jalisco
2.- 1542
3.- Español
4.- Del árabe, río que corre entre piedras. Ciudad originaria
de Nuño Beltrán de Guzmán, quien manda construir la
villa.
5.- 24 kilómetros cuadrados, 4000 fincas inventariadas
6.- La estructura urbana se planteó de acuerdo a las de las
demás ciudades coloniales, por lo que su traza se desarrolló
en forma de tablero de ajedrez.
7.- d.n.e.
8.- Patronato del centro histórico, barrios y zonas tradicionales
de Guadalajara. Plan de desarrollo municipal de Guadalajara.
Plan rector del centro histórico.
9.- 1994: Recuperación de la casa de los abanicos
1.- Mérida, Yucatán
2.- 1542
3.- Español
4.- Debido a que las antiguas edificaciones mayas produjeron una profunda
impresión en el conquistador Francisco de Ibarra a quien le recordaban
las ruinas romanas que se conservan en la ciudad homónima de España.
5.- 90 manzanas
6.- El desarrollo de la primitiva ciudad respondía a los dictados
de la época, bajo un esquema cuadrangular con calles y manzanas
trazadas a la manera de un tablero de ajedrez.
7.- d.n.e.
8.- Manual de leyes y reglamentos urbanos y de construcciones de Mérida.
9.- 1995: rescate del paseo montejo
1.- México, Distrito Federal
2.- Entre 1521 y 1524
3.- Prehispánico
4.- Del nahuatl, en el ombligo de la luna
5.- 9.1 kilómetros cuadrados
6.- Diseño reticular
7.- Se declara por decreto zona de monumentos históricos, el
11 de abril de 1980. Se constituye el fideicomiso del centro histórico
de la Ciudad de México, el 18 de diciembre de 1990. Es declarado
patrimonio de la humanidad el 11 de diciembre de 1987.
8.- Consejo del centro histórico (1980)
9.- 1994-2000: Restauración y conservación de la catedral
metropolitana; restauración del antiguo colegio de San Ildefonso;
restauración de la finca histórica en la calle seminario
No. 12; restauración de la antigua iglesia de Santo Domingo; rescate
de "La Casona" y restauración de la casa de Diego Rivera y Frida
Khalo.
1.- Pátzcuaro, Michoacán
2.- 1534
3.- Prehispánico
4.- Del purépecha, lugar de piedras
5.- 30 manzanas
6.- Se instaló cerca de las faldas de un pequeño y extinto
volcán conocido como el estribo grande. Aunque se pretendió
darle al asentamiento una cierta estructura reticular típica del
tablero de ajedrez, fue necesario que ésta se adaptara a las irregularidades
del terreno.
7.- d.n.e.
8.- d.n.e.
9.- d.n.e.
1.- Puebla, Puebla
2.- 1531
3.- Español
4.- "El pueblo"
5.- 79 manzanas
6.- Se extiende en el valle de Cuetlaxcoapan, en un plano cuadriculado
de calles relativamente anchas. Responde al típico esquema en forma
de tablero de ajedrez.
7.- Declarada patrimonio de la humanidad el 11 de diciembre de 1987.
8.- d.n.e.
9.- d.n.e.
1.- San Miguel de Allende, Guanajuato
2.- 1542
3.- Español
4.- Fray Juan de San Miguel estableció en las cercanías
de la actual ciudad una villa con el nombre de Itzcuinapan, dedicándole
como santo patrono al arcángel San Miguel.
5.- 30 manzanas
6.- Levantada en las faldas de las colinas, su estructura urbana debió
adaptarse a los aspectos topográficos del terreno, aunque procurando
respetar la forma reticular.
7.- d..n.e.
8.- d.n.e.
9.- d.n.e.
1.- Taxco, Guerrero
2.- 1528
3.- Indígena
4.- Del náhuatl, lugar del juego de pelota
5.- d.n.e.
6.- Encumbrada en la sierra guerrerense, se ha adaptado a las irregularidades
del terreno mediante plazas, plazuelas y tortuosas calles, conformando
un conjunto único.
7.- Declarada zona de monumentos históricos por decreto del
19 de marzo de 1990.
8.- d.n.e.
9.- d.n.e.
1.- Zacatecas, Zacatecas
2.- Entre 1546 y 1588
3.- Español
4.- Del náhuatl, gente del zacate
5.- d.n.e.
6.- La configuración de la ciudad se adapta al relieve accidentado
del sitio, mismo que con el paso del tiempo obligó a sus habitantes
a formar estrechas calles y callejones que desembocan en plazuelas de pronunciados
desniveles que proporcionan al conjunto urbano una fisonomía muy
particular.
7.- Declarada patrimonio de la humanidad el 11 de diciembre de 1993.
8.- d.n.e.
9.- d.n.e.
1.- Campeche, Campeche
2.- 1540
3.- Prehispánico
4.- Del maya, el señor sol garrapata
5.- 163 manzanas
6.- El núcleo que comprende la ciudad antigua se encuentra conformado
en la actualidad por restos de la vieja muralla que alcanzaba un perímetro
cercano a los 7.5 kilómetros.
7.- Por decreto presidencial es declarada zona de monumentos históricos.
8.- Plan parcial del centro histórico. Plan de desarrollo urbano
9.- 1993-1994: remodelación del archivo municipal; restauración
de los portales de San Francisco y cableado subterráneo en el recinto
amurallado.
1.- San Cristóbal de las Casas, Chiapas
2.- 1528
3.- Español (periferia indígena)
4.- En honor del obispo fray Bartolomé de las Casas, defensor
de los indígenas durante el siglo XVI.
5.- 80 manzanas
6.- Su edificación siguió un proceso similar al de otras
ciudades que se crearon en el territorio novohispano.
7.- Es la primera en la historia del país a la que se le expide
la declaratoria de zona de monumentos históricos el 10 de septiembre
de 1974. Declarada zona de monumentos históricos por el I.N.A.H.
el 13 de agosto de 1982.
8.- Plan de desarrollo urbano
9.- 1993: remodelación del teatro Zebadía; revitalización
de las plazas atriales de Guadalupe y Santa Lucía y rescate de la
panorámica escénica del centro urbano.
1.- Durango, Durango
2.- 1563
3.- Español
4.- El fundador de la ciudad, Don Francisco de Ibarra, era originario
de Villa de Durango, provincia de Vizcaya, España.
5.- 142 manzanas
6.- Contiene dos perímetros, el "A" que es la zona de mayor
consolidación y el "B" que se compone de tres apéndices.
7.- d.n.e.
8.- Plan parcial del centro histórico de Durango. 3 de junio
de 1993. Plan parcial de desarrollo urbano del centro histórico
9.- 1994: Proyecto para una plaza comercial, para 600 locatarios, aledaña
al excuarte Juárez; rehabilitación y restauración
del excuartel Juárez; mejoramiento de la plaza Baca Ortíz;
rehabilitación de pavimentos de calles y banquetas; mejoramiento
y/o rehabilitación de las fachadas colindantes al excuartel Juárez;
readecuación del paseo de las alamedas; rehabilitación de
áreas verdes y forestación; y diseño de nomenclaturas
y señalamientos.
1.- Guanajuato, Guanajuato
2.- 1554
3.- Español
4.- Del purépecha, lugar montuoso de ranas
5.- d.n.e.
6.- La explotación minera genera un crecimiento urbanístico
caprichoso, que obedecía a las irregularidades topográficas
del terreno.
7.- Por decreto presidencial se declara zona de monumentos el 28 de
julio de 1982. Declarada patrimonio de la humanidad en 1987
8.- Plan de desarrollo urbano Asociación Guanajuato Patrimonio
de la Humanidad A. C. (1988)
9.- 1993: revitalización integral de los barrios Mellado, Marfil,
Gavilanes y San Miguel; templo de la compañía de Jesús;
rescate de la imagen urbana de la plaza de La Paz.
1.- Morelia, Michoacán
2.- 1541
3.- Español (periferia indígena)
4.- Cuna del general José María Morelos y Pavón
5.- 178 manzanas
6.- Se encuentra en una loma de suaves declives. El trazado data de
la segunda mitad del siglo XVI, está adaptado al relieve de la colina
alargada y bien preservado.
7.- Declarada patrimonio de la humanidad en 1987 Declarada, por decreto
presidencial, zona de monumentos históricos el 21
de octubre de 1990.
8.- Plan de desarrollo urbano
9.- 1994: Red de energía eléctrica subterránea
del área central de la ciudad, primera etapa.
1.- Oaxaca, Oaxaca
2.- 1522
3.- Prehispánico
4.- Fundada sobre la antigua población indígena, Huaxyacayac,
cerca del lugar de las acacias.
5.- 170 manzanas
6.- El crecimiento físico de la ciudad desde su fundación
hasta 1908 fue prácticamente nulo, cuando se integra el pueblo de
Santa María Oaxaca.
7.- Declarada zona de monumentos históricos el 19 de marzo de
1976 Declarada patrimonio de la humanidad el 11 de diciembre de 1987
8.- Plan de desarrollo urbano (1994)
9.- 1993: restauración del teatro Macedonio Alcalá; empedrado
de calles del centro histórico. 1994: restauración arquitectónica
y restauración de pintura mural del convento de Santo Domingo.
1.- Querétaro, Querétaro
2.- 1531
3.- Prehispánico
4.- Del purépecha, querendar, lugar de peñas
5.- 4 kilómetros cuadrados, 1,400 edificios con valor histórico.
6.- Una colina sirve de límite entre los barrios indígenas,
al este y español al oeste.
7.- Se decretó zona de monumentos históricos el 30 de
marzo de 1981
8.- Programa de solución a la problemática vial y del
transporte (SOLPROVIT), 1994. Plan parcial del centro histórico
Plan de desarrollo urbano. Patronatos encargados de preservar su patrimonio
9.- 1993: construcción del jardín del arte; rescate de
la imagen urbana de la avenida corregidora; rescate y restauración
de los templos de Santa Clara de Jesús, Santiago y Santa Rosa. 1996:
restauración del templo de Santa Rosa de Viterbo
1.- San Luis Potosí, San Luis Potosí
2.- 1592
3.- Español (periferia indígena)
4.- Una de las misiones fundadas por los franciscanos era la de San
Luis, y potosí a partir de los descubrimientos de ricos yacimientos
de oro y plata por la ciudad minera boliviana que en quechua significa
"gran riqueza".
5.-1.93 kilómetros cuadrados
6.- Ciudad plana, aunque ligeramente inclinada de suroeste a noroeste
7.- Se declaró área protegida y zona de monumentos el
14 de diciembre de 1990.
8.- Plan de desarrollo urbano de centro de población
9.- 1993: restauración de la avenida Juárez, plazas de
San Miguelito- San Sebastián y explanada Ponciano Arriaga.
1.-Tlaxcala, Tlaxcala
2.- Entre 1519 y 1524
3.- Español
4.- Del náhuatl, Texcallan, despeñadero
5.- 35 manzanas
6.- Aunque la estructura urbana se ajustó al esquema reticular
del tipo de tablero de ajedrez, la distribución de las edificaciones
no siguió del todo el patrón colonial típico, ya que
la parroquia no se ubicó en la plaza principal junto a los edificios
de gobierno.
7.- d.n.e.
8.- Plan parcial de centro histórico. Plan de desarrollo urbano
9.- 1993: remodelación de las plazas San José y Juárez
1.- Veracruz, Veracruz
2.- 1519
3.- Español
4.- Nombre que dio Hernán Cortés por las riquezas de
su entorno
5.- 88 manzanas
6.- Se levantó sobre una extensa planicie costera y su estructura
urbana se estableció mediante una retícula limitada por el
mar en su extremo nororiente. Las manzanas que la conforman no son regulares
y se desarrollan hacia el norponiente y surponiente de la plaza principal
a cuyo costado sur se ubica la catedral.
7.- d.n.e.
8.- Plan de desarrollo urbano
9.- 1994: restauración del portal de miranda 1997: restauración
del fuerte de San Juan de Ulúa
Relación de las 44 ciudades incluídas en el Fondo Mixto Ciudades Coloniales:
Aguascalientes, Ags.; Loreto, B. C. S.; Campeche, Camp.; San Cristóbal de las Casas, Chis.; Palenque, Chis.; Tuxtla Gutiérrez, Chis.; Ciudad de México, D. F.; Saltillo, Coah.; Durango, Dgo.; Dolores Hidalgo, Gto.; Guanajuato, Gto.; Irapuato, Gto.; Salvatierra, Gto.; San Miguel de Allende, Gto.; Taxco de Alarcón, Gro.; Guadalajara, Jal.; San Juan de los Lagos, Jal.; Zapopan, Jal.; Morelia, Mich.; Pátzcuaro, Mich.; La Piedad Cavadas, Mich.; Uruapan, Mich.; Tequesquitengo, Mor.; Nuevo Vallarta, Nay.; Puerto San Blas, Nay.; Tepic, Nay.; Bahías de Huatulco, Oax.; Oaxaca, Oax.; Puebla, Pue.; San Pedro Cholula, Pue.; San Andrés Cholula, Pue.; Querétaro, Qro.; Ezequiel Montes, Qro.; San Luis Potosí, S. L. P.; Alamos, Son.; Tlaxcala, Tlax.; Tlaxco, Tlax.; Boca del Río, Ver.; Coatepec, Ver.; Córdoba, Ver.; Veracruz, Ver.; Mérida, Yuc.; Valladolid, Yuc.; Zacatecas, Zac.
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2000
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