Es sobre todo a partir de la II Guerra Mundial cuando la limitación y abolición de la pena de muerte se pone en cuestión y a debate a través de distintos organismos y forums internacionales.

-Convenios de Ginebra de 1949, contemplan especialmente la pena de muerte en tiempos de guerra, el genocidio y el trato humanitario a los prisioneros.

-Convenio Europeo de Derechos Humanos, de 1950. En 1981 el Consejo de Europa comienza los trabajos preparatorios para el Protocolo Adicional VI, relativo a la abolición de la pena de muerte, prohibe reintroducir la pena con carácter absoluto en tiempos de paz. España ratificó este Protocolo en 1985. (Ver Anexo 1).

-Convención Americana sobre Derechos Humanos, 1969. En vigor desde 1978.

-Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, 1966. La Asamblea General de las Naciones Unidas lo adopta y promueve la abolición de la pena de muerte en los ordenamientos jurídicos internos de los Estados. Impulsó que fuersen iniciados los trabajos preparatorios de un protocolo facultativo destinado a abolir la pena de muerte, el Segundo Protocolo Facultativo del PIDCP. (Ver Anexo 2).

-La única Declaración Internacional que reconoce de forma expresa que el derecho a la vida permite excepciones es la Declaración Universal Islámica de Derechos y la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos (la Carta de Banjul) guarda silencio al respecto.

-Hungría representa una forma de abolir la pena de muerte única en la práctica internacional. En resolución publicada el 24 de octubre de 1990, el Tribunal Constitucional de la República Húngara declara la pena de muerte inconstitucional y revoca todas las reglas legislativas relativas a su aplicación y ejecución, atendiendo así la petición de la Liga contra la Pena de Muerte.